Shazam #01

Shazam regresa de su olvido editorial desde los Nuevos 52 y lo hace con una serie que es toda una declaración de intenciones.

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Edición original: Shazam! núms. 1 a 3 USA.
Edición nacional/ España: ECC Ediciones.
GuiónDibujo: Dale Eaglesham, Marco Santucci, Mayo «Sen» Naito.
Entintado: Dale Eaglesham, Marco Santucci, Mayo «Sen» Naito.
Color: Mike Atiyeh.
Formato: Rústica, 80 págs. A color.
Precio: 7,50 euros.

Durante los Nuevos 52 no todo fue un error. Entre los excesos mal enfocados de series como Hawkman, o Deathstroke o lo absurdo e insultante de los Jovenes Titanes, aparecieron series que brillaron con luz propia, como Animal Man y en la serie regular dedicada a la Liga de la Justicia un complemento que no tardó en llamar la atención de los aficionados. Su protagonista: Shazam (Capitán Marvel). Sus autores: Geoff Johns y un espectacular Gary Frank. El Objetivo: revitalizar a esta vieja gloria, a este personaje que forma parte de la historia del cómic norteamericano, a los nuevos tiempos. Y sin duda alguna el objetivo se cumplió con creces.

Tras los acontecimientos de Renacimiento se relanzaron nuevas series, pero entre ellas no había ninguna dedicada a Shazam. Tendrían que pasar varios años hasta que la editorial, volviendo a confiar en el hombre que ya se encargara de su destino en los Nuevos 52, anunciara una nueva serie regular en solitario del Capitán. Y para acompañar a Johns en esta aventura, se le asignó al dibujante Dale Eaglesham.

Y este mes, de mano de ECC, llega el primer número de la serie que recopila los tres primeros números USA, en la que el bueno de Shazam vuelve a disfrutar de una cabecera regular, para continuar sus aventuras en el punto exacto donde Johns lo dejó durante los Nuevos 52.

Esta colección ha recibido, injustamente, desde que se comenzó a publicar, el adjetivo de infantil. Y digo injustamente por la connotación despectiva con la que se aplica el adjetivo. Algo infantil es algo perteneciente a la infancia, a ese periodo mágico en el que todo es posible, donde la ingenuidad, la esperanza, la ilusión, las ganas de descubrir, disfrutar y aprender no tienen límites, salvo la propia imaginación. Es un periodo fértil, sano, sincero y feliz, el que se denomina infancia y por tanto quién se encuentra en ella se dice que es infantil. Y a toda honra. Y, sin embargo, Shazam no es infantil, ni juvenil, ni adulta, lo es todo a la vez, porque esa es su verdadera esencia, la de estar a la altura del lector que se acerque hasta ella.

Nadie pone en duda el talento de Johns a la hora de escribir, pero si hubiera que buscarle la esencia, lo que de verdad lo caracteriza es, sin duda, su capacidad para acercar a los personajes a los lectores de una forma abiertamente honesta. Y en Shazam hace gala de ella desde la primera a la última página de los comics encartados en este tomo.

Johns, entiende a la perfección lo que el Capitán Marvel encarna. Lo entiende tan profundamente bien que en su reformulación del clásico fue capaz de mantener todos esos rasgos y que el conjunto resultara novedoso. Al mismo tiempo conoce el pasado del personaje y como su serie regular de los años cuarenta era la serie más novedosa y atrevida del mercado. Entre sus páginas uno podía encontrarse de todo, por imposible que pudiera parecer, desde viajes temporales, dimensionales, enemigos de aspecto absurdo, pero de una letalidad enorme… Y eso es lo que Johns rescata para el Capitán y todo el elenco de personajes secundarios con los que es capaz de fortalecer la trama.

La familia en el más amplio sentido, sin caer en lo tradicional, es una pieza sobre la que pivota esta historia de niños y adolescentes, que viven aventuras de lo más locas gracias a los poderes que el viejo sabio de la Roca de la Eternidad concedió a Billy Batson. Son aventuras que sirven como espejo de la vida misma, con la figura que se ve obligada a ser responsable, que ve más allá de la evidencia, mientras que hay visiones mucho más edulcoradas y libres de prejuicios. De alguna extraña forma, Johns ha logrado que esta Liga de Capitanes Marvel, funcione como un metrónomo finamente armonizado, con una trama que disfruta de su propia sencillez, al tiempo que esconde matices elaborados como los que se desarrollan gracias a los villanos de turno.

El mundo de los niños es un mundo lleno de sueños que merecen la pena ser descubiertos y Johns aprovecha esa circunstancia para ir navegando con precisión en un relato centrado en la esperanza, la amistad, la ilusión y la sana diversión pura, alejándose de toda visión crepuscular del personaje. Y es que el Capitán Marvel no puede ser sino un faro de esperanza. Shazam es la luz de universo DC, no es Superman, no lo es Wonder Woman, ni Green Lantern, la luz, la verdadera luz es Billy Batson cuando grita la palabra mágica y todo su mundo cambia. Una metáfora de ese cambio que se experimenta cuando se deja atrás la infancia y comienza ese periodo de incertidumbre conocido como adolescencia, para más tarde pasar a ese mundo hostil, cargado de dobles sentidos, al que se denomina edad adulta.

Johns trabaja duro para expandir lo que en su primer acercamiento al personaje ya se mostró de forma vaga a los lectores. Ha llegado el momento de explorar (algo intrínseco a la infancia) esos mundos mágicos que se esconden a los ojos de la realidad, poblado por seres de lo más variopinto. Un viaje que empieza en las Tierras de la Diversión y que acaba, de forma irremediable, recorriendo las diferentes zonas de ese basto mundo sobrenatural que rodea al mito que encarna Shazam.

En el aparado gráfico tenemos a tres dibujantes para tres números. Algo que no favorece a la serie en absoluto, pero tampoco la hace encallarse, gracias al talento que destilan los tres dibujantes. Si bien es cierto uno de los ellos, Mayo “Sen” Naito, que se encarga de un pequeño preludio que abre la puerta a nuevas historias que sin duda acabaran por llegar a la serie tarde o temprano.

Por un lado, tenemos a Eaglesham, un dibujante de corte clásico, de trazo y composición muy dinámicos, con un control enorme sobre la figura humana, que despliega todo su talento en el primer número para deleite visual de los lectores. Su sustituto, Santucci, emula a Eaglesham, hasta el punto de que, en algunos aspectos, como el acabado final y en detalle, lo llega a superar. Por tanto, la serie está en buenas manos y sus dibujantes se muestras solventes a la hora de plasmar todo ese mundo nuevo y mágico que acaba de empezar a desplegarse en la colección.

Una serie fresca, dinámica, llena de imaginación desbordante, cuyo mayor defecto es el baile de dibujantes, pero que se disfruta de forma sana y honesta, al poder apreciase los agradables matices de una época en la que los héroes y las heroínas encarnaban la esperanza de un mundo mejor.

Edición original: Shazam! núms. 1 a 3 USA. Edición nacional/ España: ECC Ediciones. GuiónDibujo: Dale Eaglesham, Marco Santucci, Mayo "Sen" Naito. Entintado: Dale Eaglesham, Marco Santucci, Mayo "Sen" Naito. Color: Mike Atiyeh. Formato: Rústica, 80 págs. A color. Precio: 7,50 euros. Durante los Nuevos 52 no todo fue un error.…

Honesta.

Guion - 8
Dibujo - 8.5
Interés - 9

8.5

Una serie centrada en la diversión, que es todo un canto en defensa dela infancia y la juventud llena de sueños, que destila la esencia pura del género superheróico, con dosis de clasicismo y venturas modernas a partes iguales.

Vosotros puntuáis: 8.58 ( 10 votos)
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