Terror y misterio en la España vaciada.
«Vale. Aquí ocultan algo.»
Cuando su webcómic The Eyes fue nominado a los premios Eisner en la categoría de mejor webcómic
La crisis económica ha provocado que Miguel y Ana, una pareja que está esperando su primer hijo, tengan que abandonar la ciudad para trasladarse a un pequeño y aislado pueblo leonés llamado Villanueva, donde, para combatir la despoblación, están ofreciendo alojamiento gratis a jóvenes parejas que quieran establecerse allí en busca de nuevas oportunidades. Un lugar aparentemente perfecto donde todas las personas son muy amables y acogedoras, pero que esconden un terrible secreto.
Villanueva es una novela gráfica que se puede englobar dentro del subgénero folk horror que tan de actualidad está en los últimos años gracias al revival que se ha producido gracias a películas como Midsommar o The Witch que continúan un subgénero que comenzó en los años setenta con películas inglesas como El hombre de mimbre o La garra de satán. Se trata de historias que se desarrollan en unos aparentemente idílicos entornos rurales, donde la población local suele esconder terroríficos secretos relacionados con tradiciones paganas ancestrales. Esas características canónicas del subgénero también las encontramos en la obra de Javi de Castro que hilvana una historia que se aprovecha muchas de las tradiciones y la mitología de la región leonesa como El Antruejo, un festejo de carnaval que se celebra en varios pueblos del norte de la provincia, además de algunos elementos de otras mitologías cercanas como la asturiana. Quizás la única característica del canon del folk horror que la obra no cumple es que el final es optimista y lleno de esperanza, al contrario que suele suceder en las obras más reconocidas del género.
Villanueva no es una obra de terror al uso, ya que quizás prima más el misterio que el puro terror, pero que tiene la cualidad de conseguir que la tensión que siente el lector vaya en aumento con el paso de las páginas hasta el clímax final. El resultado es que estamos ante un cómic que más que leerse se devora. El autor leonés consigue que nos sintamos tan incomodos y tensos como las protagonistas, gracias a un excelente uso de los silencios, las pausas y la habilidad con la que va desvelando el misterio que encierra el pueblo poco a poco. Esa sensación de tensión no es nada fácil de conseguir en un medio en el que el control del ritmo de la historia no depende exclusivamente del autor, como sí sucede en el cine o la TV.
Como en las buenas obras del género no faltan las escenas de acción, sin embargo, no son las que más miedo provocan, ya que el verdadero terror está instalado en el secreto que esconde el pueblo y en la mentalidad de sus pobladores. Un misterio protegido por una capa de respeto a las tradiciones que enmascara una sociedad rancia, patriarcal, machista y cerrada al progreso que aplasta a quienes intentan construir una identidad propia, como le sucede a Carmen, la bibliotecaria del pueblo y protagonista real de la historia junto a Ana. Como sucede con las grandes historias de cualquier género, debajo de los elementos definitorios del mismo Javi de Castro hace un reflejo del uso que muchas veces se hacen de las tradiciones en la actualidad, que habitualmente son manipuladas desde algunos sectores como dique ante las ideas más progresistas para tratar de evitar que se rompa el injusto sistema reinante. Además, la obra también refleja las relaciones tóxicas, como la que mantienen Miguel y Ana, en la que ella no tiene ningún control sobre su vida, ya que está a expensas de las manipulaciones de Miguel, que la arrastra a una vida que no desea. Carmen y Ana están atrapadas en una situación que las impide vivir en libertad y las obliga a fingir ser personas que en realidad no son.
Para que una obra de misterio funcione bien todos los detalles de la trama tienen que estar muy bien pensados y organizados, además de resultar creíbles y que el autor no caiga en la tentación de hacer trampa al lector escatimándole información o desviando el foco del misterio, algo que, por suerte, no sucede en Villanueva que en todo momento mantiene la cercanía y verosimilitud.
Como ya ha demostrado en sus trabajos previos, Javi de Castro controla todas las posibilidades narrativas que ofrece el lenguaje del cómic. En Villanueva las pone al servicio de la historia haciendo que la lectura sea muy clara y accesible gracias a elementos muy sencillos, pero que funciona muy bien como el uso del color blanco o negro en las calles de las páginas en función de si la escena transcurre durante el día o la noche o las splash-pages dobles en las que nos narra el pasado de Carmen que también sirven como elementos de transición entre las diferentes escenas. Herramientas de lo más eficaz que demuestran un dominio del medio, pero sin caer en la necesidad de hacer alardes estéticos que resten legibilidad a la historia. El estilo del leonés es heredero de la línea clara más tradicional, algo que puede chocar a los lectores de historias de terror que acostumbran a estar dibujadas con un estilo más realista, pero que funciona muy bien en esta ocasión. Como siempre Javi de Castro está impecable haciendo que todo parezca muy sencillo.
Como es norma de la casa Astiberri nos ofrece una edición de calidad a la altura del cómic. Hay que destacar el magnífico trabajo que han realizado con el grabado que hay en la portada, del que Javi de Castro explica el proceso de realización en este hilo de Twitter. La obra ha sido realizada con el apoyo del Instituto Leonés de Cultura.
Villanueva es una muy buena historia de folk horror que te atrapa desde la primera página, pero no es solo eso, ya que nos ofrece una historia en la que tiene cabida una reflexión sobre el uso de las tradiciones como elemento clave para frenar el progreso y sobre las relaciones toxicas. Todo ello elegantemente dibujado y narrado de una manera sencilla y eficaz que aprovecha a la perfección todas las herramientas del medio.
Lo mejor
• Como el misterio y la intriga van subiendo de nivel con el paso de las páginas.
• La narrativa de Javi de Castro es soberbia como es habitual.
• Las dos protagonistas, en particular, Carmen.
Lo peor
• Para los conocedores de este tipo de narraciones quizás pueda resultar algo previsible.
Guión - 8
Dibujo - 8.5
Interés - 8.5
8.3
Horror folk
Javi de Castro construye una historia que va tensionando cada vez más al lector atrapándolo en una trama llena de misterios que le sirve para reflexionar sobre la actualidad, en particular de la situación de la España vaciada y de la vida en esos ambientes cerrados y algo tóxicos.