La otra legión de DC
«Estamos hechos un grupo de fascistas ¿eh?»
El segundo domingo de cada mes toca retro-reseña. Es rotativo. Nos vamos turnando con Gustavo y Kike. Cuando llega mi momento me pongo algo nervioso e inquieto. Contemplo la posibilidad de huir cobardemente e inventarme un problema familiar para escaquearme.
La idea (ya lo sabéis pero así alargo el incio) es reseñar algo que se haya publicado en el pasado (preferiblemente por Zinco) que nunca haya sido reeditado y que valga la pena. Una manera de reclamar su reedición y de calmar el síndrome de nostalgia de la sección DC.
Hace tiempo que contemplo la idea de retro-reseñar L.E.G.I.O.N. Sin embargo, Kike me avisa (advierte/amenaza) de que tendré que hablar de Invansion y no sé qué más.
Vale, Enric, calma, ni que hubieras escrito un libro sobre Zinco.
L.E.G.I.O.N. (Licensed Extra-Governmental Interstellar Operatives Network) se crea en las páginas de Invasion. El evento de DC del 89, cuando los eventos tenían premisas interesantes y humildes (según el canon actual). Una invasión extraterrestre, ya ves tú. El crossover lo escribían Giffen y Mantlo, lo dibujaba McFarlane. Se trata de un Todd mucho más controlado, supongo que por algún editor y por sus ganas de hacer las cosas bien, antes de darse cuenta de que daban igual los errores de rapport y anatomía. Aun así, McFarlane tiene sus cosas chapuceras (ríete tú de las manos que dibujan las IAs) pero su narrativa es legible y el descontrol aún no había llegado a los niveles de los tres números que dibujó de su Spawn.
Tras Invasión, L.E.G.I.O.N. pasó a protagonizar su serie. Tal cual. El L.E.G.I.O.N.’89 #1 empieza en el punto en el que dejamos a los personajes en el evento.
Vemos a Vril Dox (el hijo no reconocido de Brainiac) preso por parte de la Alianza en Starlag en el primer número de Invasión. Dox y sus compinches escapan destruyendo la prisión para conformarse como una especie de equipo y derrocar a los tiranos de colu y de paso fundar una nueva colección: L.E.G.I.O.N. 89. Recordemos que en ese momento los Green Lantern habían sido desmantelados. El universo funcionaba (más o menos como siempre) sin su policía intergaláctica. Dox tenía la intención de fundar una nueva entidad policial interplanetaria que supliera a los GL.
La serie reflejaba en el título el año en el que estaba siendo publicada. En ese caso en el 89, en la edición española (que salió dos años más tarde) les debió parecer una idea fabulosa obviando el cortoplacismo que implicaría volver gilipollas lelos a los coleccionistas o a los lectores normalitos que simplemente quisieran recuperar la etapa décadas después.
Por tanto L.E.G.I.O.N. ’91 recopila los números USA de L.E.G.I.O.N. ’89, 90 y 91 que además no se renumeran por año. No sé si se entiende. Si tenéis alguna duda, llamad a Kike. O a Gustavo.
La colección es una especie de crisol, un cruce de caminos. El grupo de personajes nuevos o poco conocidos tienen trazas de la Legión de Superhéroes, de la cosmología DC y recibe invitados que se proyectan desde estas páginas hasta el estrellato más rutilante. Sí, hablo de Lobo.
Se trata de un grupo de superhéroes galácticos que están “obligados” a formar equipo bajo la batuta del manipulador Vril Dox. Les une una especie resignación, no están a gusto en el grupo, no se fían del líder pero no tienen otra opción, nada mejor que hacer. No se llevan bien, tienen personalidades contrapuestas y poco heroicas. Sus motivaciones son mundanas y realistas, como trabajar en una oficina. No falta el humor, ni los diálogos ocurrentes pero no llega al nivel de comedia de la JLI (coetánea en ese momento).
Pero antes de ir a los autores hablemos de los personajes:
Vril Dox. Natural de Colu. Heredero de Brainiac. Maquiavélico, manipular, amoral, personaje frío y sin emociones que carga con el lastre de ser el heredero de una de los mayores criminales del universo.
Garryn Bek. Policia del narco-planeta Cairn. Se muestra como muy manipulable, pusilánime y veleta hasta poseer la capacidad de controlar un ojo gigantesco y omnipotente que lo convierte en un déspota.
Strata. Este personaje de piedra nos supone uno de los aspectos más originales de la serie. Aparentemente es de sexo masculino pero para sorpresa de los lectores, llegó a la pubertad se transformó en una forma cristalina, poniendo de manifiesto que era una mujer. Tiene un carácter tranquilo y reflexivo.
Lyrissa Mallor. Campeona del planeta Talok VIII es una implacable guerrera, práctica y capaz que asume el liderazgo interino del grupo durante la muerte de Dox para pasar a ser la coordinadora del grupo en una jefatura compartida con Dox.
RJ. Alienígena del planeta Durlan que tiene la capacidad de cambiar su forma. Su presencia en el grupo es bastante secundaria.
Stealth. Rechazada por los gryx por considerarla mutante se trata de una guerrera alienígena extremadamente letal y violenta. Dominada por sus hormonas y necesidad de reproducción viola y asesina a Vril Dox.
También se añaden al grupo Fase, un personaje que apenas se desarrolla en los pocos números de la serie y Lobo como secundario, del que hablaremos más adelante.
Los guionistas fueron Keith Giffen (los diez primeros números) y Alan Grant como dialoguista hasta la marcha de Giffen que pasó a ser el escritor de la serie en solitario. Al dibujo un Barry Kitson primerizo pero eficaz y narrativamente correcto. Las portadas del genial Kevin Maguire le daban un tono adecuado de empaque de calidad.
La serie empieza con un primer arco en el que el grupo se desplaza a Colu para erradicar un régimen dictatorial. Como hemos dicho, L.E.G.I.O.N. pretendía ser una especie de grupo interespacial que sustituyera a los Green Lanterns en lo que se refiere repartir la justicia cósmica. Sin embargo, el equipo de Dox era algo más intervencionista, más “político”. Se dedicaba a erradicar regímenes corruptos o inmorales, llegando hasta el asesinato a sangre fría, al magnicidio.
Dox, que es el personaje central sobre la que pivota la colección no es gracioso ni tiene un tono chistoso, puede llegar a ser ocurrente e ingenioso en algún momento pero poco más.
El punto fuerte de este cómic es la crudeza con la que se plantean algunos aspectos. Tenemos, además del magnicidio en un Narco-planeta, asesinatos al tun-tun, acoso moral, una violación entre miembros del equipo, etcétera.
Es una serie con ideas fuertes pero llevadas a cabo de forma sencilla, nada rebuscada y con la idea de plantear hechos impactantes que ayuden a comprender a los personajes, que puedan generar debate.
La ciencia ficción puede ser utilizada como un lienzo en el que exponer ideas y dilemas de manera conceptual. Situaciones hipotéticas, preguntas directas al lector.
¿Es justificable asesinar al emperador de un planeta si este es el mayor narcotraficante de la Galaxia? ¿Es justificable inducir al aborto si el bebé ha sido engendrado mediante una violación? ¿Es justificable un golpe de estado para sacar del poder a un tirano? ¿Es justificable tomar el control y establecer un régimen policial para resolver los problemas de un país?
Estas son algunas de las situaciones entre muchas otras que nos plantean Giffen y Grant. Los personajes pululan entre estos hechos. Los autores apenas se posicionan. Simplemente nos plantean los hechos en crudo y nos dejan con cara de “¿qué ha pasado aquí?”
Vril Dox es el centro de la función. Taimado, maquiavélico a más son poder, siempre se sale con la suya. Nunca pierde y cuando se encuentra entre la espada y la pared consigue un pacto, un giro… lo que sea que le permita huir hacia delante. Sus intrigas son la base de la trama, el motivo por el que la mayoría de miembros del grupo discuten y se movilizan, los hechos sobre los que pivota la historia. El personaje recuerda una versión más sencilla y menos profunda (por tanto mucho más comiquera) de Ozymandias.
Como hemos dicho, esta colección contó con la presencia de una superestrella en ciernes. Nada más y nada menos que El Hombre, el último czarniano, el cazarrecompensas más macarra de la galaxia. Lobo.
Se trata de un Lobo no exento de su carga humorística, de sus frases agresivas y lapidarias pero sin caer en la parodia y en la caricatura posterior. El equilibrio entre el personaje primigenio y el despiporre que estaba por venir. En L.E.G.I.O.N se corrigen los aspectos más incontrolables de Lobo, como es su capacidad para clonarse a partir de una gota de sangre y su implacable letalidad. Dox pacta con él que no mate gratuitamente si no es bajo contrato como cazarrecompensas además de anular el poder de la clonación. Ambos aspectos liman las asperezas del personaje de cara a dar el salto en solitario/estrellato.
L.E.G.I.O.N no deja de ser la colección en la que se probó al personaje y ver su interacción con el universo DC (sí, en el anual de Superman se vuelve a enfrentar al Gran Azul).
La colección se publicó hasta el número 18 USA (el 15 de la edición española) más su participación en el Anual de Adventures of Superman y el posterior de L.E.G.I.O.N (ambos iban enlazados). En Estados Unidos la colección duró un tiempo más, hasta el año 1996 cuando ya se publicaba como R.E.B.E.L.S. ’96.
Las malas ventas llevaron a su cancelación en España.
¿Por qué no cuajó esta colección?
La verdad es que es difícil saberlo. Se trataba de una colección entretenida, bien escrita, con un dibujo funcional y unas portadas muy llamativas, con personajes reconocibles pero eso sí, desconocidos. Una serie más de personajes, de fuego lento. Puede que que ese fuera su punto fuerte la lastrara, al tratarse de personajes poco conocidos necesitara un poco más de picante, de acción, de violencia explicitita, un dibujo más espectacular… estábamos en el año 91. La JLA funcionaba pero tenía un aspecto muy característico, el humor. Era algo especial. L.E.G.I.O.N era mucho más tranquila, ambigua, tenue. Buena parte del resto del sector se asomaba al abismo pre-Image. Ni siquiera Lobo la pudo salvar. No en vano no era el Lobo superventas que vino después.
También es verdad que la marcha de Giffen supuso un poco de “bajona”. La serie se vulgarizó y perdió su toque especial. Se convirtió en una serie de grupo más con el agravante de que los personajes eran muy nuevos… y en general con un carácter bastante antipático.
Fue algo parecido a lo que posteriormente le pasó a Giffen con Freak Force en Image. Una serie de grupo, de personajes, sólida, bien escrita, que aguanta el pasó de los años… pues nada, también cerró.
Al final L.E.G.I.O.N queda como un cómic de culto para deceitas y zinqueros sobre el que volver y mantener la ingenua esperanza de que algún día la publiquen completa por estos lares.
Lo mejor
• Las tramas escritas por Giffen.
Lo peor
• Su cancelación… al estilo clásico.
Obra de culto
Guion - 7.8
Dibujo - 6.5
Interés - 7.5
7.3
Se trata de una joya perdida en los tiempos de Zinco. Una serie que merecía más atención.
Pero Román! No has especificado que en España, Zinco publico los dos primeros números en Universo DC 18, ni todas las referencias a la Legión de Superhéroes que te dicté… cómo que no estás tomando notas?? Román? Qué haces con ese cuchillo?
Qué subidito está el señor autor…
debo confesar que no encontré ese Whatsapp XD
A esta siempre le tuve ganas y nunca me animé. Sólo conocía de refilón a Vril Dox y por supuesto a Lobo, que en su día me flipaba pero aquí salía una versión light.
Como siempre me ha encantado la reseña y con gusto me los leería. Muchas gracias. Pedazo de sección
yo la disfruté bastante en su momento extrañado de la 0 repercusión que tenía entre los aficionados y al releerla ahora temía que hubiera envejecido mal y… no… de hecho (a pesar de cosas de la época como el dibujo) creo que me ha parecido mejor cómic, mucho más interesante.
gracias por tu comentario
Pues yo me compré la colección de Zinco hace unos meses y la tengo en la pila de pendientes. Creo que después de esta reseña, me voy a poner con ella.
Ya nos dirás que te parece. a mi me continúa pareciendo un cómic muy aprovechable que pasó sin pena ni gloria, quizás a causa de que los personajes eran demasiado nuevos.
Gracias por comentar.
Otro gran pendiente. Obvio los conozco de Invasion! y sus pocas apariciones en otros comics (como el Ultimo Czarniano) y vi los números de Zinco (incluido el de Universo DC que refiere Enrique) pero nunca me animé. Y recuerdo (para mis coterráneos) que fue uno de los inéditos de DC Perfil que nunca salieron (en las publicidades iban a salir en Grandes Historias).
La mejor noticia es que está definida una periodicidad (se dice así?) de la sección genial!!! Gracias
Pues es un pendiente bastante disfrutable cosa que no es tan habitual. La parte de Giffen (10 números) es un cómic de superhéroes galácticos bastante interesante y entretenido.
Y sí se dice «periodicidad», con Gustavo al mando es imposible salirse un milímetro del calendario. Sale el segundo domingo de mes, para que tomes nota. XD
Gracias por comentar.
Y fijate el jugo que le terminó sacando Marvel a sus galácticos segundones…
Una serie que con la cosa de nombrarla por años, hubiera quedado perfecta para su edición por parte de ECC. Un tomito por año y en seis volúmenes finiquitada. Pero claro, hablamos de ECC
Tienes razón. Hay muchos más clásicos-modernos que irían por delante en la lista pero este merece una buena reedición, con sus artículos, anecdotas, etc pero bueno tal como va el mercado, habrá que buscarse la vida o poner una velita a algún santo.
Gracias por comentar.
El problema no es que hayan series con mayor prioridad (lógico de todas maneras). Es que en estos momentos esa lista está vacía. No hay prioridad para nada. Esta tiene la ventaja de que por su enfoque por años, no hay que planificar su publicación. Pero bueno…
Falló aquí por los personajes desconocidos y el mal dibujo. El bajón que pega sin Giffen es evidente pero no es lesivo. Sin embargo en España una serie necesita o tener personajes populares o solera para poder pasar con un dibujo torpe y un guión convencional. Seguro que sin la crisis del 92 hubiera aguantado algo más pero sin Giffen no pasaba de entretenida y quedaba claro que no iba a romper como al principio pareció. Y Kitson no mejoraba, lo cual cansaba y desesperaba. Yo hubiera seguido porque era original y tenía potencial, pero si la cosa sigue igual entonces la habría dejado meses más tarde. De todos modos los nºs de Giffen siguen siendo notables. Una lectura amena, singular y cínica.
Pude conseguir hace unos meses la colección completa y es muy disfrutable, tanto para fans de la Legión clásica como para los de la mítica LJI. Qué grande era Giffen.
Tebeo que no me llegué a comprar en su momento y que no he leído nunca. Como siempre la sección, una maravilla que se disfruta y que se agradece.
Como dicen algunos de los compañeros con ecc no hay agenda, o quizás podríamos decir que la agenda de clásicos la despachan a golpe de crowdfunding. Ahora mismo en curso Batman y los Outsiders. Material de «nicho y deficitario» protagonizado por Batman(personaje ignoto donde los haya).
Muchas gracias por divulgar el catálogo de DC con una sección como ésta y la del magazine. Un saludo.
PD: Enrique y Gustavo,os sigo en whakoom desde hace unos días.
Gracias por tus palabras. Que disfrutemos todos de estos textos nos empuja a seguir dándolo todo.
Es triste, peor teneos muchas obras que vieron la luz en España y de las nunca más se supo, pero sirva esta sección como digno homenaje a todas ellas.
Y gracias por seguirnos. Lo tengo algo descuidado, la verdad, y debo ponerlo al día…