De talentos especiales, mafia parisina y mujeres valientes
«Llegará un chico con el corazón en las manos. Le amaré. Y sufriré por ello»
El término francés pieuvre – en femenino – es sinónimo de poulpe y se traduce en castellano por pulpo. Pero, de manera figurada, viene a designar a las organizaciones criminales de diversos lugares, más a menudo a las francesas. Existe una expresión italiana equivalente: la piovra que denomina figuradamente a una persona parásita, que vive cruelmente de los demás y también, por elevación, alude a la Mafia.
Por otra parte, la Comuna de París, instaurada brevemente la primavera de 1871, es considerada por muchos como un movimiento insurreccional y revolucionario mucho más importante y profundo que la propia Revolución Francesa de 1789. La toma del poder municipal durante dos meses por una población empobrecida y su posterior represión, terriblemente cruel y sanguinaria, marcaron a fuego la ciudad de París e influyeron en la ideología de teóricos de la revolución como Marx, Bakunin o Mao Zedong.
Un destino de hallador de Gess es la segunda obra de las tres que componen – de momento – la serie Los cuentos del Pulpo. Estamos ante una trilogía que comparte una ambientación histórica; el siglo XIX, un protagonista colectivo; la organización mafiosa llamada la Pieuvre (el Pulpo) y un escenario urbano; París.
Tras la represión de la Comuna y los cinco años de toque de queda que imperó en la capital francesa, la sociedad parisina se debate entre la represión, la desigualdad y la pobreza.
La policía forma parte de los aparatos represores del Estado y en la policía actúa el inspector Émile Farges, un agente poco ortodoxo que tiene el talento de encontrar a las personas desaparecidas tirando una piedra sobre un mapa, cuanto más preciso es el mapa más precisa es la localización. Farges colabora también con las Hermanas de la ubicuidad, una sociedad secreta formada por mujeres de París que busca encontrar y proteger a las prostitutas maltratadas por sus chulos o clientes. Eventualmente se dedican a castigar a los maltratadores, violadores y/o asesinos. Farges las ayuda ya que su pareja forma parte del clan que dirige la hermandad, todas poseedoras a su vez de talentos extraordinarios y sobrenaturales como el hallador. Pero la represión no es la única función de la policía, Émile Farges está dedicado casi en exclusiva a la caza de El desangrador, un asesino en serie que viene actuando, al menos, desde hace diez años. A pesar de su talento, el hallador no consigue encontrarlo, aunque la respuesta a este misterio está en el pasado, en un episodio terrible que el propio Émile no recuerda y que remite a otro personaje mucho más peligroso…
La mezcla de folletín histórico, reivindicación feminista y proletaria, relato de misterio o cuento fantástico acaba resultando bastante coherente. Gess consigue casar casi todos los elementos para construir una intriga atractiva e hipnótica que nos va arrastrando hasta el desenlace final. Los flash-backs son emotivos y complementan con acierto la narración principal. La inclusión de un concepto como el de las Hermanas de la ubicuidad para resaltar el papel de las mujeres en la Comuna de París y, en general, en todos los movimientos auténticamente revolucionarios resulta fascinante pero tiene un cierto sabor a compensación, una propuesta fantástica que suple la auténtica recuperación de la memoria histórica, que nos sitúe en su contexto real el papel de las mujeres en los cambios profundos de la sociedad a lo largo de los siglos. Aunque, evidentemente, esto no es una labor que le competa a Gess.
La parte gráfica es excelente y se erige en otro de los grandes atractivos de esta obra.
Gess se confiesa admirador de Moebius, Giménez y Corben, pero su estilo se asemeja más al de Andreas, Tardi, Fred o incluso Druillet. El dibujante de Carmen Mc Callum suele plantear sus páginas con una cuadrícula de cuatro tiras asimétricas con tres viñetas cada una. Una tira central – la segunda o la tercera – suele ser mayor que las demás y a menudo ocupa el espacio de dos tiras. No escatima con el uso de viñetas mayores que ocupan media página o sus dos tercios. Su narrativa es ágil, nerviosa, llena de detalles que nunca resultan superfluos.
La definición de los personajes de Gess roza el cartoon pero sin caer ni en la deformación ni en la caricatura. Sus rostros son esenciales pero con gran personalidad, donde los ojos tienen un papel decisivo para describir lo que padecen y lo que piensan cada uno de sus protagonistas. Gess tiene un entintado poderoso que combina con soltura la línea y la mancha para construir páginas poderosas, barrocas pero bien equilibradas.
El uso del color se convierte en un recurso narrativo más. En Un destino de hallador, Stéphane Girard da preponderancia al uso del bitono para dar unidad a cada secuencia que imagina. Así podemos ver pasajes donde predominan el verde y el negro, otros donde la dominante son el violeta con el rosa y bastantes secuencias donde el ocre es el color esencial de cada escena. El conjunto resulta diáfano y sugerente.
Además de la historia principal, este volumen contiene un hermoso relato breve titulado Los 3 amores de la Bestia de veinte páginas que relata el origen de uno de los seres implicados en la trama principal. Es un cuento con reminiscencias rousseaunianas y también lovecraftianas, que deja la puerta abierta a futuros episodios.
Gess (Stéphane Girard) nació en Rouen en 1961. Sus primeros pasos artísticos se encaminaron hacia las maquetas, la serigrafía y el diseño de camisetas, llegando a trabajar para la marca Oxbow. Debutó en la bande desinée colaborando en el fanzine Chat Noir. Tras realizar numerosas historias cortas, presenta a la editorial Zenda la sinopsis de Teddy Bear (1992-1995) que al ser aceptada se convertirá en una serie de tres álbumes, escrita y dibujada por el mismo Gess. Casi paralelamente, dibuja para la editorial Delcourt la serie Carmen Mc Callum (1995-2020), con guiones de Fred Duval y de la que se encarga de los tres primeros ciclos – nueve tomos en total – entre 1995 y 2007. Entre 1996 y 1997 escribe los guiones de un díptico titulado Kazandou que dibuja Humbert Chabuel y edita Glénat.
Al dejar Carmen Mc Callum, Stéphane Girard toma la realización gráfica de la serie La Brigade chimérique (2009-2011) una serie de seis volúmenes que escriben Serge Lehman y Fabrice Colin, colorea Céline Bessonneau y publica Éditions l’Atalante. Con el mismo Serge Lehman realiza un álbum en solitario titulado L’homme truqué (2013) que publica también L’Atalante y una serie de tres álbumes con el título genérico de L’oeil de la nuit (2014-2016) que publica Delcourt.
A partir de entonces decide trabajar en solitario en una serie titulada Les contes de la Pieuvre (2017-2021), editada en Francia por Delcourt, que de momento consta de tres historias y entre las que está Un destino de hallador, que reseñamos en este artículo, y que publica Ponent Mon/Catarata en castellano. Su aportación a la serie Conan le cimmerien que publica Éditions Glénat data del 2020 y consiste en la adaptación de la historia Les mangeurs d’hommes de Zamboula de Robert E. Howard. Realiza tanto en el guion, el dibujo como el color, aportando a la colección uno de los mejores trabajos que se le recuerdan.
Paralelamente, ha realizado una interesante carrera de ilustrador y portadista de ciencia ficción, encargándose para Éditions de l’Atalante de varias portadas para la serie de novelas de Orson Scott Card.
Gess vive en la actualidad en Nantes, está casado y tiene dos hijos.
La edición física y técnica del álbum a cargo de Ponent Mon y Catarata es espectacular. El álbum es en tapa dura, esta excelentemente impreso y cuenta con un papel excelente. No contiene ningún texto adicional ni biografía del autor y el precio es algo elevado.
Un destino de hallador es un espléndido thriller histórico, un excelente relato fantástico y un convincente alegato feminista y obrero. Su autor niega influencias directas de movimientos como el #MeToo o de Les gilets jaunes, pero su discurso entronca con lo mejor de estos movimientos regeneradores y a la vez controvertidos.
Con esta obra, Gess consigue convertirse en un autor indispensable para entender el cómic europeo de la actualidad. Esperemos que la editorial Ponent Mon nos complete pronto la trilogía para ver si estas impresiones positivas se sostienen o por lo contrario se diluyen… Me aventuro a afirmar que estamos ante la primera opción.
Salut!
Lo mejor
• La mezcla de folletín, cuento fantástico y alegato feminista/obrero.
• Una gran trama detectivesca.
• La excelente edición de Ponent Mon.
Lo peor
• Un precio algo elevado.
• El desenlace, que resulta algo precipitado.
Guion - 8
Dibujo - 8.5
Interés - 8
8.2
Folletinesca
Una edición perfecta de una historia interesante, gráficamente estimulante y llena de ideas y emoción. Esperamos el resto de la trilogía con impaciencia.
Gracias por tu reseña. Haz logrado interesarme en esta obra. En algunas páginas que aparecen en el artículo, encuentro cierte influencia de Guido Crepax