¿Para ser escritor hace falta estar un poco loco?
GH Fretwell es un escritor británico que consigue ir publicando lo que escribe, aunque sin obtener demasiado reconocimiento por parte de los lectores. Con motivo del lanzamiento de su nuevo libro, Fretwell se embarca en una gira para presentarlo en diversas librerías. Parece que esta va a ser su gran oportunidad, que por fin alcanzará el reconocimiento que tan desesperadamente lleva buscando durante toda su vida. Sin embargo, nada va según lo planeado y la situación se vuelve cada vez más desastrosa, hasta el punto de que cada pilar de su vida empieza a correr peligro.
The Book Tour – Autor en gira cuenta con guion y dibujo del británico Andi Watson, un autor que hasta ahora se había movido por el terreno del cómic infantil pero que con The Book Tour se atreve a proponer una obra mucho más adulta en la que se tratan toda clase de temas delicados. Publicada originalmente por Top Shelf Productions a finales de 2020, esta obra se llevó una nominación en los premios Eisner de 2021 en la categoría de “Mejor álbum gráfico nuevo” y otra en los premios Harvey del mismo año en la categoría de “Mejor cómic del año”. La obra ha aterrizado este octubre en el mercado español de la mano de Nuevo Nueve.
The Book Tour es, sobre todo, una obra que va sobre la escritura. No lo hace en un sentido explícito, como podría ocurrir en un ensayo, ni tampoco presenta una historia autobiográfica, otro recurso que es muy habitual ver a la hora de tratar el tema. Lo que Watson decide hacer aquí, en cambio, es partir de la experiencia de ser escritor para desarrollar una reflexión tragicómica ―por momentos psicodélica― sobre lo que eso puede suponer para una persona.
Al igual que Parents, la película de 1989 dirigida por Bob Balaban, nos presentaba una historia en la que el tono de «cachondeo oscuro» progresaba en continua ascensión gracias a la distorsionada perspectiva desde la que un niño de doce años puede ver el mundo y a sus padres, en The Book Tour se plantea un ejercicio similar desde la perspectiva de un escritor de ficción que padece de muchos de los males inherentes o derivados del propio acto de escribir.
En su manual de guion titulado Escribir con viñetas, pensar en bocadillos, David Muñoz mencionaba una frase que se me quedó grabada a fuego por la cruda pero precisa realidad que exponía: “los escritores somos una explosiva mezcla de inseguridad y ego”. Esa cita bien podría servir para definir con bastante acierto al señor Fretwell, el protagonista de The Book Tour; y sobre ella, precisamente, gira la trama.
La primera mitad de este cómic se esfuerza por mostrarnos la vida de su protagonista, sus circunstancias y, en especial, esa mezcla explosiva de la que habla Muñoz. En cada escena podemos ver cómo Fretwell se muestra en todo momento como alguien cuyas inseguridades condicionan su forma de actuar hasta en los gestos más pequeños. Del mismo modo, Watson demuestra la destreza narrativa suficiente como para hacer saber al lector mediante señales sutiles que no se trata de inseguridades “puras”, sino que Fretwell se comporta de esa forma, en gran parte, para tratar de camuflar la realidad de su ego.
Cuando el protagonista afirma que no quiere causar ninguna molestia, cuando sostiene que no le importa que nadie haya acudido a la firma de su libro o cuando se niega a tratar con un mínimo de contundencia a personas que actúan de forma cuestionable, se nota que en el fondo le gustaría ser el centro de atención por una vez, que se siente muy dolido por no haber vendido ni un mísero ejemplar en su sesión de firmas y que se muere por soltarle cuatro cosas bien dichas a ese desconsiderado señor.
De este modo, lo que The Book Tour nos presenta es realidad una historia de reconocimiento. Desde el principio, al protagonista las cosas solo le van de mal en peor en una trama que se complica a cada página que pasa. Muchas de esas complicaciones surgen, en primer lugar, como consecuencia de los actos que lleva a cabo guiado por su faceta más insegura, al intentar ser amable y no molestar a nadie pese a cómo se sienta él por dentro.
En una escena concreta, una chica con la que habla Fretwell bromea con el hecho de que para ser escritor hay que estar un poco loco. La reacción instintiva de nuestro protagonista es negarlo. Independientemente del tono de broma con el que se sirve, la realidad es que dicha afirmación y la posterior reacción de Fretwell ejemplifican su necesidad de no portarse como quien realmente es. En definitiva, estamos ante una muestra más de ese “cachondeo oscuro” por el que se deja llevar esta obra, casi como un chiste de humor negro especialmente dirigido al mismo tipo de espécimen que lo ha ideado: el escritor. Medio en serio medio en broma, Watson plantea la cuestión de qué pasaría si los escritores ignoraran toda clase de filtro y la mezcla explosiva que los compone se desatara en todo su esplendor; como un monstruo que consigue librarse de la jaula que lo confina.
Pasando a otros aspectos de The Book Tour, es posible que el apartado visual de Watson eche para atrás en un primer vistazo a más de uno. Se trata de un dibujo en blanco y negro, extremadamente sencillo y que se aleja de cualquier valor preciosista o detalle innecesario. Si bien no estamos ante un punto a favor de la obra, lo cierto es que sí que resulta suficiente a la hora de transmitir la información que se pretende, demostrando una vez más que lo más importante en el dibujo de cualquier historieta es su capacidad para comunicar ideas con eficacia.
En conclusión, considero que The Book Tour es un cómic que puede gustar a cierto tipo de lector, pero que sin duda no es para todo el mundo. Aunque la trama de misterio que se va tejiendo a cada página es interesante y la lectura fluye a buen ritmo ―menos en una escena de puro diálogo que dura casi 20 páginas y se puede hacer bastante pesada―, el tono general y el resultado final de esta obra me llevan a recomendarla solo a aquellos que se sientan especialmente atraídos por los temas expuestos a lo largo de esta reseña.
Lo mejor
• Siempre es de agradecer que una obra opte por un tono distinto respecto a lo que estamos acostumbrados.
• La trama de misterio.
• El ritmo con el que fluye la lectura la mayor parte del tiempo…
Lo peor
• … Menos en una escena de puro diálogo que se alarga durante casi 20 páginas.
• El dibujo, desde un punto de vista estético, puede echar para atrás a más de uno.
• Personalmente, no me ha gustado el final, pero entiendo por qué sí podría funcionar para otros lectores.
Guion - 7
Dibujo - 6
Interés - 6.5
6.5
Cachondeo oscuro
The Book Tour es una obra peculiar, para bien y para mal, lo que no la hace recomendable para toda clase de público. Sin embargo, si su propuesta te llama especialmente la atención, posee bondades suficientes como para convertirse en una lectura interesante.
