Tom Taylor tiene un lugar destacado en el corazón de los fans del Universo DC. Su Injustice, aquella serie que empezó publicándose de tapadillo vía online, que contaba el descenso a los infiernos de Superman y de todo un mundo, y que acabó convirtiéndose en un clásico moderno, fue la punta de lanza de una revolución en la distribución de comics. A este título se sumaron pronto otras obras notables a la bibliografía de Taylor como Lobezna o la reciente DCSOS.
En el corazón de los aficionados también ocupa un lugar destacado el Escuadrón Suicida, grupo de villanos al servicio del gobierno creados por John Ostrander a mediados de los gloriosos años 80. El enfoque de Taylor (y de Bruno Redondo, su colaborador habitual desde Injustice) respecto al grupo es un poco diferente del “villanos al servicio del gobierno”.
Y es un poco diferente porque incorpora humor. Un humor al estilo Peter Milligan en X-Force, un humor fundamentado en la reflexión acerca del absurdo inherente a las etiquetas de “héroe” o “villano”.
La estructura de este primer número también es heredera de esos X-Force de Milligan: se presenta un grupo de supervillanos ridículos, de los cuales la mitad acaban muertos después de las primeras páginas y la otra mitad integrados en el equipo madre. Las fricciones entre los nuevos miembros del equipo y los veteranos como Harley Quinn y Deadshoot serán constantes. Zebraman será el blanco de todas las bromas.
Poco más hay que añadir respecto a este comic. El guion de Taylor es más que correcto, aunque no aporte nada verdaderamente original ni nada que no hayamos visto antes. Dicho eso, la estructura planteada (una única secuencia que ocupa todo el número) es tremendadamente atractiva. La labor gráfica de Bruno Redondo, detallada, limpia y elegante, nos retrotrae a los superhéroes espías de comienzos del milenio.
Puede que las semillas plantadas en este número germinen en las siguientes entregas. Solo el tiempo lo dirá.
Por fin tenemos a Tom Taylor en una serie regular DC, y aunque me hubiese gustado que se alejara del concepto «Taylor mata a gustito como en Injustice», sinceramente mucho mejor Tom y Bruno que el rumoreado Escuadrón Suicida de Azzarello con el Joker de estrella (aunque con eso hubiéramos ¿liberado? a Harley de la Task Force X).
Hacía tiempo que no se sentía fresca la serie, esperemos que la cosa se mantenga así y vaya a más, potencial sin duda alguna lo tiene.