Era el año 2011, en tiempos del Batman Incorporated de Grant Morrison. Dick Grayson seguía siendo Batman por decisión de su mentor, Bruce Wayne, y para escribir sus aventuras en la cabecera Detective Comics a partir de su número 871 apareció un escritor casi desconocido llamado Scott Snyder. Había llegado de Marvel poco antes, donde tuvo poco recorrido y entró directamente a DC escribiendo la serie American Vampire junto al mismísimo Stephen King para Vertigo. Junto a él estaban dos dibujantes fuera de serie: Jock y Francesco Francavilla. Juntos hicieron thriller escalofriante en el entorno del Caballero Oscuro. A la vez escribiría junto a Kyle Higgins la miniserie Batman: Puentes de Gotham donde comenzaría a hablar sobre la fundación de la famosa ciudad así como el debut de una sociedad secreta que daría que hablar muy pronto.
Con la llegada de Los Nuevos 52 se le confió la tarea de suceder a Morrison al frente de la franquicia del Hombre Murciélago. Estaría acompañado en esta tarea por Greg Capullo, habitual colaborador de Todd McFarlane en su Spawn y que quería dar un próximo paso en su carrera con sendas ofertas de Marvel y DC; se decantaría por esta última y juntos realizarían una etapa de cinco años donde se verían grandes historias como la de El Tribunal de los Búhos, un concepto muy interesante al que le sabría sacar jugo; dos historias del Joker que pueden gustar más o menos como son La Muerte de la Familia o Final del Juego, una revisión al origen del personaje como es Año Cero y finalmente una breve etapa con James Gordon como guardián de Gotham llamada Superpesado. Le pasaría el testigo a Tom King en la colección pero distaría mucho de alejarse de Batman.
En 2016 comenzaría una nueva colección llamada All-Star Batman, nada que ver con la realizaron hace años Frank Miller y Jim Lee. En esta colección realizaría una revisión a los villanos y secundarios del Caballero Oscuro junto al arte de grandes artistas del medio junto a dibujantes como John Romita Jr., Jock o Rafael Alburquerque. Poco después realizaría un evento llamado Noches Oscuras: Metal, de nuevo junto a Capullo, donde los villanos eran versiones maléficas del Hombre Murciélago, destacando por encima de ellas uno de los personajes más populares de la editorial en el último par de años, el Batman que Ríe, una amalgama entre Batman y el Joker. Una historia interesante pero que al autor se le escapó un poco de las manos debido a la amplia cantidad de conceptos que trataba de abarcar. El propio Batman que Ríe recibiría una miniserie del mismo nombre que sería una secuela de esa historia y a la vez se ha publicado hoy lo que sería la última historia de Snyder con el personaje después de 8 años caminando juntos. El guionista ha escrito su versión del principio del personaje y ahora escribe su final. Esta reseña aborda el primer número de Batman: The Last Knight on Earth.
En la historia Bruce Wayne va al Callejón del Crimen, el lugar donde murieron sus padres, y allí le tienden una trampa. Se levanta en el Asilo de Arkham donde Alfred Pennyworth le dice que todo era un sueño y Batman es un producto de su esquizofrenia y que los villanos en realidad eran los enfermeros en su cabeza. No sirve de nada, Bruce Wayne pilla rápido el engaño y ve que Alfred es mucho más viejo, en concreto 20 años. Después de despedirse de él, sale al exterior y ve que el mundo está devastado y se fija en una farola que tiene la cabeza del Joker, el cual no puede estar más emocionado de ver a su némesis. Juntos se embarcarán en un viaje para ver que le ha pasado al mundo.
Scott Snyder y Greg Capullo (el dibujante sustituto de la miniserie, en un principio iba a ser Sean Murphy, pero está ocupado con su universo de Batman: Caballero Blanco) realizan su última historia de Batman desde el sello Black Label, con casi 60 páginas. Tres números donde se verá si Batman podrá salvar el mundo. En este primer número los autores pisan el acelerador: se ve cómo Batman ha llegado hasta este mundo post-apocaliptico, se ve porque el planeta está en ruinas y plantea a la vez un viaje del héroe de un Bruce Wayne en un mundo que no es nadie y de una “buddy movie” con la cabeza de un Joker que hará de contrapunto cómico. Interesante ver a mayores la reformulación de las amazonas con varias heroínas de DC y como no, con Wonder Woman a la cabeza. También son cautivadoras las causas del declive de la sociedad, muy en consonancia con la realidad, si bien es cierto que en los inicios es cuando gana Snyder. El escritor plantea argumentos muy interesantes, su mayor defecto es que a veces sus historias son como querer domar a un caballo desbocado: es fácil montar, pero lo difícil es mantener el control y luego le cuesta mucho pensar cómo terminarlas de forma adecuada. Historias como Año Cero, Noches Oscuras: Metal o su actual etapa en Liga de la Justicia son los mejores ejemplos de ello mientras que gana más con argumentos más simples y terrenales.
Capullo por su parte se mantiene en su línea, visualmente es impresionante y agradable de ver y narra muy bien las escenas de acción. Sin embargo, suele mantener algunos de sus defectos: rostros iguales o poco detalle en algunos personajes, sin embargo, logra mantener un nivel acorde a un proyecto de esta envergadura.
Finalmente, Batman: The Last Knight on Earth supone un buen punto de partida para ver una nueva (no hay que olvidar que no es la primero ni será la última de un futuro distópico del Caballero Oscuro) historia post-apocalíptica de Batman donde el guionista finalizará su recorrido con un personaje que ha sido un pilar insostenible de su carrera. Las ventas del Batman de Snyder han sido muy elevadas así como su trabajo con este personaje ha ayudado al guionista a alcanzar nuevos proyectos por lo que visto de cierta forma ambos se han ayudado mutuamente. Solo cabe cruzar los dedos para que el escritor no repita sus mayores fallos y la historia no descarrile y se pueda ver una de las historias más prometedoras del Hombre Murciélago en mucho tiempo.
El Viejo Wayne
Guión - 8
Dibujo - 7
Interés - 7
7.3
Scott Snyder aborda su versión del final del Caballero Oscuro junto a Greg Capullo al dibujo con una premisa muy interesantes al principio. Solo cabe esperar que el guionista no reincida en sus defectos habituales y el argumento no se descontrole en el nudo y desenlace.
