Edición original:Action Comics 11 y 12 USA, Superman 7 y 8 USA
Edición nacional/ España: Superman ECC Ediciones
Guión: Dan Jurgens, Grant Morrison, Keith Giffen, Sholly Fisch
Dibujo:Brad Walker, CAFU, Dan Jurgens, Jesús Merino, Rags Morales
Entintado: Rick Bryant, Bod McLeod, CAFU, Andrew Hennessy
Color:Brad Anderson, Gabe Eltaeb
Formato:Rústica, 112 págs. A color.
Precio: 11,50 euros
¿Qué es lo que pasa con Superman en su andadura en el Nuevo Universo de DC?
No sé a vosotros, pero cada vez tengo más claro que Superman está funcionando mejor cuando comparte protagonismo con otros héroes que en sus propias colecciones. Me gusta verlo en la Liga de la Justicia, en Batman y Superman y en Superman y Wonder Woman… pero lo que me pasa en Action Comics y en Superman es que cada vez que leo un número me quedo con la sensación de que algo falla, que está incompleto, como si en mi cabeza se activara un relé nostálgico que me hace añorar las épocas pasadas del personaje y eso no es bueno, nada bueno.
Tenemos equipos creativos solventes que han demostrado su buen hacer a lo largo de los años, un personaje que ha trascendido del cómic y es todo un icono cultural a nivel mundial, por lo que cuesta entender que estemos leyendo historias que no pasan de ser entretenidas en las que los fallos se amontonan sobre los aciertos.
ECC recopila de manera trimestral dos números de Action y dos de Superman al increíble precio de 11,50 euros, cuando dichos números en grapa nos costaron, el que se los compró en este formato, 7 euros. Un nuevo misterio de la ingeniería económica que domina hoy los mercados.
Como en el tomo se incluyen dos números de cada colección y no están relacionados entre ellos, os lo resumo en dos partes.
En Action Comics Superman sigue lidiando con la amenaza de Metalek, intentado crearse una nueva identidad secreta tras la muerte de Clark y enfrentándose a un villano que dice haber encontrado en la sobrina de Lois a un nuevo neo sapiens destinado a cambiar el destino de la Tierra.
En Superman la amenaza viene de manos de un extraño robot que trabaja a las órdenes de un Daemonita exiliado. Su misión es la de llamar la atención de Superman para tener un mano a mano con este Daemonita que va a plantearle preguntas que tal vez Superman no quiera responder.
Me lo he pasado bien leyendo estos números. Los de Action Comics bajo la tutela de Grant Morrison están impregnados de un sabor añejo, que no rancio, a las historias de Superman de los años 70, donde todo era mucho más ingenuo y sencillo. El Superman de Morrison es demasiado perfecto y poderoso, lo que le resta atractivo y hace que una historia potente quede diluida en medio de esa visión de un ser que puede enfrentarse a todo sin pensar demasiado en las consecuencias.
Una de las cosas que rescata Morrison con acierto es la relación que Superman tiene con Batman. Son dos caras de la misma moneda donde las circunstancias les obligan a colaborar, tolerándose, ayudándose… pero sin llegar a poder decirse que son amigos. Es de lo mejor de estos números.
En general el trabajo de Morrison resulta confuso. No sé muy bien si es por la narrativa que usa Rag Morales o por la manera que Morrison nos cuenta las cosas. Si tengo que buscar un culpable, me decanto por Morales. Su dibujo fluctúa constantemente. Tenemos dibujos impactantes, dibujos con un marcado estilo clásico y dibujos que son sencillamente horrendos como la primera viñeta que abre el tomo en el que las caras de espanto de la gente son de lo peor que he visto últimamente. Parecen más simios enloquecidos que personas presas del pánico.
Rag Morales me gusta como dibujante o mejor debería decir que me gustaba como dibujante. Su trazo redondeado y sus líneas suaves me enamoraron en Crisis de Identidad. Posteriormente en Hawkman el idilio prosiguió, empezó a morir con su trabajo en Hourman y actualmente ya no me resulta un aliciente para comprar una colección. No creo que lo que haya cambiado sea su estilo, sino su capacidad narrativa. Eso hace que unos guiones como los de Morrison queden farragosos y mareantes. Toda una lástima.
En cuanto al trabajo de Dan Jurgens y Jesús Merino en Superman puedo decir sin pudor alguno que soy un gran seguidor de la obra de ambos. Del primero porque lo considero un guionista y dibujante más que solvente y trabajador, que nos ha regalado grandes momentos para la historia del séptimo arte y que por desgracia nunca gozará del estatus de artista HOT. Su dibujo me gusta, con sus limitaciones, con sus fallos anatómicos, con su falta de expresividad facial, pero me gustan por como los usa para contar historias. Me parece que merece más de lo que recibe por su trabajo y en Superman demuestra que sabe hacer su trabajo como nadie.
Tal vez su pecado sea, como el de Morrison y Keith Giffen, arrastrar tras de sí una estela demasiado clásica para un personaje que se supone relanzado de cero para las nuevas generaciones. Pero aun así no me cansaré de defender a este autor que hasta el día de hoy siempre ha conseguido hacerme disfrutar con sus trabajos en DC.
En cuanto a Giffen es repetir de nuevo lo dicho de Jurgens. Una vieja gloria de los ochenta en una colección del año 2014 que aporta la experiencia y el buen hacer de uno de los guionistas todoterreno de la compañía sin la obligación de demostrar nada, pero que siempre es capaz de, bien en solitario o en compañía como es el caso, de tejer historias que superan la media. Por mucho que sus días de gloria hayan quedado atrás y ahora sus trabajos no estén a la altura de los de antaño también me veo en la obligación de defenderlo porque no hay peor maldición para cualquier artista que haber creado su mejor obra y seguir intentado superarse a sí mismo.
¿Y qué decir de Jesús Merino? Pues que es un entintador increíblemente bueno y un dibujante todavía mejor. Merino es de eses autores que demuestra cuanta influencia puede tener su trabajo dentro de un cómic. Sin sus tintas Pacheco no es el mismo, por poner un ejemplo rápido. Y son precisamente esas tintas y acabados los que hacen que gráficamente Superman esté por encima de Action Comics.
Unos cómics demasiado anclados a un pasado que ya no debería estar ejerciendo influencia alguna, con autores de raza pero muy de antaño que hacen que el conjunto no sea todo lo novedosos que podríamos esperar del mayor personaje de la editorial.
Yo me compré (y leí) los primeros números de Morrison y me bajé enseguida del carro. Primero la irregularidad de Morales, como bien se comenta, hace que junto a viñetas magníficas haya otras de puro espanto, sumado además que ya en el número dos necesitó ayuda a 4 menos de otros dibujantes.
Morrison resulta confuso, muy confuso, de un tiempo a esta parte. Siempre ha sido un autor que ha dependido mucho de la narrativa del dibujante para que éste haga de su caos mental algo legible, pero la verdad es que no recuerdo una obra del escocés reciente que no sea críptica y confusa en grado sumo.
También soy un gran fan de la solvencia y buen hacer de autores clásicos y curritos como Giffen y Jurgens, éste último normalmente denostado pero que yo creo sólido cuanto menos.
Quizás el problema de SUPERMAN no esté tanto en los autores como en la propia editorial. Sabido es que ejercen un control enfermizo sobre el personaje (aunque luego venga la película y se lo estropee) y quizás son ellos los primeros acomodados en una mediocridad de historias que no llevan a ninguna parte.
Esas reediciones ECC mezclando dos cabeceras… uf.
«Primero la irregularidad de Morales, como bien se comenta, hace que junto a viñetas magníficas haya otras de puro espanto, sumado además que ya en el número dos necesitó ayuda a 4 menos de otros dibujantes.
Morrison resulta confuso, muy confuso, de un tiempo a esta parte. Siempre ha sido un autor que ha dependido mucho de la narrativa del dibujante para que éste haga de su caos mental algo legible»,
Muy de acuerdo con el Sr Spirit. A mí, Morales que lo tenía en un pequeño pedestal gracias a su trabajo en Crisis de Identidad y First Wave, me acabó siendo insoportable (y hasta me alegré cuando se lo llevó Mavel). Quizás el problema sea asignar a una serie regular a un artista que no puede de ninguna manera terminar 22 páginas en un mes, pero para mí ha sido más un lastre que otra cosa.
No he leído entera la etapa de Morrison, porque la verdad: mes a mes, me perdía y junto a números cojonudos había otros que se me escapaban cosas… y como ya dije, es una sensación extraña que el Morrison de lo que se suponen son sus obras más extravagantes, como la Doom Patrol o Los invisibles me resultara más cristalino y entretenido que cuando escribe un héroe tan unívoco como Superman. A lo mejor su historia daba mejor para una novela gráfica o una maxiserie y no para un reboot del personaje… no sé donde estuvo el problema, pero algo no fue bien, y se quedó lejísimos de sus mejores obras pijameras.
pero la verdad es que no recuerdo una obra del escocés reciente que no sea críptica y confusa en grado sumo.»
Hombre, Sr Spirit, pues échele un ojo a Joe el bárbaro, donde escribe una historia muy sencilla y muy clara (y muy agradable y además está dibujada por el grandísimo Sean Murphy)
O ya en el campo pijamero, he visto que ECC va a reeditar sus Siete Soldados de la Victoria. Yo los leí en formato «digital» y ahora pienso comprármelos sí o si; tenía muy bien recuerdo, y he aprovechado para releermelos a ver si se mantenía la impresión; y sí. Me parece que es un Morrison muy, muy bueno con todas sus cosas positivas -imaginación desbordante, personajes extravagante, toques de metaficción, tramas alambicadas que son todo menos previsibles y un genuino amor por el género superheroico- y casi ninguna de las malas.
Saludos, Mr X; por cierto, el otro día me compré en una tienda de segundas manos el tomo de Norma del personaje del cual tomas prestado el nick, a ver qué tal está (aunque ya en el prólogo lo califican de obra fallida…vaya forma guai de vender).
Coincidimos bastante, pues. No he catado las obras de Morrison que citas, que Joe el Bárbaro quedó pendiente entre las novedades del mes (el presupuesto es lo que tiene) y ando a ver si lo veo de ocasión. Idem con los 7 soldados, que si no recuerdo mal son 7 mini series o algo así y en su momento me dio pereza. No dudo, ya que me fio de tu criterio, que sea un BUEN Morrison, legible y con ese toque extravagante…pero ambas tienen ya unos 5-6 años.
En todo caso la verdad es que antes, para mí, ver el nombre de Morrison en un tebeo era una garantía y después de su mierda de Batman y su todavía más apestosa EL REGRESO DE BRUCE WAYNE, junto con este Superman, más el recuerdo de su nefasta CRISIS FINAL, más…en fin; que ahora mismo casi te diría que el nombre de Morrison es una garantía de enredo y confusión, y yo soy de los que piensan que un tebeo ha de ser, por encima de todo, legible. Y es una lástima, porque te aseguro que fui muy fan del escocés y, efectivamente, obras como tú dices más bizarras y personales como DOOM PATROL o INVISIBLES son más entretenidas y claras que éstas recientes (quitando las que mencionas).
¿Este? http://www.normaeditorial.com/print.asp?0/0/015300004 😉
Pues a mí me gusta -es evidente-, no me acordaba del prólogo, pero, jope, no he leído todavía nada escrito (de lo poco que ha hecho o nos ha llegado) el Sr Motter que se pueda calificar de «fallido». Lo que ocurre es que es una especie de «antología» en la que colaboran varios artistas, y algunas partes están más conseguidas que las otras.
Los 7 soldados creo que se hicieron más liosos por el modo en que lo publicó Planeta: está compuesto por un capítulo principal que presenta la historia y luego se desarrolla, si, a través de 7 miniseries de cuatro números cada una que se van alternando en un orden determinado hasta desembocar en el final que es otro número. Planeta publicó el principio y el fin y las 7 miniseries por separado, de manera que tenías que tener todo el material e ir abriendo un tomito tras otro… vamos, un lío. Si ECC lo publica en su orden, http://isotopecomics.com/communique/morrisonmethod.jpg es una lectura estupenda. Además, en el apartado artístico es una pasada: cameron stewart, J. h. williams, bianqui, frazer irving, etc, etc.
Para empezar, el precio ya es para descojonarse , ya era un robo descarado el poner 4 números a 8’95(que por cierto se comprometieron en que no lo iban a subir), y ahora te salen 4 números por 12 euros, si señor!
Los cómics de Morrison en The New 52 son de traca. En Action Comics número 3, no me enteré de nada hasta que me lo leí 4 veces. En el MALDITO NÚMERO 3 DE UN MALDITO REINICIO! Si coges un cómic de MARVEL Now! en el número 20 aún te enteras de algo, pero en el tercer número es muy excesivo.
Por otro lado, me encanta el dibujo de Merino, que es uno de mis dibujantes favoritos, pero el de Morales es sinceramente el peor dibujo que he visto en años. Y las caras que dibuja son un insulto a la humanidad, y lo peor es que DC aprueba esos cómics y los pone en el mercado….
Ostrás Mr X. ¿Seguro que el orden de lectura de 7 soldiers que propone Morrison mola? Vale que planeta lo publicó claramente desordenado y que era evidente que había que leer Shining Knight antes que, por ejemplo, Zatanna…pero lo que Morrison propone parece un pollo de cuidao.
Por otro lado, ya me empiezo a cansar de las críticas al Morrison «lioso», de verdad. Su Batman y sus Crisis finales son co-jo-nu-tis. Una cosa es que no te gusten las narrativas complejas (o que no seas capaz de ir más allá del sota, caballo y rey). Pero di que no te gusta, pero no que es malo. Porque NO lo es. A mi el Beto Hernández de Río Veneno en su momento me costaba pillarlo. Pero sabía que era cojonudo, no decía que era malo, si no que no era lo mio (ahora me encanta).
Y por cierto, lo de las reediciones trimestrales es de p%&$ traca. Primero mezclan los materiales y luego lo del precio. A ver si el Action de Morrison lo reeditan en un par de tomos como dios manda porque esta edición trimestral se la va a pillar Rita.
Hombre, Sr Mespine, como lo propone Morrison no me parece más complicado que cualquier crossover al uso en el que hay que ir alternando series.
Sólo lo he leído en versión «digital» y la verdad es que las dos veces lo he disfrutado mucho viendo como todas las historias confluyen en un final de lo más épico y morrisonesco. Vamos, no es más complicado que, por ejemplo, 52, también de DC, y me gusta bastante más.
Sobre el Batman de Morrison, hay partes que me han gustado mucho, como el Batman-Dick Grayson, Batman e hijo y el tramo final de Batman Incorporated y otras que nada, como Batman Rip y el Regreso de Bruce Wayne (que ni siquiera he acabado). Y hay otras que no he leído, porque como fue saltando de serie en serie y fue inventando otras, al final resultó una etapa de lo más difícl de seguir y, en mi opinión, mas irregular que sus X-men o su JL.
y sobre Crisis final, ¿eran seis u ocho números? Bueno, no me acuerdo. Yo recuerdo que me estaba gustando, con esa clima apocalíptico tan conseguido, hasta el penúltimo número… hasta que ahí mi cerebro colapso y empezaron a haber saltos de viñeta en viñeta que no entendía. No entendía nada. No lo he vuelto a intentar leer.
Ya, no digo que no lo de los 7 soldados. Habrá que probar cuando toque relectura.
Batman RIP tampoco me terminó de convencer la primera vez, pero gana mucho cuando se relee toda la etapa seguida, y el regreso de Bruce Wayne está de coña, pero es de esos cómics que exigen paciencia y la parte final hay que leerla en paralelo con Batman y Robin.
Y Crisis Final es muy buena, de verdad. Pero hay que leerla con la mentalidad que te lees los Invisibles o El asco y no con la que te lees las Crisis originales. Porque es posiblemente la serie más personal que ha hecho Morrison desde El Asco. Y me pareció tan gordo que aplicase el nivelón de sus series más hard de Vertigo en un crossover del universo DC, es tan golazo. Si que es cierto que en la recta final metió un poco con calzador el final de la trama desarrollada en Superman beyond en una serie que iba sobre los Nuevos Dioses y quizá le hubiera venido mejor algún número más para desarrollarlo más pausadamente. Pero por lo que leí en alguna entrevista a Morrison le va bastante lo de empezar a ritmos lentos e ir acelerando el ritmo a medida que se desarrolla la historia.
Lo que yo no entiendo, es como Merino no está dibujando alguna de las series potentes de DC, bueno, viendo a ciertos dibujantes que son estrellas en la editorial, lo entiendo mejor.
Los 7 soldados están bien, pero la manera en la que se publicó en España, por lo menos para mí, la hizo incomprensible, y mira que yo tengo mili hecha con Morrison. Lo que sí que había ahí eran excelentes dibujantes, de todos yo me quedo con el Ryan Sook de Zattana.
Con Morrison se da la curiosidad de que su obras más experimentales, sobre todo loa últimos años, son las publicadas en cabeceras más comerciales. Narrativamente Los Invisibles son mucho más estándar que Crisis Final, por ejemplo.
estimado sr. zape: es posible que vuestra merced se encontrase hoy, a media tarde, dándose un garbeo por la zona de la plaza mayor, en compañía de su señora, niño, perrito y un segundo caballero?
Jajaja! si, era mi señor cuñao. Somos tan perfectos que damos asquito…
vale, no te dije nada porque no estaba seguro, ahora ya te tengo controlado para la próxima.
»
#10
zape
12 julio, 2014 de 23:23
Con Morrison se da la curiosidad de que su obras más experimentales, sobre todo loa últimos años, son las publicadas en cabeceras más comerciales. Narrativamente Los Invisibles son mucho más estándar que Crisis Final, por ejemplo.»
Es posible que tenga razón. Personalmente, me gustaría que en estas últimas obras hiciera más concesiones, sobre todo con su uso un poco abusivo de las elipsis.
Bueno, en menos de un mes empieza Multiversity… a ver con qué versión de Morrison nos encontramos.
Yo creo que el desatado… Me parece que cada vez está más interesado en ese tipo de narración, muy interactiva.
No lo dude, drummer. Además el perro no muerde. La niña tampoco.
deduzco que de quien debo guardarme es, por tanto, de su señora 🙂
Un fiera currupia!
Dando un paseo por la Plaza Mayor a la misma hora en que se estaba desarrollando una mesa redonda sobre la novela gráfica en la Semana Negra. Vaya par de comiqueros de los cojones.
la novela gráfica está sobrevalorada
Ni existe, vamos.
No creo que decir que sean confusos sea decir que no los entendemos. Un cómic puede ser complejo y no confuso, ejemplos hay a patadas, pero que sea confuso significa simplemente que carece de claridad, orden o precisión, o que se manifiesta de una forma difícil de percibir. Y eso es justamente a lo que me refiero.
Morrison tienen a sus espaldas cómics como su Patrulla Condenada que de confusa tiene poco y de compleja mucho, mientras que este Superman tiene mucho de confuso y poco de complejo. Que todo al final tenga un sentido no le exime de contarnos las cosas con claridad. Lo uno no tiene nada que ver con lo otro.
Gracias por todos vuestro comentarios.