Veneno: Las Reglas del Juego

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Aviso de Spoilers: El artículo que sigue a continuación trata información de actualidad en Estados Unidos, por lo que puede desvelar detalles argumentales que todavía no han sido abordados en la edición española.

Fruto de los convulsos ochenta, Veneno puede ser con toda probabilidad uno de los personajes con la gestación más compleja que podemos encontrar en el comic. Debiéndonos remontar hasta las Guerras Secretas originales para encontrar el origen del traje alienígena, Spider-Man permanercería ligado al mismo durante una larga temporada hasta que tras descubrir su verdadera naturaleza se desprendiera de él en la mítica escena del campanario en el primer número de Web of Spider-Man. No sería hasta año y medio más tarde cuando David Michelinie comenzó a preparar la llegada del personaje que conocemos hoy con un subargumento en el que Spider-Man se veía acechado por una amenaza desconocida capaz de superar su sentido arácnido. Fascinado por la idea del trepamuros desbordado por la paranoia, Michelinie mantendría la incognita abierta hasta que con motivo del número 300 de Amazing Spider-Man su editor le pidiese una historia especial. Proponiéndole el argumento que llevaba desarrollando dureante dos años en la colección hermana, aunque en principio Michelinie tenía pensado que el hospedador del traje fuera una mujer, su editor determinaría que una fémina no era amenaza para Spider-Man.

Decantándose finalmente por Eddie Brock, en Mayo de 1988 Veneno era presentado bajo los lápices de Todd McFarlane convirtiéndose inmediatamente en una de las nemesis más encarnizados del trepamuros. Dejando una fuerte impronta entre los fans de la época, los 90 serían su coto privado ocupando un puesto de privilegio entre los villanos de la editorial. Así, tras un lustro atormentando al telarañas, la editorial decidiría darle cancha como versión oscura del mismo. Tras sacarse de la manga un spin off que ejerciera como contrapartida demencial y psicótica del personaje (Matanza) el personaje concatenaría un sin fin de miniseries en solitario o acompañado. Junto a Punisher, Veneno es el villano del trepamuros que mayor éxito ha cosechado por cuenta propia.

Sin embargo, tras la sobreexplotación llegaría la muerte de éxito y entre Trampa Mortales en La Bóveda, Máxima Matanzas, Planeta Simbiontes y una larga lista de vástagos que ni el Hulk actual, el personaje quedó desdibujado hasta verse reducido a una parodia de si mismo. Pero antes de llegar a dicho punto, en una década en la que personajes como Spawn eran considerados lo más de lo más pasaría por las manos de autores como Len Kaminski, Ann Nocenti, Bruce Jones, Danny Fingeroth o, sobre todo, Larry Hama. En lo que respecta al apartado gráfico, Veneno demostraría tener un potencial sin fin para que artistas como Mark Bagle o Duncan Rouleau experimentasen con sus fluidas formas.

Tras pasar por las manos de Howard Mackie el personaje caería en el limbo para regresar en pleno siglo XXI desde páginas del Spectacular Spider-Man de Paul Jenkins paralelamente a la serie escrita por Daniel Way (la más longeva que haya tenido hasta la fecha y, paradójicamente, una serie de Veneno en la que Veneno casi no aparece). Descubriéndose entonces la afección de cáncer padecida por Eddie Brock, él y el simbionte ponían fin a su unión en Marvel Knights: Spider-Man de Mark Millar despues de más de 15 años de relación. Dejando la miniserie de Zeb Wells y Ángel Medina como legado, hospedador y simbionte seguirían distintos rumbos mezclándose con otra gente.

Aunque lo cierto es que anteriormente tampoco es que la relación entre el simbionte y Brock fuera exclusiva (la ex-mujer de Eddie Ann Weying, Franklin Richards, Patricia Robertson o Lobezno entre otros lo lucirían durante un breve tiempo) si que se les consideraba un «uno» que debían ir por norma juntos. Actualmente este concepto se ha hecho mucho más abierto hasta el punto de considerar como Veneno al simbionte independientemente de a quien vaya unido. Ya haya sido con mayor o menor trascendencia, Ángelo Fortunato, Mac Gargan o Ms Marvel han sido los diferentes hosperadores que han portado el simbionte desde su ruptura con Brock. Esto nos conduce directamente a la más candente actualidad americana, donde el personaje iniciaba la semana pasada una nueva etapa con un nuevo enfoque, nuevo equipo creativo y nuevo hospedador. A continuación os ofrecemos un análisis de los principales puntos y virtudes que nos ofrece este relanzamiento del Protector Letal.



Proyecto Rebirth 2.0

Este nuevo enfoque del personaje tiene su raíz en el relanzamiento de la franquicia arácnida en sincronía con la Edad Heroica y que, bajo el título Big Time, reorganizaría los títulos encuadrados dentro de ella como inicio de una nueva etapa en las aventuras del trepamuros. Considerando que en su etapa como Veneno, Mac Gargan había servido fundamentalmente para reducirlo a su nivel más básico sin mediar complejidades morales ni cortarse a la hora de usarlo como saco de golpes, el que este hubiera sido ingresado en prisión como resultado del final del Reinado Oscuro abría la puerta para darle una nueva dirección al simbionte con la que se le pudiera sacar mejor partido.

Tras confiscar el simbionte, el Departamento de Seguridad Nacional lo emplearía para dar inicio al Proyecto Renacimiento 2.0, un dispositivo militar secreto creado para sacar partido a sus habilidades dando vida a una nueva variante de supersoldado orientado al cumplimiento de misiones clandestinas específicas en guerra contra el terrorismo internacional. Bajo el mando del General Bradley Dodge, el proyecto cobraría vida seleccionando a algunos de los más valerosos y condecorados operativos militares para que sirvieran a su nación instigando el miedo entre aquellos que amenacen la estabilidad mundial atentando contra los derechos humanos. Previamente medicado para mantener el control sobre el simbionte, el hospedador contaría con una amplia gama de habilidades a su disposición entre las que se incluirían superfuerza, agilidad y velocidad aumentadas, adherencia a superficies, lanzarredes orgánicos o mimetismo. Conservando además la maelabilidad del traje y su capacidad para crear bordes cortantes, incrementar la masa o tomar diferentes formas simulando otros tipos de tejidos, este ha sido mejorado con varios mecanismos extras como un sistema de inoculación de drogas y sustancias químicas que emplear contra sus objetivos así como el equipamiento militar básico incluido una pistola múltiple especialmente diseñada para su portador y capaz de reconvertirse en un fusil de largo alcance.

Con el funesto historial de Veneno a sus espaldas como elemento disuasorio, el portador del simbionte emprendería una implacable cruzada contra los enemigos de la paz mundial sin ningún tipo de lazo oficial con el ejército americano. Sin embargo, el hospedador debe ser capaz además de cumplir una serie de requisitos para mantenerse en servicio:

  1. Ser capaz de controlar su temperamento evitando abrir la puerta que le permita al simbionte tomar el control.
  2. No permanecer en contacto con el simbionte más de 48 horas continuadas para que este no quede vinculado a él de forma duradera.
  3. Por las mismas razones, el candidato seleccionado no podrá realizar más de 20 misiones con el simbionte. Alcanzado dicho límite, este sería retirado del servicio en activo cediendo el testigo a un nuevo hospedador.

Durante sus misiones de campo, el operativo contará con la supervisión de la Capitana Katherine Glover, quien se ocupará tanto de su transporte hasta el objetivo bordo del F-119 Sky Spider específicamente preparado para darle soporte así como del resto de las funciones de inteligencia y logística. Mediante un dispositivo implantado en su cuerpo, el hosperador recibirá de forma instantánea toda la información necesaria de la mano Glover, quien ejercerá como sus ojos desde el cielo velando tanto por su seguridad como la de la propia misión. Sin embargo, Glover tiene una responsabilidad doble respecto a Veneno siendo su objetivo tanto protegerlo como desactivarlo si este pierde el control. Equipada con un botón de la muerte (o de apagado si queremos una traducción menos literal) Glover podría desactivar completamente al simbionte dejando al hospedador él en caso de que este se dejase llevar por los impulsos homicidas del simbionte o decidiera ir por su cuenta. Después de cada misión, tanto portador como simbionte son sometidos a una serie de análisis por parte del responsable científico del proyecto doctor Aaron Mackenzie. Purgando el organismo del primero mediante un pulso sónico, Mackenzie es responsable de controlar que la fisiología de este se mantenga estable después de cada misión así como de recuperar integramente el traje evitando que ninguna traza de este salga al exterior. Aportando su conocimiento bioquímico a la misión, sobre sus hombros recae el bienestar del operativo así como de los que podrían resultar damnificados de darse una fuga de seguridad.



El Hospedador

Nombre: Cabo Eugene F. «Flash» Thompson

Lugar de Nacimiento: Queens, Nueva York

Relaciones: Hijo de Harrison y Rossie Thompson, tiene una única hermana (Jesse) y actualmente comparte una relación con la redactora del Daily Bugle Elizabeth «Betty» Brant. Entre su circulo de amigos cabe destacar al primogénito del depuesto director de HAMMER Harry Osborn así como la supermodelo Mary Jane Watson, el miembro de Horizon Labs Peter Parker y Liz Allen. Anteriormente estuvo vinculado románticamente a Felicia Hardy, identidad civil de la vigilante a sueldo y ocasional delincuente Gata Negra.

Juventud: Hijo de oficial de policía, Flash iniciaría sus estudios en el Instituto Midtown matriculándose en la Universidad Empire State gracias a una beca como jugador de fútbol americano.

Historial de Servicios: Tras alistarse en el ejército serviría en el sureste asiático logrando valiosos logros en el cuerpo antes de pasar a la reserva iniciando su carrera en el deporte. Viéndose frustrada en un fatídico accidente, Thompson caería en una espiral que culminaría con su ingreso en estado de coma a manos de las autoridades sanitarias. Después de recuperarse, Thompson ejercería como profesor de deportes en el Instituto Midtown hasta que, después de una serie de funestos acontecimientos acaecidos en este, regresara al servicio activo durante la ocupación armada de Iraq por parte del Ejército de los Estados Unidos. Durante el transcurso de una misión, él y su pelotón se verían atrapados en una emboscada de los insurgentes. Arriesgando su vida para proteger a sus compañeros, el Cabo Thompson resultaría herido tras salvar la vida de su comandante. Perdiendo ambas piernas a consecuencia de ello, recibiría la Medalla de Honor siendo trasladado de nuevo a la reserva. Obligado a desplazarse en silla de ruedas, desde entonces ha demostrado ser todo un ejemplo de coraje en su empeño por superar su condición.

Perfil psicológico: Víctima de una infancia traumática, el Cabo Thompson se vería aquejado por una fuerte inseguridad manifestada en brotes ocasionales de descontrol. Refugiándose en los éxitos del deporte, durante su infancia mostraría un carácter cruel y agresivo contra otros niños de su entorno. Sin embargo, la inspiración en su héroe Spider-Man le alentaría a ser mejor persona y con los años, no solo fue capaz de controlar dicho carácter, sino que le incitaría a ingresar en el ejército para seguir sus pasos a su manera. Como otros veteranos, tendría problemas con su readaptación a la vida civil y, tras encadenar en varios fracasos tanto en lo personal como lo profesional, padecería un brote de alcoholismo del que ha conseguido recuperarse con el tiempo. Sin embargo, la vida no dejaría de castigarle y en dos ocasiones durante los últimos años, Flash ha tenido que ser ingresado de gravedad ya fuera por su caída en coma o la amputación de sus dos piernas. Todavía con secuelas de ambas, por más palos que le de la vida Thompson consigue constantemente sobreponerse dando todo un ejemplo de coraje personal.



Confeccionando un Nuevo Traje para Veneno

Tomando como base los planes de Dan Slott y Steve Wacker para ambos personajes, el responsable final de traernos este nuevo relanzamiento de las aventuras de Veneno será el guionista Rick Remender. Autor de Danger Girl y The End Leage, en Marvel sus trabajos más relevantes han sido el relanzamiento de Punisher durante la Edad Oscura, la actual colección de Uncanny X-Force así como la frustrada serie del Doctor Vudú. Para acompañarle tendremos a uno de sus colaboradores habituales, el dibujante Tony Moore (Los Muertos Vivientes, Los Exterminadores) con el que ya trabajara en Fear Agent o la última colección de Frank Castle. Según palabras de Remender, cuando Wacker le ofreció guionizar la nueva serie de Veneno no podía estar más feliz con la idea. Siendo más que patente su pasión por las historias pulp de horror, sobra decir la brutal masa de alquitrán dentada creada por Michelinie y McFarlane le fascinó desde su irrupción en los comics. Sin embargo, no estaba seguro respecto a Flash Thompson a quien recordaba como un patán abusón. Esto cambiaría tras leer la historia escrita por Marc Guggenheim para el número 574 de Amazing Spider-Man y las continuadas reuniones con el equipo editorial del trepamuros, las cuales le permitirían captar las bases del personaje interesándose por la idea.

Según describe Remender en su entrevista a CBR, el verdadero núcleo de la colección es el modo en el que Flash Thompson afronta una nueva situación desencadenada por la convivencia con el simbionte y como esta afecta a sus problemas cotidianos. Su alcoholismo, los traumas de la infancia y sus dificultades para controlar su carácter jugarán un peso específico cuando estos se vean potenciados por un estatus que le obliga mantener sus emociones más viscerales a raya. Esta es por lo tanto una historia de autocontrol en la que el hecho de que el protagonista tenga que abandonar su identidad superheroica tras acabar cada misión tiene un papel especial. El contraste entre una vida enmascarada en la que, como Veneno, viaja por todo el mundo emulando a su héroe Spider-Man mientras se enfrenta a peligrosos supervillanos y una vida civil en la que, condenado a la silla de ruedas, cosas tan simples como levantarse o tomar una ducha se convierten en una odisea hace que esta sea especialmente difícil de sobrellevar.

En referencia a esto último, Remender señala que las similitudes entre el nuevo Veneno y Spider-Man serán tan patentes como sus diferencias. Con la oportunidad de ponerse en los zapatos de su héroe, Flash tendrá que lidiar con los problemas que conlleva la doble vida tales como la carga que acompaña al poder o los problemas que esta acarree en su vida personal. Por un lado desea servir a su país y hacer el bien, pero por otro debe padecer los costes de la responsabilidad aun a costa de ver resentirse su relación. Pero por otro lado, a efectos prácticos él no es un héroe, sino un soldado. Esto juega un papel determinante afectando a la misma forma con la que enfoca sus misiones. Flash no es Punisher ni X-Force, pero es un soldado experimentado y capaz que ha sido entrenado para matar y que lo hará sin dudarlo si se encuentra en dicha situación. Sin embargo, esto también significa que ante todo obedece ordenes cumpliedo toda aquella misión que su país le encomiende, por lo que no lo veremos tomándose la ley por su mano como pueda ocurrir en el caso de Spider-Man. En sus primeras aventuras lo veremos lanzarse sobre zonas de guerra cumpliendo labores de infiltración y salvamento, por lo que matar al enemigo está dentro de las posibilidades.

En lo que atañe a la relación de Flash con su traje, Remender ve al simbionte como algo mucho más complejo que una «cubierta de chocolate«. Quedando patentes las capacidades telepáticas del traje ya desde sus primeras historias, el guionista recalca la unión a nivel de tejido nervioso que existe entre el hospedador y este. Si lanzas tus garras contra un enemigo y este las corta, el portador lo siente como si fueran suyas, por lo que esta unión debe de estar ahí. Por tanto, cuando tras cada misión a Flash le retiran el traje es un poco como si le quitaran una parte de él, algo a lo que está trágicamente familiarizado tras la pérdida de sus piernas y que harán particularmente enrarecidos los periodos de separación entre ambos. Aun cuando no este unido a él, Thompson continuará sintiéndolo como una extremidad perdida que continúa sintiendo notando pero de forma mucho más agresiva.

Cabe recordar que esta no es la primera vez que se le da este enfoque de meta-espionaje a las aventuras del Protector Letal. Larry Hama ya haría algo parecido en la miniserie Veneno: Licencia para Matar, una suerte de homenaje del guionista a las películas de James Bond en el que una organización gubernamental secreta reclutaba a Brock para que realizase operaciones específicas bajo sus órdenes. Dibujada por Derek Aucoin, la miniserie tendría una extensión de tres números publicados en 1997.

En lo que respecta a la actual trama, comenzaría a desarrollarse a partir del lanzamiento de Big Time en el número 648 de Amazing Spider-Man con la separación de Gargan del simbionte. Volveríamos a saber de la misma en el epílogo del 654, número en el que Flash era presentado como nuevo Veneno dejando sentadas además las bases con las que se desarrollaría su etapa tomando el lugar del personaje. El especial Point One estaría enteramente dedicado a él marcando el inicio de su colección. Ahora, con el primer número de esta ya a la venta desde la semana primera, Veneno ya ha agotado las tres primeras de sus 20 misiones en lo que de momento parece una andadura prevista para durar y que buenos momentos puede dejarnos mientras dure.



Veneno para Todos

En lo que respecta al reparto de la colección, aunque Veneno operará generalmente solo en el campo de batalla contará con el soporte de un equipo cuyos principales componentes indicábamos más arriba. De entre ellos, Remender destaca al General Dodge quien, lejos del típico estereotipo que se dedica a gritar el nombre de sus inferiores mientras los llama gusanos, se trata de un estratega cerebral con un gran esquema que pretende llevar a cabo en su momento pero cuyas intenciones son en su mayoría un misterio. Habiendo ascendido a su rango después de perder la vista, Dodge es muy consciente de la situación de Flash y de cuales son por tanto sus valías y sus defectos. El hecho de que lo eligiera no tanto porque fuera perfecto, sino porque aparte de su aptitud tiene una idea clara de sus limitaciones hace que el general sea un personaje especialmente creíble según describe el propio guionista.

Pero como existe vida más allá del trabajo, si a alguien le tocará jugar un papel relevante en esta nueva etapa es a la atribulada pareja de nuestro protagonista Betty Brant. Personaje clásico del trepamuros donde los haya (del número 4 de Amazing Spider-Man nada menos), de ella el guionista destaca como mientras realizaba las tareas de documentación varios detalles de su pasado que tenía olvidados reflotando para dar lugar a una interesante simetría con la situación actual. En concreto se refiere a la muerte de su esposo Ned Leeds tras ser descubierto bajo los ropajes del Duende, lo que la sumiría en la depreseión de una de las etapas más duras de su vida. Es por ello que, para Betty, la posibilidad de que su actual pareja lleve una vida resulta especialmente dolorosa al recordarle lo vivido con su esposo. Con Flash obligado a mantener su alterego en secreto pese a ser completamente consciente de lo que tuvo que atravesar, este tendrá que hacer verdaderos esfuerzos para evitar que su relación caiga víctima de los secretos y la desconfianza. Sin embargo, Betty estará lejos de asumir el papel de «Penélope» en esta relación. Convertida en una capaz reportera, no se conformará con aguardar en su apartamento de brazos cruzados mientras se pregunta donde estará Flash ni cogiendo cabreos oportunos cuando este falta a una cita. Según Remender, la periodista del Bugle tendrá un papel muy importante y activo en la colección llevandonos hasta un sorprendente giro en el número 10 de esta.

Quien no podía faltar a la cita es por supuesto Spider-Man, quien cruzará caminos con el simbionte y su nuevo portador en una épica historia que, según el guionista recupera lo mejor de los enfrentamientos entre ambos personajes. El hecho de que en esta ocasión sea Flash quien esté bajo el simbionte le da un dramatismo añadido al mismo, más considerando como se desarrollará el mismo tomando como base lo que suceda en ambas colecciones.

En lo que respecta a los villanos, durante los cuatro primeros números tendremos a una misteriosa figura tramando entre las sombras como responsable de un cartel internacional de venta de armas que amenaza con desestabilizar el estatus quo internacional. Tratándose de un personaje ya establecido, este pretende instaurar una red de crimen global con él mismo a la cabeza. Una suerte de Kingpin a escala mundial que gracias a convertir en arma el vibranio antártico dispone un elemento desequilibrante por el que se pelearan todas las naciones y grupos terroristas del mundo. Las consecuencias de esto se dejarán notar ya desde el primer número en el que presenciaremos como un grupo de insurgentes lleva a cabo una limpieza étnica en un país de Europa del este sin que las tropas de las Naciones Unidas puedan hacer nada para detenerles. Una vez presentado, este villano -quien según palabras del guionista aspirará a un puesto que por derecho le pertenece- tendrá un importante peso sobre otros títulos de la editorial.

Contando con un nutrido grupo de sicarios a su disposición, entre ellos encontraremos una nueva versión de Jack O’Lantern, quien se enfrentará a Veneno en el primer número de la colección. Según Remender, aunque siempre le gustó la iconografía del personaje nunca pudo quitarse la sensación de que era un Duende Verde de tercera fila. Es por ello que entre él y Moore pasaron largas horas pensando como reconstruir al personaje dotándolo de una ideosincracia propia. Potenciando la faceta de Halloween, los artistas describen a este nuevo O’Lantern como una «piñata de la muerte» que extiende la idem a su paso con una amplia variedad de retorcidos juguetes letales, desde hoces láser hasta «regalitos» de antimetal pasando por unos bizarros «cepos ectoplásmicos» que parecen sacados de Superman 2. Dejando como firma de sus tropelías las cabezas de sus víctimas perpertradas como si de adornos de Halloween se tratasen, Remender describre el diseño de Moore como Hellraiser con hebillas y correas.


Pero este no será ni mucho menos el más peligroso villano al que tenga que hacer frente Veneno. Y es que en el segundo número de la colección, viajará a al Tierra Salvaje siguiendo la pista del comercio fraudulento de vibranio para encontrarse a una de las más temibles némesis del Hombre Araña. De nuevo entre los vivos tras Cacería Macabra, Kraven descubrirá a nuestro protagonista deambulando por sus territorios dando pie a un inevitable enfrentamiento. Buscando la muerte desesperadamente, el patriarca de los Kravinoff se encuentra actualmente condenado a una vida incompleta de la que no le es posible escapar a menos que Spider-Man (el mismo catalizador de su maldición) le ponga fin. Al tomar a Flash por Spider-Man, Kraven se lanzará a su caza poniéndolo contra las cuerdas. Si enfrentarse a uno de los más peligrosos rivales del trepamuros en su tercera aventura no es suficiente, Thompson tendrá que hacerlo en un terreno hostil favorable para el cazador mientras que cada momento en el que pierda el control amenaza con que el simbionte tome el control sobre él. Prometiéndonos que el segundo número tendrá uno de los arranques más demoledores que haya escrito, el guionista comenta que ha sido tanto un reto como un honor poder escribir a Kravinoff en su más pura esencia trabajando desde los términos dejados por DeMatteis en su inmortal obra.

Del resto de personajes que tomarán parte de la colección no añade nada, aunque por nuestra parte podríamos sugerirle que sería interesante ver a cualquiera de los otros simbiontes por estas páginas, ya sea Brock, Tóxina, Payback, Hibrido o un recién regresado Matanza. Brock se suma a esta disfuncional familia como enésima revisión de ese muñeco de brea que llevó la fatalidad al asombroso dios Anansi.



Con el primer año y medio de la colección ya diseñado, Remender describe los cuatro primeros números de la colección como una vertiginosa aventura de acción sin pausa en la que Veneno apenas disfrutará de respiro. Dejando un quinto número para la pausa y explorar como le ha afectado lo sucedido, lo que pase a partir de ahí es un terreno desconocido en el que, a cada paso que se aproxima a su última misión, el miedo ante la inminente separación crecerá hasta al punto de hacerse insostenible. Sombria y repleta de monstruos, es la serie que él y Moore estaban aguardando. Ahora solo esperan ser capaces de trasladar esa emoción a los lectores y que estos conozcan a Veneno no solo como un Spider-Man de operaciones encubiertas, sino como un personaje que va a dejar su huella en la actualidad editorial y que tendrá un importante papel en el próxima gran historia del trepamuros.

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KishiroWan
KishiroWan
Lector
18 marzo, 2011 17:27

Muy buen artículo. Aunque la verdad este personaje dejó de interesarme desde hace bastante tiempo incluso antes de que Brock dejara de ser Venom. Básicamente yo creo que este personaje lo fastidiaron en el mismo momento en que pasó a las filas de los buenos, pero claro, es mucho más fácil y sobre todo mas rentable hacer una serie de un heroe que la de un villano. De todas formas da igual lo que suceda en un futuro, dada la cíclica narrativa que posee el cómic de superheroes en general y Marvel/DC en particular, Brock volverá a ser Venom, Flash Thompson será de nuevo el perdedor de siempre y

Aviso de Spoiler

la antorcha humana resucitará.

wayne
wayne
18 marzo, 2011 17:37

Ese «motibo» con b de la entradilla de la portada, que hace daño a la vista…

elbichoemboscado
elbichoemboscado
18 marzo, 2011 17:39

¡¡Arrrgggg!!
«Con motibo…»
El horror, el horror….
 
Oh, casi se me olvida, cualquier mensaje que señale una falta debe contener otra en su enunciado.
Haber… que no me pase eso a mí…
 

Loki
Loki
Lector
18 marzo, 2011 17:40

El primer numero me ha gustado y el concepto creo que es interesante… la posibilidad de cambiar al hospedador permite que la serie sea muy flexible; por otro lado, remender ha hecho los deberes y Flash esta bastante bien plasmando con todas sus taras, siendo un heroe imperfecto al estilo de la vieja escuela de marvel… sin embargo no creo que el chicle se estire tanto como para una serie regular, veremos… yo la voy a seguir

Armin Tamzarian
Autor
18 marzo, 2011 17:47

Enéismo debate encarnizado sobre si es mejor llamar al personaje Veneno o Venom en 3.2.1….
 
Buen artículo, por cierto.

deuorld
deuorld
18 marzo, 2011 18:35

¿Para que un debate como ese…..?
Si es causa perdida…..

GramatiMan
GramatiMan
18 marzo, 2011 18:58

Aunque sé que «Hospedador» es correcto, suena mil veces peor que «Huésped».

LovePsycko
LovePsycko
18 marzo, 2011 19:06

¿Hospedador? ¿No será huésped? Es que es la primera vez que escucho la palabra hospedador.

Avenger_Fan
Avenger_Fan
18 marzo, 2011 19:30

Cuantos años hace que Eddie Brock NO es Venom? Es que algunos no parais de repetir de que todo volverá a ser lo de antes y parece que esos AÑOS en los que las cosas han sido distintas no han sido nada.
 
Si las cosas cambian, malo. Si vuelven a lo anterior… pues también malo.
 
 
Saludos!

Avenger_Fan
Avenger_Fan
18 marzo, 2011 19:32

¿Hospedador? ¿No será huésped? Es que es la primera vez que escucho la palabra hospedador.
 
Aqui puedes leer palabras nuevas cada dia: El otro dia me partí de risa con… Conan Resurreciona!

Lucifer & Elina
Lucifer & Elina
18 marzo, 2011 19:45

Pues por lo poco que van, parece bien hecha la serie. El hecho que tenga los poderes de su heroe y todo lo que sacrifica por ellos en la doble vida que lleva es lo mejor que han hecho con Flash en mucho, mucho, mucho tiempo. Esperemos que lo sepan llevar y no lo estiren innecesariamente, que otro de los puntos interesantes que le vemos es el de los relevos.

Nananiero
18 marzo, 2011 21:59

Vaya unas traducciones, que me sangran los ojos!!!
Relatives significa relativos cuando hablamos por ejemplo de gramática y nos referimos a las frases de relativo. Si leemos un poquito más del texto nos damos cuenta de que relatives aquí significa parientes. Es un False Friend de manual, al igual que el término familiar en inglés significa familiar en cuanto a similar o que algo me suena, pero no tiene que ver con la familia.
Por favor, intentad usar los traductores online lo menos posible. Registraos en wordreference.com. Es un muy buen diccionario online en el que tienes la posibilidad de consultar en los foros si tienes dudas acerca de una palabra o expresión.
Dicho lo cual, a mí Veneno pues no me entusiasma demasiado. Me van los villanos más sutiles y no sólo músculo y testosterona. De todas formas ya estaba bien de dibujarlo como a un Hulk con la lengua fuera, me gusta más este diseño. ¿No os recuerda un poco al Spiderman Noir?
 
 
 

Ocioso
Ocioso
Lector
19 marzo, 2011 1:40

Hospedador mata a sus relatives y estos resurreccionan.
¡Mola!

Vegita_Lee
Lector
19 marzo, 2011 2:37

pues a mi eso de que se siente muy bien mientras esta con venom, pero que se siente vacio cuando vuelve a lo civil, me suena a avatar totalmente….xD

salebaaay
salebaaay
19 marzo, 2011 2:40

este remender se ha fusilado la trama de haunt, y haunt se fusilo unos cuantos poderes de venom pero prefiero haunt, es mas divertido, esto lo cancelan en un año…o menos
me recuerda el counter que marvel lanzo para competir contra spawn, aquel «nightmare» no lo recuerdan ???? eso es bueno
 

wolvie
wolvie
19 marzo, 2011 5:33

Los dibujos son horrendos!!!!!!

Enrique
Enrique
Lector
19 marzo, 2011 14:45

A mí lo que más me llama la atención es que Flash sea un veterano de Vietnam y de Irak… ¿Seguro que no combatió también en las dos guerras mundiales? ¿Tal vez en la revolución francesa?

Mila
Mila
Lector
20 marzo, 2011 13:21

A mi lo que me resulta llamativo es que con la gran fuerza mental y auto-control que deben exigir a todos aquellos que se unan al simbionte…
¿Por qué escogen al tio de la infancia dura y traumática, veterano de guerra y con problemas para mantener el control?
¿No es algo un poco absurdo?

Nananiero
20 marzo, 2011 15:21

Daniel Gavilán, si te refieres a ese sentido, no utilizaría relativos, sino relaciones. Si te das cuenta, no es un sustantivo, sino un adjetivo.

Nananiero
20 marzo, 2011 15:22

Me refiero a que relativo es adjetivo, y no sustantivo, sorry.

carlos
carlos
21 marzo, 2011 23:31

Gran reportaje! muy interesante!
 
Pero, por favor, corrige «inebitable»…