La actualización de Matanza
«¿Dónde estoy? ¿Y por qué huelo a perro mojado?»
Resulta curioso para este redactor emprender la reseña de estos tomos pertenecientes al Universo Ultimate. En primer lugar, por una cuestión puramente emocional, y es que fue este Universo el que hizo que a mis doce años comenzara la lectura de cómics de una forma regular, por lo que siempre aún con sus muchas carencias, estaré agradecido a la Tierra 1610 que hizo que me acercara a la 616 y al resto de universos y cómics que pueblan el noveno arte.
En segundo lugar, cuando emprendía la lectura de estos cómics, tenía la sensación de que estaba leyendo algo nuevo, fresco, rompedor, y cuando eso ocurre, tienes la sensación de que esa frescura permanecerá ad aeternum, que no podrá haber nada más moderno que el Universo Ultimate, ni que analice mejor una época concreta.
Por eso hoy, con mis treinta y tres años, se me hace muy extraño al releer estas historias darme cuenta de que como todo, el primer lustro del Siglo XXI pertenecía a otra época, una era marcada por el 11S y lo que éste significó, y que por eso, los cómics de dichos años, adolecen hoy de una serie de elementos que un adolescente no entendería porque no conectaría con estos tebeos como lo hacíamos los adolescentes de aquella época.
Lo que digo es una obviedad y a nadie debe sorprenderle, pero es con el Universo Ultimate el producto con el que más consciente soy del paso del tiempo para una forma de hacer cómics.
Pasada esta pequeña reflexión, entramos ya en el séptimo tomo integral dedicado a Ultimate Spiderman, el cual alcanza setenta y un entregas de la colección, entrando ya en la recta final de la etapa conjunta de Brian Michael Bendis y Mark Bagley a los mandos de la colección.
En esta ocasión, siendo el objetivo principal del Universo Ultimate acercar héroes y villanos a una nueva generación que no dependiera de varias décadas de continuidad, le llega el turno a Matanza, una vez que Veneno y la particular forma de Bendis de afrontar la saga del traje negro ya habían aparecido en la colección.
Sin embargo, hay una particularidad respecto de la actualización de este villano, y es el hecho de que quien se encarga de diseñar y dibujar al mismo es Mark Bagley, ilustrador que a su vez es cocreador del Matanza original. Nunca antes el creador de un personaje ha tenido la oportunidad de rediseñar al mismo para otro sello editorial, correspondiente normalmente esa labor a otros dibujantes que nada tienen que ver con la creación del personaje.
Por esto mismo, Mark Bagley que podría haber recurrido a lo fácil, que sería llevar a cabo una actualización de la historia contada en Amazing Spiderman 361 con David Michelinie, decide precisamente virar ciento ochenta grados y ejecutar un trabajo completamente diferente.
Aquí no vamos a encontrar a Cletus Kasady, ni a un personaje que se le parezca. Tampoco volverá Eddie Brock para atormentar a Peter. No, en esta ocasión, Matanza surgirá gracias a Veneno, pero al simbionte en sí, y no a un contacto humano de Brock con nadie. Será la propia ciencia la que haga de las suyas, creando un ser, Matanza que sí, será más brutal y peligroso que Veneno, pero no porque sea más sádico como le ocurría a Kasady, si no porque estaremos ante un monstruo sin alma ni conciencia cuyo único objetivo es consumir y matar.
Por supuesto, esto llevará a Peter por caminos que no esperaba, haciéndole una vez más, encontrarse con la pérdida cuando menos se lo esperaba, en esa espiral de dolor constante en la que siempre vive un Parker al que ser Spiderman le quita mucho más de lo que le da.
Por otro lado, en este tomo, se incluye un curioso número, un experimento por el que en clave de humor, el propio Bendis pide disculpas a su comienzo. Un curioso accidente hará que Lobezno y Spiderman intercambien sus mentes, dando lugar a una versión comiquera y superheroica de la película Ponte en mi Lugar que tantas veces hemos visto.
Lo que podría parecer una locura sin sentido, resulta curiosamente muy divertida de leer y disfrutable, convirtiéndose en uno de los números más recordados de esta divertida serie.
Todo ello además, se cerrará con una aparición estelar del Doctor Extraño que nos hace ver posibles fuentes de inspiración para la última película del trepamuros.
Lo mejor
• Que Mark Bagley no aproveche el camino fácil y nos ofrezca un Matanza que poco tiene que ver con el original.
• Que algo tan loco como intercambiar las mentes de Logan y Peter resulte en una historia divertida.
Lo peor
• Que algunas de las consecuencias del final de esta historia se deshicieran a futuro.
Guión - 7
Dibujo - 8
Interés - 7
7.3
Original
Brian Michael Bendis y Mark Bagley, el equipo creativo más estable de Marvel, continúan narrando las aventuras del Spiderman definitivo.
Gracias por la reseña!!
Siempre me ha gustado el universo Ultimate, al menos en los inicios que es lo que he leído yo. Me da mucha curiosidad el tema de los simbiontes, creo que es ahí donde me quedé (en el de Veneno), y me han entrado ganas de retomarlo y seguir
Para mí gusto, el mejor comic arácnido de los últimos ¿30? años. Que bien retorcía bendis los conceptos del Spiderman 616.
Caray, es que bendis fue muy muy bueno.
El Ultimate Spiderman es más regular que el clásico, cosa lógica si tenemos en cuenta que hablamos de un período de unos quince años con un equipo creativo con apenas variaciones, frente a seis décadas con guionistas y dibujantes de todos los colores.
Es por ello que la serie no tiene bajones tan significativos como sí los tiene su hermana mayor, pero tampoco alcanza picos tan altos como sí los tuvo the Amazing Spiderman con la «Muerte de Gwen» o «Nada puede detener al Juggernaut», entre otras.
Y sí, uno de los secretos de su éxito fue que Bendis iba absolutamente a la suya, tomando conceptos e interpretàndolos o enfocándolos bajo un nuevo prisma. Ahí cabíamos todos, los nuevos y los viejos, era embarcarse en otro viaje con Spiderman desde el principio en el que no sabíamos qué iba a pasar en el siguiente número. Si para los nuevos era una colección en la que descubrían a Spiderman, para los viejos era una montaña rusa, un carrusel de emociones y sorpresas nuevas con sabor a clásico al mismo tiempo.
Inolvidables «Poder y responsabilidad», «Curva de aprendizaje» y aquella retahíla de chistes en las mismas narices de Kingpin, Ultimate Spiderman 13, el origen de Venom (brillante como pocos) o la Saga del Clon tan denostada en la serie mayor.
Cuando llega Miles Morales la serie mantiene el tipo, pero también queda patente que su mejor momento ha pasado, retomando su mejor nivel prácticamente al final, en su brillante último arco.
Una colección imprescindible, para el recuerdo.