Tótem, de Laura Pérez

Un viaje entre las fronteras del mundo físico y el espiritual.

«En ocasiones, las realidades se entremezclan. Conectan unas con otras.»

Ocultos (Astiberri) fue una de las mejores obras aparecidas en 2019, se trataba de la primera novela gráfica de Laura Pérez en la que ejercía como autora completa y le sirvió para cosechar multitud de premios como el Premio El Ojo Crítico de Cómic 2020, el Ignotus 2020 al mejor tebeo nacional y el Splash Sagunt al mejor álbum nacional de 2019. Así que tras el buen sabor de boca que nos dejó su lectura esperábamos con ganas la aparición de Tótem, su nuevo trabajo, que está disponible en las librerías desde hace unos días editado por Astiberri. Estamos ante un cómic que está íntimamente conectado a su anterior obra, tanto en lo estético como en lo argumental ya que en ambas vemos el interés de la autora por explorar esas otras realidades que no percibimos desde la razón, pero que son las que han forjado algunas de las creencias de la humanidad relacionadas con los espíritus que encontramos en cualquier civilización sea cual sea su localización geográfica o temporal. Tótem es una de esas obras que hay que leer más con el corazón que con la cabeza y dejarse transportar por sus bellísimas viñetas hacia otros mundos.

Laura Pérez nos propone una narración poliédrica en la que se entremezclan diferentes historias en las que las protagonistas viajan entre el mundo físico y el espiritual, a través de diferentes paisajes y épocas. Todas esas historias se unen para forman un conjunto de episodios de diversas caras y miradas obteniendo como resultado un tótem de vivencias, sueños y creencias que se interconectan a través del tiempo y el espacio. Cada una de las pequeñas historias que conforman la obra tiene entidad propia y nos permiten acceder a mundos que cohabitan con el «real» unidos en el horizonte de los diversos lugares que visitan las protagonistas. El hilo conductor de la obra es un viaje en coche que emprenden dos mujeres por las polvorientas carreteras que atraviesan los desiertos de Arizona, durante el mismo las protagonistas comienzan a cuestionarse las creencias familiares gracias a los pasajes que recuerdan de su pasado. En esos recuerdos se mezclan elementos costumbristas con otros más fantásticos para hablarnos de los sueños, la vida y la muerte, de todos esos misterios que marcan nuestra existencia, algo similar a lo que vimos en Ocultos, aunque en esta ocasión, no es una obra tan ligada al terror y resulta más poética y evocadora, pero sin renunciar a turbar al lector gracias a algunos detalles siniestros.

Además de la preponderancia de las protagonistas y sus recuerdos, en la obra también juega una importancia capital el entorno donde se desarrolla, ya que como dice uno de los personajes de la obra “hay lugares donde lo cotidiano es extraordinario.”. Unos escenarios retratados de manera bellísima gracias a su personal estilo, capaz de transmitirnos la atmosfera y emoción que requiere el relato en cada momento. Narrativamente es una obra muy bien planteada que deja que las imágenes sean las que cuenten las historias, en las que abundan los silencios, las miradas y las escenas sin diálogos. También hay que destacar el uso del color, ya que la obra combina dos paletas de colores muy diferencias con páginas con tonos cálidos que corresponden a las escenas que transcurren en el presente de la obra y otras con tonos grises que nos relatan las escenas del pasado. Un recurso que cumple una doble función, puesto que además de su poder narrativo también sirve para separar las diferentes escenas.

1 de 4

Laura Pérez es una ilustradora e historietista nacida en Valencia en 1983. Como ilustradora ha trabajado en medios tan prestigiosos como The Washington Post, National Geographic, The Wall Street Journal, Vanity Fair, El País, Penguin Random House, entre otros. Su carrera como historietista comienza en diversos fanzines de la comunidad valenciana. En 2015 recibe el premio Valencia Crea por su historia corta Empatía. Al año siguiente aparece Naugrafos junto al guionista Pablo Monforte, por la que habían recibido el IX Premio Fnac Salamandra Graphic. Su historia corta Juega obtuvo un accésit en el I Concurso Nacional de Cómic Biblioteca Insular de Gran Canaria y fue publicada en el tomo En Corto (Astiberri) que recogía las historias seleccionadas. Esa misma historia apareció posteriormente en Ocultos. Además, hemos podido ver alguna historia suya en el libro colectivo De Muerte (GP Ediciones) y en libros ilustrados como Los secretos de las brujas (Errata Naturae) con textos de Elsa Whyte y Julie Légère o Sirenas de leyenda (Errata Naturae) con Rémi Giordano y Olivia Goda. Actualmente está trabajando en un nuevo cómic que tiene prevista su aparición a lo largo de 2022.

Astiberri hace una edición fantástica en la que destaca el gran diseño de la obra, en particular, la portada y la contraportada.

Tótem es una obra que nos transporta a esos mundos ocultos, oníricos e irreales a los que solo creemos acceder después de un escalofrío, o en la quietud y paz que nos transmiten los paisajes de esta obra. Un viaje increible para el que hay que obviar la razón y dejar que la imaginación tome el control.

Lo mejor

• La consolidación del personalísimo estilo gráfico de Laura Pérez.
• Los juegos de silencios y miradas.
• Esos horizontes que se convierten en el portal a otros mundos.

Lo peor

• El universo tan personal de las obras de Laura Pérez puede no ser del gusto de todos los lectores.