Estamos ante el inicio de un nuevo arco argumental, en este caso centrado en Rondador Nocturno, en el que, como no, se intentará dar luz a sus orígenes y desvelar, ¿secretos?, trascendentales para él mismo, como para el resto de sus compañeros mutantes.
Vaya por delante, que llevo mas de un año pensando que la Patrulla X es la hermana fea de los mutantes, esa que por mucho que le busques algo, no lo encuentras ni por asomo. Y si encima se la compara con New X-Men, pues apaga y vámonos. Chuck «es dificil hacerlo peor, pero lo intento» Austen, ha convertido a muchos de los personajes en reflejos totalmente distorsionados de los originales, de tal modo, que uno no sabe si está leyendo un cómic de la Patrulla, o viendo una edición de Gran Hermano, donde el que no está medio loco, es un enfermo/a sexual, donde parece que lo mas importante es hablar de sexo ( y para esto, ya tuvimos a la Doctora Ochoa).
Y después de esta crítica ¿objetiva?, pasemos a lo que es la saga en sí. Una sorpresa incial; no parece tan mala como otras, o al menos en estos primeros dos números. Eso no quiere decir que el listón se haya elevado mucho, pero bueno, tiene algo de interés. Y supongo que se debe a que, siempre que se trata de desvelar un origen, a uno le pica la curiosidad.
La primera parte, el prólogo, es entretenida; Sin ser nada del otro mundo, nos explica como era la vida de Mística antes de que todo el mundo descubriera que era mutante. Pegas: Muchas. Primero el tiempo de la acción; ¿ Solo hace veinte años desde que tuvo a…?Muy poco tiempo me parece, pero bueno. Por otro lado, la última escena en plan melodrama de sobremesa es demencial.
En esta primera parte, el dibujo corre a cargo de Sean Philips, que cumple pero no está a la altura de otros trabajos.
La segunda parte, nos llevará hasta el lugar, donde, supuestamente encontrará el origen nuestro elfo azul. Un poco fantástico lo del lugar (que para decir esto de un cómic ya tiene que serlo!), pero bueno, acostumbrados a otras tramas de este guionista, se puede leer.
El dibujo de esta parte corre a cargo de Philip «soy malo pero me da igual» Tan; No sé en qué estilo englobarlo; Trazo sucio, cuerpos en algunas ocasiones deformes…rostros pseudomangas, todo un compendio de mal hacer.
En definitiva, que hemos pasado de un producto malo a otro un poco mejor, que, viendo los números anteriores, se pueden tachar como de suspenso con nota.