El año pasado, Norma estrenó Warship Jolly Roger una serie de ciencia ficción que contaba con la participación de nuestro compatriota
Dentro de la ciencia ficción, género amplísimo que da cabida a todo tipo de historias especulativas, la space opera se puede considerar su vertiente más lúdica y focalizada en el entretenimiento más popular. Menos preocupada por aspectos humanísticos o por la precisión de sus especulaciones científicas, la space opera siempre se ha decantado más por la aventura en su estado más puro lo que ha permitido que los esquemas de sus historias estén emparentados con los de otros géneros como el western o el de piratas. Con este último además comparte ciertas similitudes incluso en los espacios comunes por los que transcurren las aventuras siendo fácil intercambiar barcos de vela por naves espaciales y lejanos planetas por exóticas islas en medio del océano. La influencia del género de piratas en la space opera también se deja notar en el dibujo que se hace de algunos personajes como pueda ser Han Solo (de profesión contrabandista) o la tripulación del Firefly (
La historia comienza en un sangriento motín en una prisión ubicada en un planeta remota. Durante la confusión, cuatro presos consiguen escapar en una nave espacial. Al frente de ellos está Jon Tiberius Munro, un antiguo militar condenado por crímenes de guerra y uno de los personajes más temidos de la confederación de planetas. El resto del grupo está formado por un contrabandista con contactos por toda la galaxia, una mecánica espacial y terrorista independentista enemiga de la confederación y un silencioso muchacho acusado de asesinato que siempre va acompañado de un dron letal. A pesar de sus diferencias, los cuatro tendrán que permanecer juntos para seguir libres, lo que les lleva a concebir un arriesgado plan para robar la antigua nave de guerra de Munro, una nave cuyo poder les permitiría mantener su libertad a pesar de la persecución de las fuerzas de la confederación.
Runberg y Montlló nos brindan una historia repleta de acción desde la primera página y dotada de un ritmo excelente que hace avanzar la trama de forma dinámica mezclando momentos trepidantes con otros más tranquilos que permiten conocer mejor el contexto de la historia y el pasado del protagonista. Nos encontramos obviamente ante una historia de presentación en el que los autores se encargan de presentar a los protagonistas y plantear el conflicto que se desarrollará en las próximas entregas (originalmente la historia está previsto que ocupe cuatro álbumes), y el resultado funciona bastante bien en este sentido, dejando al lector con ganas de saber cómo evolucionará la historia en los siguientes capítulos. El problema es que el desarrollo directo que sus responsables hacen de la trama deja poco margen para sorpresas y esta aventura acaba siendo bastante predecible y tópica en algunos aspectos. A pesar de ello, el escenario es lo bastante atractivo y los elementos sin resolver son más que suficientes (el origen del muchacho o el destino de la familia de Munro) como para mantener el interés de los lectores en la siguientes entregas.
El trabajo de
A pesar de no ser una obra innovadora o sorprendente, su factura es más que correcta y el escenario planteado es lo bastante atractivo como dar un voto de confianza a sus autores y esperar que lo que hagan en las siguientes entregas amplíe y supere a lo mostrado en este primer capítulo.