Reseñas DC – Batman#85

Edición original:Batman#85 USA.
Guion:Tom King.
Dibujo:Mikel Janín y Hugo Petrus.
Color:Jordie Bellaire
Rotulista: Clayton Cowles.
Portada: Tony S.Daniel y Tomeu Morey
Editor:Jamie S. Rich
Formato:Grapa 40 páginas.
Precio:4.99$.

Cuando algo penetra en lo mas profundo de tu ser la racionalización es fútil. Puede que a tu alrededor haya quienes señalen los errores o las equivocaciones que tú no distingues, eso o ese o esa que ha conectado contigo y se va a quedar para siempre. Pueden ser unos amigos, una película, una forma de ver la vida, un equipo de fútbol o una persona a la que sientes que siempre has amado y siempre amarás. Hay muchas banderas sentimentales que alzamos y que nunca, nunca, bajamos, pues son lo que somos.
Siempre habrá padres que intentarán que seas una persona feliz y por ello harán cualquier cosa, pero en muchas ocasiones se equivocan en los consejos y en sus actos. También habrá amigos o conocidos que se encuentran alienados, sin saberlo se han rendido ante la idea de que lo que somos nunca puede cambiar ¡Pero la esperanza es lo último que se pierde!
La vida es elección, y no solo de un día sino de todos los días. Todos los días elegimos ser lo que somos y como somos. El amor nos puede salvar, un día estás a punto de rendirte, de irte, de abandonar, pero ahí esta ella – ¿en la calle o en un barco? – y todo cambia, sientes al día siguiente que es la persona que has esperado toda la vida y quien te besará mientras cierra tus ojos en tú último respiro. Pero esa elección eterna hay que alimentarla todos los días, es tu elección diaria, enfrentarte a la vida juntos, nunca más solos.

“¿Pero cuándo vas hablar sobre Batman#85?”

Ahora empiezo, de verdad, pero permitidme un breve apunte más. Las personas con las que conectamos son importantes, influyentes, rehabilitadoras, salvadoras, pero también el arte, la clave es la conexión, y esta, como se ha señalado anteriormente, es inexplicable.
Yo siento, no escucho, la música de Pearl Jam , yo siento, no veo, Interestelar , yo siento, no miro, los cuadros de Van Gogh y yo siento, no leo, ni miro, las páginas del Batman de Tom King, Mikel Janín, Jordie Bellaire, Clayton Cowles y Hugo Petrus .

”¿Pero hombre, Pedro, qué es un simple tebeo superheroico?”

Lo dicho, cuando uno conecta con algo o alguien ¿cómo poder explicarlo? Un día uno lee Ensayo sobre la ceguera , y al siguiente estás junto al ancla que te ha izado, visitando la isla/tierra de fuego, y sin darte cuenta, el tiempo pasa y te encuentras es en un bar señalando a alguien que no te conoce que todo puede cambiar – incluso los personajes de ficción – que hay que tener esperanzar y nunca rendirse, lo señala la vida y sus vicarios: el deporte – Bakero, Ramos, Solksjaer, Jordan, Irving… – o la ficción.

“¡Y Batman#85! Me aburro”

Un apunto más y comienzo con el tebeo.

Soy consciente que mis padres hacen todo por muy bien, pero ya no soy su chiguito. Y del mismo modo me pasará a mi con mi hijo y mi hija, ahora dependen de mí y de mi mujer, pero en unos años, ellos elegirán quienes ser y nosotros no podremos obligarlos a nada. A cada uno le llega un momento en el que ha de elegir, ” ¿me voy o me quedo?” , que ha de decidir, “¿será ella con quien haré vida, y me besará en la lecho de muerte”? , momentos que no son magia o suerte, sino algo por lo que has luchado y has de luchar todos los días, ya que es lo que has elegido ser. En ocasiones es difícil salir de la idea de que nada cambia, que somos lo que han decidido ser, que no hay avance posible: que hay jugadores que siempre fallan en los momentos cruciales, que hay villanos de segunda de los que nunca nadie se acuerda y siempre serán unos perdedores, y que hay héroes oscuros que nunca verán la luz. Pero siempre hay una luz a la que agarrarse, siempre hay un momento en el que te dicen ”Sí” y todo cambia.

Batman#85 presenta una estructura fragmentada que puede dividirse en tres momentos. El primero es el presente , situado donde finalizó el anterior numero, el enfrentamiento final en la Mansión Wayne. El segundo trascurre el bar Porsky´s donde están retransmitiendo un partido de los Knights Gotham . Y el tercero se desarrolla en el futuro .
Para que el lector se de cuenta de qué va esta tebeo tan especial de 37 páginas, señalar que el escenario de la mansión ocupa 8 páginas, el del bar, 7, y el del futuro ¡20! Por lo tanto es un tebeo donde el clímax final, entendiéndolo como el enfrentamiento final, apenas protagonizada un cuarto de las páginas del cómic. Eso no significa que la lucha final no resulta importante, pues muestra que este nuevo Batman es mejor que el que comenzó Rebirth, y lo es en muchos aspectos.
Hay sorpresas por ambos bandos con los que los que vencer esta lucha final, pero está no vendrá por el as en la manga que tenga cada equipo, sino más bien por el recuerdo, el cual hace que uno baje los brazos, y el otro señale una de las claves del tebeo, la diferencia entre ambos personajes reside en una frase que desde hoy se convierte en mítica.

El peso del cómic recae en el día después, en dejar todo atado y bien atado una vez derrotado el villano .
El primer agujero que tapar es sobre uno de los personajes que salvó al Batman suicida que se nos presentó en Batman#1 en el mes de junio de 2016. Y para ello King no se saca un regalo de la manga, muestra de que no da puntada sin hilo.
Tras ese regalo, toca ver al prisionero – y si bien el tebeo tiene una curiosa relación con Star Wars , ahora nos recuerda al El silencio de los corderos – e incidir no sobre las diferencias de los dos personajes sino más bien lo que les une.
La tercera visita…es posible que aún haya lectores que no se lo crean o que no se lo perdonen a King , pero para avanzar, para cambiar, para madurar, es necesario alejarse de los padres.
Tras estos encuentros, donde un héroe y un villano recogen lo sembrado, llega el momento de Bat y Cat. Entiendo a quienes estos momentos románticos o moñas no les guste, pero a un servidor de 40 años y enamorado, estos encuentros en las azoteas y en la cama de Batman/Bruce y Catwoman/Selina, le ponen los pelos de punta.
Es difícil sentirse representado por un héroe huérfano que decide luchar contra el crimen de su ciudad con la ayuda de un Robin y de un mayordomo, todo lo contrario con un hombre que lucha junto a su amada, que se pregunta la necesidad de legalizar un sentimiento y que ama a una mujer por la noche, por la mañana, ayer, hoy y mañana. Lo importante no es el casamiento sino el amor profesado y compartido, y en ello brilló Batman#50 el pasado 4 de julio, y brilla este Batman#85 del 18 de diciembre: Acostumbrémonos hasta el nuevo reboot, Bruce y Selina se aman para siempre, hasta la muerte, y no hace falta juez que lo confirme.

Las páginas que se desarrollan en el bar Porky´s apenas son seis, pero son el complemento perfecto para este excelente número final. Podría decirse que son seis páginas al estilo King y que a más de un lector le recordará al primer número del cruce La Chapa .
Dos desconocidos se encuentran en un bar gracias a un partido de fútbol americano, y ante el final del mismo, ambos personajes muestran su postura respecto la vida ante la opción de que la victoria de los Gotham Knights recaiga en la jugada de Campbell. Para uno es la misma historia de siempre, Campbell cogerá el balón y lo perderá, para el otro es una nueva oportunidad, la historias no siempre se repiten, al igual que las personas – y los personajes – cambian.

Todo aquél que haya leído el tebeo, se habrá percatado que la historia preparada por King , así como sus ideas y visión de vida me ha gustado mucho. Pero esas ideas se quedan en nada si no son bien narradas y transmitidas al lector, lo cual hacen de manera fascinante dos habituales de este run : Mikel Janín y Jordie Bellaire .
A estas alturas y tras el soberbio trabajo en los números #82-83, poco más se puede decir de el arte de estos dos artistas narrativos.
Janín se encarga de 34 de las 37 páginas de la historia final – Petrus se ocupa de las tres páginas protagonizadas en la celda – y su trabajo ha debido de resultar muy laborioso al tener que realizar diferentes representaciones del héroe y sus emociones.
De la historia del presente destacaría especialmente la página veinte con la rejilla de 3×3 donde realiza un fantástico trabajo narrativo y de trasmisión de los sentimiento del personaje a través del rostro.
Del futuro subrayar lo bien resuelto el ascenso a la torreta, pero especialmente la trasmisión de sentimientos con la colaboración de Bellaire y su paleta de azules. Es en estos momentos donde se encuentran mis páginas favoritas del cómic por lo bien que son narradas por Janín : la noche lluviosa y la batseñal iluminada, la splash en la que se recuerda la playa, la página muda – ¡pero cuanto dicen esas cinco viñetas! – y la pasional y azulada que comienza con un ”No importa” .

En las páginas del Porky´s el peso recae en los ladrillos en los que se retransmite el final del partido y en el dialogo entre los desconocidos, pero Janín brilla en la comunicación no verbal a través del rostro de los personajes, en ese apretón de manos, en el choque de copas, pero especialmente en el ritmo de la página final.

Bellaire es una narradora más, logra transmitir los sentimientos de los personajes con la adecuada gama de colores y con una pequeña variación de los mismos puede generar emociones opuestas. He ahí el ejemplo de los tonos anaranjados, los cuales aumentan la sensación de amenaza y de lucha que llenan la mansión Wayne, pero que al ser empleados, con ligeras diferencias, en el bar Porky´s, transmiten calidez y sinceridad. Lo mismo ocurre con las gamas de azules, que en un caso representan un nuevo comienzo luminoso, en otro condena y final, sin olvidar ese azul intenso que llena la página y que dentro de esta colección significa amor eterno.

¡Eso..Eso…Eso es todo amigos!