Edición original: DC Comics
Guión: Marguerite Bennett. James Tynion IV
Dibujo: Steve Epting
Entintado: Steve Epting
Color: Jeromy Cox
Formato: Grapa, 32 páginas
Precio: $2.99
Fue una de las primeras series de Nuevos 52 con las que tuve contacto, y aún recuerdo la Batwoman de W. Haden Blackman y J.H. Williams III como una de las mejores historias del personaje que he leído, así como una de las colecciones que más me gustaron de esa etapa que ya ha quedado atrás con Rebirth y que además creo que estuvo bastante infravalorada y, por desgracia también, muy poco conocida entre el gran público. En cualquier caso, fue una colección a reivindicar muy interesante que nos contaba la historia personal de Kate Kane, así como profundizaba en sus demonios personales, y todo ello de la mano de artistazos de la talla de Trevor McCarthy, Francesco Francavilla o el propio Williams III.
Todo iba viento en popa en la serie hasta que una polémica saltó a la palestra, los dos guionistas, Blackman y Williams, abandonaban la colección indignados porque DC Comics les prohibió el matrimonio de su personaje con su novia, la capitana Maggie Sawyer, a la que Kate se declaró en el número 17 de la colección. El propio Didio salió en los medios diciendo que el motivo de tal prohibición editorial no era su condición sexual, sino el tipo de personaje que era, ya que al ser de la batfamilia por definición tenía que ser una justiciera dedicada por completo a servir a los demás sin poner sus relaciones personales por encima. Una de las excusas más pobres y poco creíbles que he escuchado en mi vida, francamente. DC Comics no tuvo los mismísimos de transgredir un poquito y convertir a Batwoman en el primer (o uno de los primeros y pocos, no tengo el dato exacto) personaje femenino homosexual que contrae matrimonio en el género superheroico. Una hazaña que bien habría podido servir para avanzar socialmente un poquito en esta industria, pero que se echó por la borda ante la cobardía de DC Comics. Total, que los guionistas abandonaron la colección en el número 24, dejándola al cargo de Marc Andreyko, cuyo recorrido finalmente finalizó en el número 40. Yo dejé de leer en el número 24, y os puedo asegurar, que al menos hasta ese número, era una colección muy interesante y muy bella a nivel artístico.
Y tras esta buena etapa, injustamente manchada al final, DC Comics nos sorprendía con el anuncio de que tras Rebirth, una nueva etapa de Batwoman iba a comenzar, de la mano de Marguerite Bennett y James Tynion IV. Dos grandes guionistas que podían hacer una muy buena serie. Y en este mismo punto estamos, esperando qué nos pueden ofrecer estos dos en compañía de un dibujante brillante como Steve Epting. Y lo que nos hemos encontrado, al menos hasta el momento, que es muy poquito lógicamente, cumple sobradamente las expectativas, y resulta muy prometedor.
Tras analizar el número Rebirth de transición, que nos introduce un poco en la historia de Katherine Kane para todos aquellos que no la conocíais, y que reseñó mi compañero Gustavo hace algunas semanas, nos toca entrar de lleno en el primer arco de la colección, titulado The Many Arms of Death, y en el que no hay mucho que contar, salvo que veremos a Batwoman en plena acción luchando contra un monstruo que utiliza el Veneno para transformarse e intentando resolver una trama terrorista con armas de por medio, así como un misterioso personaje al parecer nativo americano muy interesante.
A destacar especialmente la distante y a la vez cercana relación entre Julia Pennyworth y Kate Kane, que veremos a ver cómo evoluciona y dónde nos lleva, así como la revelación de un evento en el pasado cercano de Batwoman que parece ser que se relaciona con la trama principal de la serie. Vamos, que tenemos tres o cuatro cosas solo en este primer número que llaman bastante la atención, y que te dejan deseando leer el siguiente número para ver cómo continúa, o más bien cómo se desarrolla la historia presentada, lo cual es de alabar por parte de los guionistas. Esperemos que ahora que Batwoman vuelve a estar de moda por su participación en Detective Comics, Bennett y Tynion IV sepan sacarle jugo y alejarla de la sombra alargada y acaparadora de su primo, mostrándola así como un personaje fuerte e independiente que puede brillar por sí solo perfectamente y sin la ayuda de nadie.
El apartado artístico corre a cargo de Steve Epting al dibujo y entintado, y Jeremy Cox al color. Con respecto a Epting, al que conocemos por trabajos como el Aquaman noventero de Dan Jurgens, la larga etapa de Ed Brubaker en Capitán América, o la reciente Velvet en Image comics, también en compañía de Brubaker. Epting tiene un estilo realista que conjuga muy bien con las historias de género negro o policiaco, y por ello suele ser un compañero ideal para Brubaker, ya que sabe jugar muy bien con las sombras y diferentes efectos similares. Su trabajo en Batwoman es bastante bueno, así como el de Jeremy Cox al color, especialmente en colores vivos que contrastan genial con los tintes oscuros de Epting en determinadas escenas del número, y en concreto en un flashback, pero quizás le hemos visto brillar incluso aún más en otras obras, como en Capitán América o en Velvet. Es más, me atrevería a decir que en el número anterior estuvo más fino, especialmente en lo concerniente a los diseños faciales de los personajes. Puede que necesite tiempo para hacerse con el personaje y el universo, aunque de momento insisto en que su trabajo es bastante bueno, algo que puede observarse especialmente en las portadas, que son una auténtica obra de arte, y eso es algo digno de elogiar, tras la alargada sombra un titán como J.H. Williams III. Por fortuna, Steve Epting es el dibujante regular de la colección y seguiremos disfrutando de su arte durante los siguientes números que están por venir, y esperemos que por mucho tiempo más.
En definitiva, Batwoman es una colección interesante con dos grandes guionistas y un mejor si cabe dibujante que puede dar mucho de sí si saben aprovechar todo lo bueno que puede dar un personaje tan apasionante y complejo como es Kate Kane, que a veces ha estado quizás un poco denostado. Es además, como todo en Rebirth, un buen punto de partida para todo aquel que esté interesado en el personaje y nunca se haya atrevido a sumergirse en su universo. Esperemos que Bennett y Tynion IV sepan sacarle partido y brindarnos una buena etapa, y que si está funcionando bien al menos a nivel de críticas, no sea abruptamente cancelada, cambien o se tengan que ir los artistas por motivos absurdos e injustificados, ejem…
Edición original: DC Comics Guión: Marguerite Bennett. James Tynion IV Dibujo: Steve Epting Entintado: Steve Epting Color: Jeromy Cox Formato: Grapa, 32 páginas Precio: $2.99 Fue una de las primeras series de Nuevos 52 con las que tuve contacto, y aún recuerdo la Batwoman de W. Haden Blackman…
Reseñas DC: Batwoman #1
Reseñas DC: Batwoman #1
2017-03-21
Cristian Miguel Sepulveda
Guión - 8
Dibujo - 8
Interés - 8
80
8
Prometedor
Buen comienzo de una serie con un personaje que puede dar mucho de sí y que nace bajo la sombra de una gran etapa anterior que esperamos que pueda como mínimo igualar.
Vosotros puntuáis: 6.98 ( 8 votos)
Nunca me gustó que fueran tan rápido con la relación entre Kate y Maggie – sin contar que muchos querían un Kate x Renée -. Creo que hubiera sido más un «ser transgresor por ser transgresor», que hacer justicia con el colectivo homosexual haciendo una boda. La justificación quizás no fue la mejor, pero las culpas iban, en el mejor de los casos, al 50% con los autores de la serie.
Pero todo aquello ya pasó, incluyendo tantas buenas ideas tan desaprovechadas durante la etapa de Mark Andreyko, y volvemos a tener una serie cómo marcan los cánones para Kate Kate. Quizás jamás habrá un dibujante como JH Williams III para Batwoman, pero si juega bien sus cartas, la etapa de Marguerite Bennett puede estar a la altura de la etapa original de Greg Rucka. Y luego, el tiempo ya dirá cuál será la mejor en terminos globales ^^