Wonder Woman: La verdadera amazona

 

Edición original: Wonder Woman: The True Amazon USA
Edición nacional/ España: ECC Ediciones
Guión: Jill Thompson
Dibujo: Jill Thompson
Entintado: Jill Thompson
Color: Jill Thompson
Formato: Cartoné, 136 páginas
Precio: 15,95 €

 

«Tú eres la verdadera amazona. Rezaré por por poder ser digna de ese título algún día»

Hace muy poco, en el Salón del cómic de Barcelona, Jill Thompson nos contaba en una entrevista que Wonder Woman es un personaje que le aburre porque es demasiado perfecta, que no tiene una kryptonita como Superman, no tiene debilidades. Es por ello que, la idea de Thompson es mostrar lo contrario, es decir, cómo Wonder Woman tiene errores y defectos como todos los demás. Y básicamente, este es el tema de la obra recientemente editada por ECC Ediciones que vamos a reseñar hoy, Wonder Woman: La verdadera amazona, de cómo incluso la mejor entre las amazonas, puede ser la más imperfecta de todas.

Es difícil ya de primeras, enfrentarse como lector a una obra de origen de Wonder Woman, puesto que es un tema que se ha abordado cientos de veces desde diferentes perspectivas y ángulos. Muchos autores han aportado su granito de arena al origen de Diana Prince, hasta el punto de que no está nada claro cuál es su verdadero origen, tema que se está tratando precisamente en la actual colección de Greg Rucka. Pero si ya es complicado como lector, imaginaos como autor, el tener que afrontar una historia sobre un tema tan manido en el personaje, de tal forma que resulte algo original y diferente, pero que por supuesto no trastoque demasiado el personaje, y por supuesto, además de eso tiene que ser una obra divertida, entretenida y/o emotiva. Pues os puedo asegurar que Thompson, desde mi humilde punto de vista, lo ha conseguido con esta obra, proeza digna de una amazona, dicho sea de paso.

Wonder Woman: La verdadera amazona nos muestra el origen, una vez más, de Wonder Woman, a través de su nacimiento en la arena, pero con un ligero toque diferente esta vez. Nada del Zeus de Azzarello esta vez, aunque existe un cierto guiño en un momento determinado. Pero antes de todo eso, y de forma bastante original, Thompson nos cuenta el origen de las amazonas y de cómo llegaron hasta Themyscira, lideradas por su reina Hipólita, quien a pesar de todo, se muestra entristecida ante la falta de lo que más desea, un hijo. Tras ver su deseo cumplido por los dioses, Themyscira entera se vuelca con Diana, la bella e inteligente niña que va creciendo y convirtiéndose en una niña mimada, malcriada, altiva y egocéntrica. Pero es que parece ser que Diana es perfecta. No solo es la más inteligente y bella, sino que también la más fuerte, veloz, ágil… por lo que todas las amazonas le adoran. Hasta que nuestra querida Diana se da de bruces con una cura de humildad. Este es el argumento, sin querer destripar mucho más, de esta fantástica historia.

Thompson trata en esta obra temas como el orgullo, la superación, la perfección y la imperfección, o el amor, entre otras, de forma muy natural, especialmente este último, que es representado de manera muy sutil pero a la vez muy clara, y que es el verdadero motor de la historia y la lección que Diana aprende para darse cuenta de que, en realidad, es tan imperfecta como el resto. Una lástima que este tipo de cosas, la del amor y sexualidad de Diana, que el propio Rucka también está trabajando en su etapa actual con el personaje, no se aborden desde una perspectiva más directa, sin tapujos ni prejuicios, pero parece ser que aún tenemos que esperar para que DC se atreva a dar el paso.

Pero en definitiva, Thompson nos saca el lado más humano del personaje, el más imperfecto, las miserias más grandes del personaje de William Moulton Marston, y lo deconstruye a través de una historia de origen que, paradójicamente, servirá de elemento fundamental para el desarrollo de la Wonder Woman que hoy en día conocemos. Y eso es, como os decía al principio, lo que hace a esta historia tan diferente de otras con el mismo contexto.

El apartado artístico también corre a cargo de la propia Thompson, quien se lo guisa y se lo come por completo en esta obra. Como siempre, a un nivel excelso, y específicamente muy bien amoldado al tono de historia griega clásica que tiene la obra, y que es uno de sus aspectos más característicos. El de Thompson no es quizás el estilo más mainstream del momento, es decir, no es lo que más se estila actualmente en los cómics de superhéroes, pero sin duda la artista demuestra que tiene experiencia con el personaje, y sabe cómo representarlo a la perfección, muy especialmente a la hora de ilustrar todas las emociones que deben transmitir sus personajes, algo que puede verse también en los bocetos incluidos como páginas extras al final del tomo. Otro aspecto muy destacable es el color, también obra de Thompson, que utiliza un estilo de acuarelas verdaderamente bello que, una vez más, encaja a la perfección con el tono de la historia. Y para muestra, un botón, os dejo con una galería de algunas de las viñetas y páginas que podréis disfrutar en esta muy recomendable obra.

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