El pasado 2018 Marvel hacía un anuncio importante, no a nivel de cabecera principal, pero sí para resucitar una serie que, con sus momentos buenos y sus momentos malos, formó parte importante de la historia de la editorial, volvían los Vengadores de la Costa Oeste, pero lo hacían de forma relativamente diferente a como fueran los originales. Pero antes de empezar, repasemos. ¿Quiénes eran los originales?.
Bajo la dirección editorial de Jim Shooter y con Mark Gruenwald como autor completo, Marvel lanzaba en 1983 la primera serie de Ojo de Halcón, limitada a 4 números, que posicionaba al personaje como uno de los más relevantes del momento en lo que a Vengadores se refiere, algo para lo que ya tenía carrera. Esto llevó a que un año después la editorial se atreviese a lanzar una segunda serie de Vengadores, también en formato de miniserie de 4 números, que serían capitaneados por el mismo Clint Barton, pero con Roger Stern y Bob Hall como autores. El primer número jugaba con quién podrían ser los personajes que formaran parte de este nuevo grupo, que en lugar de estar afincados en Nueva York, en la clásica mansión de Los Vengadores, se movían a la Costa Oeste, a Los Ángeles. La serie se llamó West Coast Avengers, aunque aquí se llegó como Los Nuevos Vengadores, y tras acabar esta limitada, poco menos de un año después, en octubre del 85, aparece como serie regular, escrita por Steve Englehart y con lápices de Al Migrom. Sus primeros miembros fueron el citado Ojo de Halcón, Pájaro Burlón, Tigra, el Hombre Maravilla y Iron Man, James Rhodes en la serie limitada y Tony Stark en la regular, pero fueron muchos los personajes y los autores que pasaron por esta serie que llegó a los 102 números, finalizando en 1994. De ahí en adelante hubo muchos otros equipos de Vengadores, solo hay que mirar los últimos años, hasta estos se reconvirtieron por un breve período de tiempo en Force Works (Fuerza de Choque en la edición de Forum), pero nunca se recuperó el nombre de West Coast Avengers.
Entonces llega 2018, como decía antes, y Marvel trae de vuelta a un equipo de Vengadores con sede en Los Ángeles, sin embargo no hay parecido con los originales ni grandes nombres en ellos, excepto el propio Ojo de Halcón, Clint Barton, que está en el grupo pero no lo dirige, eso lo hace la otra Ojo de Halcón, Kate Bishop, así que al final sí hay un Ojo de Halcón liderando el grupo. También está Tigra, más o menos, y así mismo la pareja del líder, como lo fuera Pájaro Burlón de Clint, pero poco más se puede decir. Vengadores Costa Oeste se convierte aquí en una serie mucho más juvenil, que sigue más la estela de los Jóvenes Vengadores que del grupo anterior. La serie fue publicada en España por Panini en formato grapa doble bimestral, constando de 5 números que recopilan los 10 americanos. Ahora veamos quiénes son los miembros.
LOS PERSONAJES
Miembros del equipo:
Secundarios importantes:
LA SERIE
Cabe preguntarnos ¿hasta qué punto es necesaria, o incluso lógica, la recuperación de una cabecera como Vengadores Coste Oeste hoy en día?. Desde hace ya un par de décadas los Vengadores se hicieron mundiales, la globalización llegaba más que nunca durante el presente siglo al mundo de los superhéroes, si bien su campo de actuación sigue siendo mayoritariamente los Estados Unidos, cada vez se nos hace menos extraño que aparezcan por cualquier parte del planeta, por lo que mostrar un grupo de personajes cuyo ámbito se reduce a un territorio tan pequeño como pueda ser un estado, ya que no es “Costa Oeste” sino “California”, parece sacarlos un poco de la realidad actual, más aun cuando tienen a una teleportadora tan poderosa como es Ms América. De ahí que Marvel tuviera algo de razón al no crear una nueva colección con este título, pero también es cierto que la recuperación de una cabecera clásica siempre es un buen reclamo publicitario, aunque en este caso es más engañoso que nunca, si alguien espera encontrar aquí unos Vengadores al estilo de las tres primeras décadas de la editorial que se olvide, esta colección está mucho más cerca de ser una nueva versión de los Jóvenes Vengadores.
La persona escogida para realizar esta serie es una autora que ha desarrollado gran parte de su trabajo en Marvel, Kelly Thompson, que empezó como novelista pero pronto se movió al mundo del cómic en editoriales independientes como IDW, donde tuvo un éxito moderado con Jem and the Holograms, o Boom! Studios. Desde que entra en la casa de las ideas no ha parado, se encargó de series muy interesantes como Pícara y Gambito, Sr. y Sra. X, A-Force… y ahora hace lo propio con la Capitana Marvel o Jessica Jones. En el caso que nos ocupa debemos irnos a una de las mejores, la de Ojo de Halcón que llegó a tener 16 números y seguía las aventuras de Kate Bishop en solitario, tras viajar a Los Ángeles y abrir un negocio como investigadora privada. No es que aquella serie sea una previa para esta, es que Vengadores Costa Oeste es una continuación de Ojo de Halcón, que ahora pasa a tener grupo por una situación que vemos en el primer número.
Thompson tiene un estilo peculiar, no es una autora que se explaye con grandes batallas, suele preferir ir más a lo personal, a desarrollar a los personajes marcando bien las relaciones entre ellos, haciendo que se muevan y trabajando los diálogos. Sus historias no están exentas de acción, la hay y mucho, pero se nota que sus partes preferidas, y las que mejor se le dan, son en las que los personajes interactúan, la calma. Pero además en esta serie se nota que tiene menos ataduras y tira por villanos y situaciones algo más cercanas al humor, solo hay que ver el inicio con los tiburones terrestres.
La primera parte, los 4 números que dan inicio a la serie, están dibujados por Stefano Caselli, un autor que trabajó bastante en Marvel, con series como Guerreros Secretos o Spiderman de Dan Slott, pero que ha estado bastante ligado a los Vengadores, tanto en su serie principal, en la época de Jonathan Hickman, como en las secundarias como Vengadores Iniciativa o Vengadores Mundiales, además ya tuvo contacto con Kate Bishop en la miniserie que cruzaba a los Jóvenes Vengadores con los Runaways en el evento Civil War. Caselli hace un buen trabajo, es buen narrador, maneja muy bien el ritmo de las historias y es muy imaginativo, con personajes como Masacre-Gwen o Quentin Quire hay que serlo.
Cuando digo que esta serie continúa de la de Ojo de Halcón no me refiero a que haya una historia que siga de una a otra, lo que las une es la vida de los personajes, empezamos tal como se dejó aquella colección, solo que Kate Bishop ahora se ha encontrado con un problema más grande y necesita ayuda. Los primeros a los que acude son Clint Barton, que ejerció de mentor y compañero de aventuras, Ms América, con la que forjó una buena amistad en los Jóvenes Vengadores, y Aleación, que viene de la anterior serie, hasta aquí todo lógico, lo extraño son los dos que entran después, Masacre-Gwen y Chico Omega, que, a priori, no pegan mucho en la serie por ser personajes de ámbitos diferentes, pero el predominante humor con el que se enfoca todo, de hecho empiezan con un casting de personajes de todo tipo para formar el grupo, hace que encajen a la perfección. Esto más el primer enemigo, una versión melenas-chulito-de-playa de MODOK, ya hablan por sí mismas.
Hay constantes guiños al pasado de Kate pero también de los Vengadores, el principal la llegada de Tigra, solo que en formato “El ataque de la mujer de los 15 metros”, también la relación con la televisión del cuarto número, de ahí pasamos a un caso de ataques de seres gigantes, que es de mucha mayor magnitud que lo visto en la serie de Ojo de Halcón pero sigue el mismo esquema de investigación y relación entre ellos, la diferencia es que la acción está coordinada entre varios personajes.
El último número del arco es casi un intermedio, la acción ya está acabada pero Thompson sigue trabajando a los personajes, con hincapié en el inicio de relación entre Ramone y América, por desgracia hay un cambio de dibujantes, a peor. Entra Daniele Di Nicuolo, autor poco conocido que actualmente se ocupa de los cómics de los Power Rangers para Boom! Studios y que, sin hacerlo “mal” está muy lejos del nivel de Caselli. Es muy parco en fondos y no tan buen narrador como el anterior, aunque sí tiene ese toque diferente, con algún momento interesante (se le dan bien Quentin y Masacre-Gwen) y acorde con una serie que guarda bastantes diferencias con las del resto del universo Marvel del momento.
El último número de “La mejor costa” continúa directamente en “Ciudad de malvados”, el segundo y último arco. Sinceramente no entiendo muy bien, deberían haber puesto un nombre a cada capítulo ya que la acción es toda seguida, no hay un parón entre arco y arco, parecen el mismo, por lo que no se a qué viene ponerles distintos títulos. Tampoco pasa nada porque toda la serie fuese un solo arco, al final casi lo es si lo miramos desde el punto de vista de que el interés de la guionista es la vida de los personajes, los villanos son más la disculpa para las peleas que la historia en sí. No dejan de ser solo nombres, no importa cuáles pongas o donde partas, pero creo que se entiende mejor esta serie como una historia que como varias. Eso sí, a nivel de villanos esta parte es mucho más interesante que la anterior, con Satana, el regreso de MODOK, Anguila y la más clásica villana de Kate, Madame Máscara, a lo que hay que añadir la aparición de la madre de Kate, es decir, con más secundarios interesantes, como decía al principio e insisto, está serie es la continuación de la de Ojo de Halcón, ¿parece poco para demostrarlo?, pues nada, a mitad de la historia aparece su ex, Marvel Boy. Tensión a la vista.
Tras tres números, cuando ya había pillado mejor el ritmo, Di Nicuolo se va y lo sustituye Gang Hyuk Lim, en este caso el cambio es a mejor, el autor de series como Nuevos Agentes de Atlas, Iron Man o Darkhawk, por lo menos para mi, destaca más cuando dibuja personajes jóvenes, no es un gran dibujante pero queda muy bien y cumple en los dos números que hace, porque sí, aun habrá un cambio más, Moy R. se encarga del número final de la serie, dando un estilo intermedio entre los dos anteriores. Sí, lo peor de la serie es todo este movimiento de dibujantes que cambian a mitad de la historia, si bien marcan un tono similar, la diferencia cualitativa existe, sobretodo con el primero, Caselli, que destaca mucho sobre el resto.
En ese último número todo pasa muy apresurado, hay vampiros, la madre de Kate toma fuerza pero se queda algo corta su trama, Ramone ahora tiene poderes, que se veía venir, se pone el nombre de Amalgama y cuenta en pocas páginas su origen y el de su hermano, se habla de atracción entre Noh-Varr y Aleación, dejando una conversación final que hace un guiño al segundo volumen de los Jóvenes Vengadores,, mucho que contar en muy pocas páginas, dejando cosas en el aire como la posible venganza de los villanos, pero es que la cancelación le llegó rápido. Se ve que Thompson tenía cuerda para rato, por desgracia este tipo de series duran lo que duran, son demasiado atrevidas para el mercado actual al salirse del canon superheroico del momento. Una pena porque es una serie que, a pesar del problema de dibujantes, se disfrutaba mucho.
El grupo sí que sigue existiendo, aparecieron en la serie de Spiderman Superior, en un team-up con este para el evento La guerra de los reinos, pero sin Kate Bishop, ella estaba ocupada co-protagonizando otra de las mejores miniseries de Marvel de ese año, Viaje al misterio, que narraba otra parte del mismo evento. Así que aun sigue existiendo la posibilidad de que veamos más aventuras de este especial grupo.
Buen resumen. La autora me gusta mucho, aunque esta no es su mejor serie ni de lejos; tiene buenas ideas y algún buen momento, ya sea cómico o tierno, pero la cortaron cuando empezaba a coger ritmo y los dibujantes no ayudan. Kelly Thompson me parece de lo mejor y más fresco de la Marvel actual.
Recomiendo su Descorazonada, ya que estamos.