Contracorriente
Si hablamos de revistas infantiles de cómic, a todos nos vienen a la cabeza revistas del tipo Boing, Dibus, Elé, Popi, Babar, Leo Leo… revistas que combinan contenidos varios entre los cuales hay pequeñas historias cortas de diversos personajes. Hay otras revistas infantiles en las que el contenido de estas era totalmente dedicado al noveno arte. Fueron aquellas como el famoso TBO, el DDT, Tiovivo, Guai, Mortadelo, Pulgarcito… Un sinfín de publicaciones que, con mayor o peor fortuna editorial, poblaron mercado.
Sin embargo, desde la ciudad de Zaragoza, y en concreto gracias a empuje vectorial de dos soñadores y amantes del noveno arte, Daniel Capapé y Daniel Foronda, que consideraron la posibilidad de lanzar al mercado una nueva revista infantil dedicada enteramente al cómic, donde dar un espacio coral a múltiples autores, era algo posible y necesario. Una revista en formato reducido, compacto, podría decirse, manejable entre las manos de los lectores a los que iba dirigida y que permitiera poder disfrutar de múltiples propuestas llenas de color, sin escatimar la calidad del contenido.
La revista llegó al mercado local, pues no dispone de distribución dentro de los canales habituales, aunque si puede adquirirse en la tienda de Mil Comics a través de la ficha. Lo que puede parecer una debilidad, puede también verse como una fortaleza, pues ha sido a través de los distintos eventos, ferias y salones distribuidos por Aragón, donde se ha ido acercando al público que de forma directa y honesta han podido adquirir la revista. Un trato cercano, que sin duda complica las ventas, pero que hace de la publicación algo cercano a un público objetivo cada vez más y más bombardeado por cientos de opciones distintas de ocio y entretenimiento de mejor y más diverso acceso, pero mucho más frio en el trato humano. Poner en la calle la revista, acercarla al gran público y dotarla de visibilidad editorial han sido algunos de los grades retos a los que esta nueva publicación ha tenido y tiene que hacer frente hoy en día. Su última gran cita es este fin de semana, el XXI Salón del Cómic de Zaragoza, con el que cerrara su primer ciclo de existencia con la esperanza de la respuesta de los lectores en la capital aragonesa.
Iniciativas como esta hay que seguirlas de cerca, porque detrás está el empuje de sus dos coordinadores, el trabajo de autoras y autores del calibre de Álvaro Ortiz, Sara Jotabé, Ignacio Ochoa, Sara Soler, Diego Burdio, Xcar Malavida, Javier Marquina, David Maynar, Paula Esteban, Daniel Zarzuelo, Angelito Perkele, Crolina Albalá, Daniel Foronda y Hombre Picaraza (pues sus dos impulsores también se han reservado el poder aportar su granito de arena creativo a la revista) y el sueño de poner en las manos algo distinto, cercano, de la tierra, entre las manos de los posibles nuevos futuros lectores.
En cuanto al contendido, puesto que estamos antes una revista con distintas historias la valoración de la misma resulta compleja, pues hay historias más acertadas que otras a todos los niveles, pero cuyo valor esta compactado en su conjunto. Una valoración global acertada sería decir que su lectura convence (y que a los gustos de cada lector queda el decidir que historias les agradan más) gracias a una realización cuidada, con artistas motivados, que no buscan cumplir, sino aportar su talento a estas 64 páginas a color que componen la revista.
No es tarea fácil poner en el mercado este tipo de publicaciones. En realidad, ninguna lo es. Sin embargo, aquí está la revista, publicada y distribuida por todo Aragón en ferias y eventos, llena de ilusiones, de trabajo y de ganas de agradar a un público complicado de satisfacer. Un trabajo con una cuidada edición, un papel adecuado para sus pretensiones, un formato novedoso y una propuesta diversa, hacen de Adoquín un elemento importante en lo que el mercado local de cómic se refiere.
Lo mejor
• Su afán de hacer algo que editorialmente estaba muy descuidado.
• Lo coral de su propuesta.
Lo peor
• El precio puede resultar una barrera inicial a la compra.
Guion - 6
Dibujo - 8
Interés - 8
7.3
Necesaria.
Un trabajo coral, apara satisfacer a todos los gustos, con un formato innovador, que sabe arriesgar con artistas de lo más granado de Aragón, con el objetivo de captar a nuevos lectores en esto del noveno arte.
Sí que es verdad que el precio es alto. Pero la revista tiene una pinta estupenda. Les deseo mucho éxito… ¡y expansión!