Wonder Woman #02 (Renacimiento)

 

Edición original: Wonder Woman núms. 4-7 USA.
Edición nacional/ España: ECC Ediciones.
Guión: Greg Rucka.
Dibujo: Nicola Scott, Liam Sharp.
Entintado: Nicola Scott, Liam Sharp.
Color: Romulo Fajardo, Jr., Laura Martin.
Formato: Rústica, 96 páginas.
Precio: 8,50 €

 

¡Amazonas, he aquí el regalo que le hacemos al mundo! ¡Nuestra campeona!

Tras analizar el debut de la princesa amazona en Renacimiento, seguimos una vez más con la excelente etapa de Greg Rucka al frente de Wonder Woman, y quien por desgracia para nosotros los fans ya ha anunciado su despedida de la colección. Una pena, porque está demostrando un gran nivel, convirtiendo ahora mismo y sin lugar a dudas a Wonder Woman en una de las mejores colecciones de Rebirth.

En este segundo tomo editado por ECC Ediciones, continuaremos con cuatro números más de estas dos interesantes historias escritas por Rucka, Año Uno y Las mentiras. Es de agradecer que ECC nos edite los números de forma que los dos correspondientes a cada historia están seguidos, es decir, que el número 4 y el 6, que pertenecen a Año Uno se encuentran uno a continuación del otro, mientras que el 5 y el 7, correspondientes a Las mentiras van después. Algunos lo podrán considerar criticable por no respetar el orden original de la edición de DC Comics, pero yo personalmente lo considero un gran acierto de la editorial española para no confundir a los lectores y facilitarle la lectura, y más aún en un formato en tomo, como es el caso, porque en grapa ya sería otra historia y sí se podría publicar tal cual hizo DC.

En Año Uno continuamos la historia donde la dejamos, con el rescate de Steve Trevor y el posterior viaje de vuelta a su mundo, con su amiga amazona, elegida campeona por la reina Hipólita y por su pueblo tras unos juegos, como no podía ser de otra manera en la sociedad de las amazonas, quedando como campeona evidentemente nuestra querida Wonder Woman. Tras esto, aparece en escena Barbara Ann Minerva, y comenzaremos a entender la importancia de esta trama del pasado para comprender la relación entre estos tres personajes, o mejor dicho, la relación de Diana con Barbara y con Steve, tratando así de trazar el necesario vínculo que justifica esta trama con la del presente.

Y en Las mentiras, que se desarrolla en la actualidad, veremos la conclusión de la trama del caudillo Cadulo y su enfermiza secta religiosa que venera a Uzkartaga, el responsable de la maldición de Cheetah. Una trama que en principio avanzaba más lenta, pero que aquí da un buen salto, especialmente por lo que ocurre en el número 7, y que tendrá consecuencias importantes para el futuro. De fondo tenemos también otra misteriosa trama con Sasha Bordeaux como protagonista, personaje creado por el propio Rucka en Detective Comics, que estuvo vinculada a Batman ejerciendo de su guardaespaldas y luego a Checkmate por un tiempo, y que el guionista recupera ahora para esta colección, en la que es la superior de Etta Candy. Un personaje que puede dar mucho que hablar en lo siguientes números, por lo que veremos cómo se desarrolla la historia.

Con respecto al apartado artístico, tenemos a Nicola Scott en dibujo y tinta y a Rómulo Fajardo Jr. al color en el arco de Año Uno, y a Liam Sharp en dibujo y tinta y Laura Martin en el color en el arco de Las mentiras. Nicola Scott realiza un trabajo espectacular en el dibujo perceptible en prácticamente todo, los fondos, los diseños de las amazonas, de su vestuario, Themyscira, personajes no humanos como animales, escenas de acción, etcétera. Es sin duda la estrella a nivel artístico de la etapa de Rucka, o al menos así lo considero yo personalmente.

Y por otro lado tenemos a Sharp, con un estilo muy diferente al de Scott, en el que nos encontramos un ambiente mucho más oscuro, con un gran uso de la tinta, de hecho al abrir el tomo nuestro olfato nos avisará de ello, y con unos diseños de personajes bastante buenos, especialmente en el caso de Cheetah, más violenta y animal que nunca. Es cierto que algunos diseños faciales de Wonder Woman no me convencen del todo en ocasiones, pero en general el dibujo de Sharp es bastante bueno y conjuga a la perfección con la historia, así como el de Scott es perfecto para Año Uno, al ser una historia más positiva y colorida, al menos de momento. Y por cierto, al final del tomo están incluidas dos de las polémicas portadas alternativas de Frank Cho.