¿Qué es lo que hace que un cómic sea relevante? ¿Su historia? ¿Sus autores? ¿Sus protagonistas? ¿Una adecuada mezcla de todo ello? Sin duda, el sentido común, empuja a pensar en que la perfección se puede encontrar cuando se conjugan toda una serie de factores, entre los que están la historia, el dibujo, los personajes y porque no hasta el número que lleva impreso ese cómic en la portada. Y es que el Action Comics #1000 es un cómic muy importante y muy relevante, pero sin duda no lo es por su contendido, que puede o no satisfacer, o por su personaje, que es uno de los más importantes del acerbo cultural de nuestra sociedad, sino por el mítico número que lleva impreso en su portada y que recuerda que han pasado 80 años desde que viera la luz por primera vez ese cruzado volador al que se le conoce como Superman.
Estamos ante un número histórico por lo que representa para la industria y el propio género al que esta adscrito. Un cómic que mira desde arriba a todos los demás que ven como recuperar sus numeraciones y sumar volúmenes, a fin de alcanzar las tres cifras, los sigue dejando muy lejos de alcanzar las míticas cuatro.
Action Comics #1000 es historia impresa que debe valorarse como tal.
Sin entrar, todavía, en el contenido, edición y demás aspectos valorables de este número especial, se ha de reflexionar sobre el valor que tiene de cara a revalorizar la importancia de una industria que se resiste a desaparecer en medio de nuevas y abrumadoras propuestas de ocio. Series, videojuegos y cine, aumentan la presión a un medio impreso y escrito que vive luchando contra todos los cambios que ha traído Internet y sus nuevas formas de comunicar, resistiendo de forma valerosa contra viento y marea. Y es que Action Comics #1000 manda un mensaje claro al mundo del entretenimiento en general… Hemos llegado hasta aquí y no nos vamos a rendir.
Siegel y Shuster imaginaron a un superhombre, uno capaz de hacer más que los demás, de enfrentarse a nuevas amenazas y nuevos peligros, para defender unos ideales en los que ellos creían ciegamente. Muchas historias se han contado a lo largo de estos ochenta años alrededor de Superman y muchas más que han de llegar, historias como las que este número reúne y que no son sino la manifestación gráfica y argumental de la esencia más pura del superhéroe por excelencia.
Y, sin embargo, DC Comics ha dejado escapar una gran oportunidad.
Una oportunidad de no solo hacer historia gracias a un número en la portada, sino también de dejar marcado a fuego en el recuerdo de los aficionados un cómic especial. Action Comics #1000 cae en los convencionalismos y opta por una solución muy cómoda, sentar al teclado a una serie de guionistas relacionados (se pueden observar grandes ausencias) con Superman, aplicando el mismo razonamiento para los dibujantes, con la sana intención de plasmar una imagen muy icónica del personaje, donde todo está a su servicio. Y eso es todo, historias que resultan muy satisfactorias, pero que dejan un regusto amargo por no tener nada más detrás, haciendo que este número 1000 resulte casi un anual de la serie y no ese histórico número al que hace referencia.
En la edición USA hubo ocho portadas diferentes, una para cada década, incluyendo en su interior las páginas previas de la historia que Bendis iba a realizar para la miniserie de El Hombre de Acero. En la edición de ECC esa previa se ha eliminado, pero se han incluido el Action Comics Special #01, con historias como la de Mark Russell y la de Max Landis, acompañado a los lápices por Manapul, que vienen a remarcar el espíritu de todo el especial que remata con una historia a cargo de Jurgens, como cierre de un tomo algo más equilibrado que el publicado en USA. Y sin embargo la sensación final continúa siendo de que algo no ha terminado de estar a la altura de las expectativas.
En USA el número en cuestión tan solo logró obtener unas ventas de 500.000 ejemplares, algo irrisorio si sobre la mesa se exponen todos los argumentos anteriores. Unas ventas decepcionantes, se miren por donde se miren. Ejemplares como Spider-Man #800 o Los 4 Fantásticos #01 (Ventas Agosto 2018) (Ventas Septiembre 2018) han logrado cifras, no tan altas, pero si muy significativas y poderosas para ser números con menor peso histórico, apoyándose totalmente en su contenido para atraer a los aficionados. Action Comics, por el contrario, confió demasiado en su peso histórico y descuido el contenido, con historias que no dejan de ser un mosaico que no cohesionan el número y trasmiten un valor que ya de por si se sobreentiende al personaje en cuestión. Nadie cuestiona quien es y que representa Superman, por lo que hubiera sido de agradecer un compromiso más elevado por contarnos algo más alrededor de la figura de Superman y no apostarlo todo a ser el primer número 1000 de la historia del cómic norteamericano.
En la edición de ECC se siente este efecto algo menos marcado gracias a la fusión del Especial Action Comics #01 y el Action Comics #1000, lo que compacta más al especial y añade algo de dulzor al conjunto. Y, sin embargo, es un número a poseer, a atesorar, porque sin duda alguna no es algo que ocurra todos los días y permite poder decir que, efectivamente, cuando se publicó, se estaba allí para contarlo y vivirlo.
Action Comics #1000 es un cómic histórico, fallido al no ser memorable ni ser el contenedor de algo grande, sino por ser tan solo un envoltorio de lujo para un compendio de historias que nos dicen lo grande que es Superman y que distan mucho de emocionar. Una obra indispensable en toda colección más por su valor numeral que por su mirada al héroe que nació entre sus páginas hace ya ochenta largos e intensos años.
Guion - 6
Dibujo - 8
Interés - 10
8
Agridulce.
Con el objetivo cumplido de plasmar la esencia de Superman, Action Comics no logra emocionar como se espera de un cómic tan especial y representativo.
Es un auténtico pufo, y eso que la historia de Bendis y Lee dicen que es lamentable…lo equlibran un poquito con la mejora del Especial Action Cómics 1, y salvable la historia dibujada por Olivier Coipel, pero migajas para en número 1000…Pendiente tengo de leer el 800 de Spidermasn, pero me da que el 801 será bastante mejor, qué opináis???
Si lo dices porque Slott se va, el 801 es el último que guioniza xD Y, a opinión personal, el arco que concluye en el 800 está muy muy bien ;D
Totalmente de acuerdo. Nunca he sido un lector asiduo de Superman, no es un superheroe que me atraiga especialmente, pero esperaba que este histórico número 1000 fuera mucho más espectacular.
Para mi, este hecho histórico y la inclusión de Bendis como guionista, supone un punto de entrada en las colecciones del personaje. Debo reconocer que algunas de las historias que contiene me parecen preciosas, pero se queda muy corto. De hecho, tengo la sensación que se le ha dado mucho más bombo al 30 aniversario de La Broma Asesina (por poner un ejemplo reciente) que a los 80 años (cada vez que lo pienso, flipo) de este personaje.
Como bien dices, oportunidad perdida.
Bueno, yo creo que lo de los 30 años de La Broma Asesina quien le ha dado mucho más bombo no ha sido DC, sino ECC, que sabemos todos de su obsesión por Batman y su menosprecio a todo otro personaje (y da gracias que es Superman, que el número 700 de Flash, que salió este año en España también ni siquiera hacían mención en la portada a la efeméride, imaginate). En EEUU te aseguro que se le ha dado bombo y mucho al número 1000. Otra cosa es que quizá debían haber optado por otro tipo de homenaje, como menciona el artículo, pero bombo y prensa le han dado y mucha, mucho más que a cualquier otra obra este año (salvo quizá la llegada de Bendis a la editorial).
Estoy bastante de acuerdo con la reseña. Si bien algunas de las historias incluidas son preciosas, el resultado final queda un poco descafeinado. Podría pasar por un número 700, 800… Pero quizá merecía algo que lo diferenciara un poco más tal y como el primer número 1000 del mundillo lo merece. Buscaba algo más que ese repaso al icono y los valores que representa. En contra de opiniones que he leído en algún foro, considero que la inclusión del action comics special es un acierto y sirve para enriquecer aún más el contenido del tomo, mientras que no echo en falta la historia de Bendis ya que está enmarcada en la nueva etapa del personaje y no va tan en la línea del resto del material.
En cualquier caso, debo reconocer que he disfrutado mucho con la lectura de este ejemplar.