LLENANDO EL VACÍO
«¿Dónde está mi hijo?»
Reseñamos la nueva serie regular protagonizada por la Spiderwoman Jessica Drew, los primeros números forman parte del evento Guerra de bandas, que ha tenido a los superhéroes marvelitas neoyorkinos lidiando con conflictos entre múltiples capos callejeros. Los responsables de este relanzamiento son dos autores sin mucho recorrido en la editorial, Steve Foxe en los guiones y Carola Borelli encargada del dibujo.
La vida de Jessica Drew ha dado varios vuelcos, viéndose afectada por los diferentes eventos editoriales que Marvel ha ido planteando recientemente para Spider-man, el superhéroe arácnido predilecto. A Spiderwoman toda la maraña, o telaraña, de sucesos tales como el final del Universo Spiderman o la mencionada Guerra de bandas la involucran dada su leve relación con Peter Parker y la Red de la Vida y el Destino custodiada por Madame Web (ahora Julia Carpenter). La amenaza del final del Universo Spiderman vio a Spiderwoman desligada de la Red de la Vida y el Destino. Y aunque esa unión pareció ser restaurada al final de la serie de Spiderman de Dan Slott y Mark Bagley, el hijo de Jessica Drew ha desaparecido como consecuencia, físicamente y de la memoria de quienes la rodean. Ella está decidida a encontrarlo, y a esto se le une la amenaza de la Guerra de bandas, para la cual Spiderman recluta a Jessica, que se enfrentará a Iguana, un viejo conocido de Los Defensores que ahora goza del respaldo de un enemigo muy personal para Jessica: Madame Hydra.
Con todas estas piezas moviéndose, no es de extrañar que el guion de Foxe dé bandazos. La historia transcurre por medio de decisiones narrativas cuestionables: elipsis bruscas, giros de guion repentinos, revelaciones decepcionantes, escenas dedicadas a presentar información que ya ha sido comunicada y la presencia de demasiados personajes sin mucha capacidad de contribuir a la trama. El guionista estadounidense, y la editorial que respalda la serie, parecen no tener claro qué historia quieren contar, si una trama personal centrada en una madre que busca a su hijo perdido o una aventura de acción y espionaje. Las piezas nunca terminan de encajar y el conjunto se resiente.
En cuanto el dibujo, el trabajo de Borelli y los colores de Arif Prianto contribuyen a un apartado artístico consistente a lo largo de los números, pero algo simple. No hay abundancia de detalle y se echan en falta escenas de acción o secuencias en las que la artista pueda entregarse a fondo. Una de esas páginas que enganchan al lector. Los colores de Prianto se mantienen correctos pero no logran elevar el arte de Borelli y los efectos que se aplican no siempre casan con el resto del arte.
En definitiva, este primer arco, publicado por panini cómics como un tomo único, no logra evitar la sensación de que se queda corto. Una oportunidad perdida de expandir la historia de un personaje con mucha tradición editorial y que no siempre goza de la ocasión para ser protagonista. La serie parece estar más cerca de una intentona de Marvel de vender cómics ligándolos a un evento con Spiderman en el centro que de una auténtica muestra de interés en el personaje. Comprobaremos si los siguientes números, ya separados de la trama de Guerra de bandas, logran conseguir lo que estos primeros no han alcanzado.
Lo mejor
• Ver a Jessica Drew en el papel protagonista.
• Las portadas de Leinil Francis Yu.
Lo peor
• Nada termina de funcionar.
Decepcionante
Guión - 4.5
Dibujo - 5
Interés - 5
4.8
Una oportunidad perdida de de expandir la historia de un personaje con mucha tradición editorial.
Me ha dejado una sensación agridulce. Por un lado el comienzo es bastante ágil y el dibujo agradable, pero esa revelación lo echa todo por tierra de forma innecesaria. Ay, Hopeless y Rodríguez, os echo de menos.