The Fox #1-5: Freak Magnet

 

Edición original: The Fox #1-5 (Archie Comics).
Guión: Dean Haspiel, Mark Waid, J.M. DeMatteis.
Dibujo: Dean Haspiel; Mike Cavallaro.
Entintado: Dean Haspiel; Terry Austin.
Color: Allen Passalaqua; Steve Downer.
Formato: Grapa, 32 páginas.
Precio: $2,99.

 

Los superhéroes de Archie Comics tuvieron su momento de manera intermitente, con renacimientos, relanzamientos y desapariciones. A pesar de su poca aceptación comercial y popular, suelen dejar algo interesante en sus producciones. Estamos aquí ante otro ejemplo de esos tantos de la historia de Red Circle Comics (nombre con el que se conoció por la mayor parte de su historia a todo el grupo de personajes superheroicos de Archie), en su nuevo resurgimiento bajo el ala de su casa madre sin licencia de por medio.

En el caso de The Fox, estamos hablando de un personaje creado en la primera oleada de superhéroes de esta editorial, en el año 1940. Luego de varias reapariciones, se creó una segunda versión que es el hijo del original, que data de la década de 1980. Es este último el protagonista de esta miniserie, cuyo nombre real es Paul Patton Jr.

La miniserie The Fox no fue pensada como la publicación principal de la línea editorial para la vuelta a su hogar en 2012, pero curiosamente terminó dando el basamento esencial para un nuevo relanzamiento de estos personajes de Archie, encontrándose a mitad de camino entre dos iniciativas. Siendo precisos, esta miniserie surge como un spin-off del cómic New Crusaders que tuvo cierto éxito y buena recepción pero que fue dejado de lado en una nueva búsqueda del sello editor, lo cual será Dark Circle Comics, y mantendrá al mismo Fox que leemos en estas páginas porque como dijimos inspiró la idea de historias indepedientes atadas más o menos a un género y dando libertad a los autores para trabajar. Pero eso será en 2015, con un segundo volumen. Lo que ahora nos compete es el primero publicado entre comienzos de este año y finales del pasado.

El principal responsable de este trabajo es Dean Haspiel, con diversos créditos en cómics (tales como colaborar en American Splendor con Harvey Pekar, entre muchos más títulos), más allá de figurar su nombre junto a otros grandes como Mark Waid y J.M. DeMatteis. El autor de la historia y de los dibujos es el propio Haspiel, mientras que Waid y DeMatteis son colaboradores en cuestiones de guión relativas a los diálogos. Cabe esta aclaración sin que vaya en desmedro de la tarea de ambos guionistas, que resulta imprescindible y que aporta mucho al producto final.

La idea de Haspiel, según cuenta en las columnas al final de cada cómic, fue realizar una aventura pulp en la actualidad, su 2013, combinando personajes clásicos del mundo superheroico de Archie (héroes y villanos) con elementos y tópicos propios de las historias de aquella época pero combinándose con otros tantos de nuestro siglo XXI. La intención de una trama pulp lo llevó por el derrotero de lo curiosa y divertidamente bizarro y algo fantástico, lo cual también se denota en los personajes escogidos del archivo de Red Circle, así como en la manera de contar (plasmado en los diálogos de Waid y en los dibujos de Haspiel) y en el propio tono de la narración. El resultado es una lectura animada, graciosa y ciertamente extraña por momentos, pero lograda de una manera entretenida que da gusto y hace reír en su lectura.

La premisa parte de que Paul Patton Jr. desea llevar una vida simple, abandonando la tarea superheroica para dedicarse al periodismo y la fotografía. Sin embargo, dado que es un imán para los fenómenos (de allí el título Freak Magnet) constantemente atraerá a uno u otro villano extraño de la vieja historia de Archie, lo cual le impedirá conseguir su objetivo.

En cuanto a la estructura del guión también es poco convencional para una miniserie, lo cual ya no es necesariamente muy positivo. Cuenta con un #1 introductorio al personaje y su mundo (y en parte relacionándolo con el citado volumen de los Crusaders), dando lugar a la trama principal que se desenvuelve en los #2, #3 y #4, para luego de un final bastante definitivo llegar a un #5 que se relaciona de forma directa con las historias breves de The Shield incluidas como complemento (dibujadas por Mike Cavallaro), pero bastante independiente de la otra historia de The Fox.

Es en ese número final que el cómic es realizado junto J.M. DeMatteis y no con Waid, ya que aquel es el guionista de las historias secundarias del personaje emblemático de los superhéroes de Archie. Si bien es bueno unir ambas partes de una revista para darle un sentido, así como también proporcionar un cruce entre los dos protagonistas añadiendo un punto de interés, no deja de ser una estrategia editorial poco común para una miniserie. Distinto sería el caso si se tratara de una serie regular…

Pasando a la cuestión de los dibujos, nos encontramos que a lo largo de su vida The Fox tuvo artistas interesantes y atractivos como Tony DeZuniga, Alex Toth y Michael Avon Oeming, lo cual no le deja una tarea fácil a Dean Haspiel. No obstante, su estilo muy estilizado, su capacidad como narrador secuencial que aprovecha la página acertadamente, y la expresividad que da a los rostros (especialmente a la máscara del protagonista) lo hacen salir más que airoso del desafío.

Con algunas características interesantes y siendo una lectura entretenida, pero sin ser una obra maestra como algunas críticas han sugerido, The Fox: Freak Magnet es otro cómic a tener en cuenta para quienes gusten de los de superhéroes en tono de comedia, acción y aventuras.