El cuarto número de Secret Wars es claramente uno de conflicto. La llegada del Cónclave y de los héroes de la Tierra 616, acompañados por un Miles Morales que no sabe la suerte que tiene de haberse colado en la Balsa de los villanos, va a revolucionar el Mundo de Batalla y esa supuesta estabilidad que le ha traído el poder omnipotente de Muerte al planeta, construido con los pedazos de los mundos paralelos que existieron antes de la Incursión Final que vimos en el primer número de la serie central del evento.
Está realmente claro que nos vamos a encontrar con un gran número de referencias a la historia del Universo Marvel en todas las colecciones paralelas. Como ejemplos claros tenemos las colecciones paralelas que han ido surgiendo en estos dos meses: El Viejo Logan, El Guantelete del Infinito, Futuro Imperfecto, Proyecto Exterminio y Años del Futuro Pasado son los ejemplos más evidentes y claros, herederas de grandes historias del pasado de la editorial, y además tenemos la suerte de poder ver en los próximos meses aún más historias alrededor de estas clásicas etapas. Incluso tenemos tributos a otros momentos históricos Marvel, como su etapa como la editorial Atlas con el regreso de los Agentes de Atlas en una aventura en Mundo de Batalla en un número publicado en Estados Unidos esta semana, o su salto a la animación con X-Men ’92. Es un evento dirigido claramente a los marvelitas que gozan de las historias alternativas, de las ucronías del universo de ficción de Marvel. Aunque algunos echamos de menos a los Exiliados en este batiburrillo de colecciones, he de decir que no puedo sentirme defraudado por los tie-ins del evento por eso mismo, por ser un constante homenaje a la trayectoria de la editorial.
Y si los tie-ins son referencias continuas, la serie central no puede existir sin tener también una serie de guiños hacia las Secret Wars originales, que este mes se ven recopiladas en nuestro país en un libro de tapa dura con dos What If? centrados en aquel evento que cambiaría para siempre el método de trabajo de la editorial y los destinos de los héroes y villanos que atravesaron el portal del Todopoderoso.
Desde el primer número hemos visto esas referencias a las Secret Wars originales, teniendo ante nosotros no sólo la presencia de los Todopoderosos hablando con el Doctor Extraño, el Doctor Muerte y el Hombre Molécula a través de una grieta luminosa en el espacio-tiempo, si no también con la Balsa que ha salvado a héroes y villanos por igual de la destrucción final del Multiverso. La existencia de Mundo de Batalla es otra gran referencia, aunque en esta ocasión no se trate de un planeta creado con fragmentos de otros existentes en el mismo Universo, si no que en esta ocasión son fragmentos de diferentes Tierras alternativas del Multiverso Marvel.
Que el Doctor Muerte haya conseguido derrotar y suplantar a los Todopoderosos es algo que se ve venir desde el final del primer número, y aunque hemos visto claras referencias a la omnipotencia del nuevo dios de Mundo de Batalla en el anterior número, una buena parte de su potencial se desvela en las páginas de este cuarto número, aunque claramente tenemos ante nosotros el peor movimiento que podría realizar un gobernante con tamaño poder: dejarse llevar por las emociones humanas de las que no puede escapar. Y atentos, ya en este número tenemos dos muertes de personajes, aunque solo una de ellas es lo suficientemente importante como para influir en el devenir de los acontecimientos en números futuros. Sin embargo, aún teniendo ante nosotros a Victor Von Muerte y a Stephen Extraño, es de rigor que ya en el cuarto número se nos presente la duda que ya se ha sembrado con la estatua del tercer número: ¿qué ha ocurrido con el Hombre Molécula? En los dos próximos números de la serie central comenzaremos a adivinar qué es lo que ha ocurrido con él y cómo afecta esto al desenlace de Secret Wars.
El próximo número es el ecuador del evento, así que debemos tener presente desde ya mismo que tendremos en nuestras manos un número de transición, un punto de inflexión antes de que llegue la traca final de este evento de nueve números de Marvel. Las piezas se están terminando de colocar en el tablero, y debemos empezar a mirar con lupa los tie-ins de Secret Wars. Y solo hay uno que, por su planteamiento, es completamente imprescindible para redondear la narración final de todo el evento. Pero mejor esperaremos a que se publique por completo en nuestro país para hablar largo y tendido sobre él.
Me falta un homenaje a la guerra kree-skrull
Y a las hordas de Annihilus en una guerra a tres contra zombies y Ultrón.
Hombre, tenemos a la Ola de Aniquilación en Guantelete del Infinito, Marvel Zombies en tres colecciones (aunque luego vayan a ser cuatro, y lo digo por lo que se ve en las portadas) y a Ultrón en el Marvel Zombies vs Era de Ultrón…
La Guerra Kree-Skrull es una de las grandes ausencias, sin lugar a dudas.
Creo que el trabajo de Ribic en esta serie es simplemente maravilloso, un 7.5 se me queda muy corto.
La serie, fantástica pese a sus continuos y desesperantes retrasos.
¿Cual es el tie-in de Secret Wars que considieras completamente imprescindible??