LA LARGA SOMBRA DEL MAL
«¿Qué sabe de heroísmo un chico de 15 años?»
Reseñamos la última miniserie arácnida que llega a España en un tomo único de la mano de panini cómics. Aunque pueda haber pasado desapercibido, durante los últimos dos años el aclamado autor J. M. DeMatteis ha tenido trabajo casi constante dentro de Marvel. Todo empezó cuando, durante la iniciativa Beyond, en la que Ben Reilly retomaba el manto de Spiderman, Marvel decidió publicar una miniserie protagonizada por Ben y ambientada cinco años después de la conocida Saga del Clon escrita por DeMatteis. A esa miniserie le siguió otra, esta vez protagonizada por Peter Parker, La cacería perdida de Kraven, que como el título sugiere pretendía evocar la obra maestra arácnida del autor, y una miniserie más protagonizada por Magneto. La miniserie que hoy nos ocupa, La sombra del Duende Verde, sigue la tendencia de las demás de ambientarse en un punto pasado de la continuidad, en este caso las primeras semanas de Peter como Spiderman.
La trama que se presenta es un ejercicio de retrocontinuidad que se construye sobre otro. Y es que en estas páginas encontramos al Protoduende, una invención de Howard Mackie para el número especial Peter Parker: Spider-Man #Minus One. Este número «menos uno» se publicó en 1997 como parte de la iniciativa Flashback por la que durante un mes todas las series de Marvel echaron la vista al pasado de sus personajes. El número correspondiente a Spiderman, acertadamente incluido en esta edición, se centraba en Norman Osborn y en la relación entre el Capitán Stacy y su hermano más que en Peter y nos introducía a la existencia de intentos fallidos del suero que convirtió a Norman en el Duende Verde. Así nació el Protoduende.
DeMatteis utiliza al Protoduende como antagonista para esta miniserie, en su única aparición desde el especial de 1997, con un guion más íntimo y personal que su antecesor. El título de la obra hace referencia a la larga sombra de trauma y dolor que acompaña a la figura de Norman Osborn, pero en mi opinión la trama acaba centrándose en un aspecto más amplio. El escritor estadounidense nos muestra a tres familias lidiando con la pérdida y el vacío que esta deja tras de sí. Peter y May lloran al tío Ben tan solo unas semanas después de su muerte, Gwen hace frente a la enfermedad terminal de su madre y Harry es víctima de las maquinaciones de su padre y su difunta madre. Peter no tiene oportunidad de interactuar con el resto de personajes, recordemos que aún no les había conocido, y es más bien un espectador externo. Un Peter bastante más mayor hace además de narrador, reconstruyendo los hechos de su pasado y guiando al lector por lo que cree que sucedió. Estos aspectos son sin duda los más interesantes de la obra, y producen escenas poderosas con gran peso emocional, pero no terminan de enlazarse de una manera efectiva entre sí ni con la trama del Protoduende.
El dibujo de Michael Sta. Maria, con colores de Chris Sotomayor, está repleto de detalle y presenta la historia con una narrativa visual excelente y la gama de colores y en especial el intenso entintado colaboran para darle un aspecto oscuro y lúgubre al arte, que se compagina bien con el guion. Su Spiderman es visiblemente más joven e inexperto, aunque la apariencia y forma de vestir de Peter y otros personajes saltan a la vista como anacronismos, en especial para aquellos que recuerden los primeros números de Ditko en Amazing Spiderman.
En definitiva, la miniserie presenta una aventura con un núcleo emocional claro y es al mismo tiempo nueva y familiar y ofrece una salida para aquellos que busquen un Spiderman que reconozcan lejos de la actualidad de la serie regular. En el panorama actual de la industria del cómic superheroico el formato de miniserie está cada vez más extendido, una práctica editorial que va dirigida a publicar más adelante todos los números como una novela gráfica. El caso más claro y quizá de mayor éxito lo encontramos en la multitud de obras con Batman a la cabeza que DC publica cada año y que muchas veces llegan a convertirse en tomos superventas. En el caso de esta miniserie encontramos que está sin duda lejos de ser un imprescindible y que como es común encontrar en Marvel se halla lastrada por la ineludible complejidad de una continuidad abarrotada. Personalmente, me gustaría ver más obras originales que se mantengan fieles a la esencia de un personaje sin tener que hacer malabares por encajar en la continuidad y menos miniseries ‘flashback’ como las que han estado escribiendo DeMatteis y Chris Claremont en los últimos años.
Lo mejor
• DeMatteis entrega una historia con emoción y madurez.
Lo peor
• Pone mucho esfuerzo en ir de acuerdo a la continuidad para acabar teniendo un efecto nulo sobre la misma.
• El precio está en la frontera de lo excesivo.
Entretenido
Guión - 7.5
Dibujo - 7.5
Interés - 7.5
7.5
La miniserie presenta una aventura con un núcleo emocional claro y es al mismo tiempo nueva y familiar y ofrece una salida para aquellos que busquen un Spiderman que reconozcan lejos de la actualidad de la serie regular.