Aunque Isaac Sánchez (Badalona, 1983) pasó a convertirse en uno de los youtubers más ingeniosos y queridos de la red cuando adoptó su nick «Loulogio» y subió vídeos míticos parodiando programas de teletienda o dando su particular opinión de todo tipo de películas, desde blockbusters hollywoodienses hasta cintas animadas encontradas en el rincón más recóndito del bazar chino de turno, siempre dejó patente que su verdadera pasión era el mundo del cómic. Lo afirmaba no sólo como ávido lector de gran cantidad de obras, sino también como aspirante a creador de contenido en labores de guionista y dibujante. La primera oportunidad para mostrar su valía llegó en el año 2009 cuando publicó su primer trabajo como autor completo mediante la editorial Glenat, El Regreso del Hombre Pez. Su ópera prima mostraba el potencial, todavía por pulir, de un eficiente escritor y un vigoroso ilustrador enamorado del folclore cántabro, entorno en el que hasta ahora ha desarrollado toda su obra.
En el año 2017 y ya con la intención de abandonar, durante un tiempo al menos, YouTube para dedicarse al 100% a su gran pasión llegó, bajo el amparo de Dolmen Editorial, Taxus: El Último en Llegar un nuevo trabajo, esta vez el arranque de una trilogía, enmarcado en el mismo universo que su primer cómic, pero ahondando todavía más en la mitología cántabra que tanto fascina a su autor. Este primer álbum de Taxus ya mostraba a un profesional mucho más curtido con un control más férreo de la narrativa, un diseño de personajes más potente y un trazo en ocasiones bordeante en lo brillante para un, en teoría, ilustrador con poco bagaje a sus espaldas. La historia protagonizada por el tímido y taciturno Benito, el astuto Lado y la aguerrida Anjara en Ciudad Fuente funcionaba como pieza unitaria y mostraba un enorme potencial como relato abierto.
Taxus 2: La Cabra, que ya no cuenta con el nick «Loulogio» en su portada, coronando la misma sólo el nombre y apellido reales de su responsable a modo de declaración de principios, llegó a las librerías españolas en noviembre de 2018 y, como era de esperar, supuso todo un éxito. Echando la mirada atrás Taxus: El Último en Llegar terminaba con la aterradora revelación de que Benito, el «Nuevovenido», profetizado por el Primere, guiado por Lado y cobijado por Anjara se desprendía de su piel de cordero para mostrar al lobo que en él anidaba. El regordete fotógrafo resultaba ser un brutal asesino en serie, un psicópata capaz de cometer los actos más brutales sin un ápice de remordimiento. Esta vuelta de tuerca ejecutada en las últimas páginas del álbum suponía el punto de partida sobre el que se construiría esta nueva entrega en la que Isaac Sánchez vuela por los aires todo su microcosmos y juguetea con las posibilidades de su relato hasta convertirlo en una pieza tan incómoda como edificante.
Llama la atención de Taxus Vol. 2: La Cabra el salto de calidad en el apartado gráfico con respecto al primer volumen, algo que también aconteció en el paso de El Regreso del Hombre Pez al referenciado Taxus: El Último en Llegar. Un servidor no sabe cuánto tiempo pasó entre la creación de los dos números o si realmente fueron ideados en épocas distintas. Pero sí es cierto que el estilo cálido, entre entrañable y visceral, de personalísimo acabado encuentra aquí su más elaborado exponente. La utilización de acuarelas en la primera parte del álbum, centrado en un flashback, o la alternancia de coloreado tradicional y digital muestran un conocimiento más profundo por parte de Sánchez de sus virtudes y limitaciones, siendo ineludible que el uso de splash pages epatantes, recursos visuales con propensión a deconstruir la narración y un diseño más minucioso del bestiario de personajes son muestra cristalina de la evolución de un artista con un prometedor futuro. Ideando historias propias o poniendo sus lápices al servicio de otros guionistas.
Mientras el dibujo mejora a pasos agigantados, en lo referido al guión Isaac Sánchez rompe el tablero y la partida se vuelve del todo imprevisible. Arrancar Taxus Vol. 2: La Cabra por medio de un flashback centrado en el origen de Lado podría quebrar toda la narración sustentada en el cliffhanger que supuso el cierre de Taxus: El Último en Llegar. Pero contra todo pronóstico no sólo enriquece y da una nueva dimensión al microcomos de la obra, también sirve a modo de «expiación de demonios» por parte del autor extrapolando algunas de sus situaciones personales de la vida real al barbudo y lenguaraz personaje. Una vez la historia vuelve al presente Sánchez sigue manteniendo esa deuda con Terry Pratchett o J.R.R. Tolkien, y las adaptaciones cinematográficas de Peter Jackson por efecto dominó, ya presente en el primer número, mientras juguetea con la estética de sus personajes, imposible no pensar en una amalgama entre Onslaught y el Venger de la serie animada de Dragones y Mazmorras con la presencia de cierto villano, y recurriendo a resonancias trágicas adheridas a los hechos expuestos en la recta final, dejando un regusto amargo o creando paralelismos con aquella saga del «Eclipse» con la que Kentaro Miura dejó a cuadros a los fans de su manga Berserk.
Taxus Vol. 2: La Cabra supone la definitiva confirmación de Isaac Sánchez como un autor patrio a seguir muy de cerca por su inusual tendencia a arriesgar donde otros preferirían entregarse a la seguridad proporcionada por la ortodoxia y el academicismo. Una segunda entrega que huye totalmente de lo acomodaticio y sencillo para abrazar el riesgo o la causa perdida encontrando así la perfecta conjunción entre guión arriesgado, pero cohesionado, y apartado gráfico de alto nivel. El pasado jueves Sánchez confirmaba por redes sociales haber entregado todo el material de lo que en un futuro próximo será Taxus 3: Lo Que Dejamos Atrás, presunto cierre de la trilogía que Dolmen Editorial publicará, si no se presente ningún obstáculo imprevisto, a lo largo del mes de julio. Después del excelente resultado de este segundo capítulo no podemos esperar con más ganas la conclusión a los hechos acaecidos en Ciudad Fuente desde que Benito salió del mítico árbol Taxus y dio un vuelco a la existencia de los habitantes de tan peculiar localidad.