Wonder Woman: Su lucha y su importancia feminista

Reflexionamos sobre Wonder Woman y su importancia como símbolo feminista del cómic de superhéroes a lo largo de su historia.

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La historia de la mujer maravilla es larga, con más de 75 años a sus espaldas, particular, variada y con altibajos. Wonder Woman nunca ha sido uno de los personajes más rentables de la editorial americana en la que la vimos nacer, DC Comics, y sin embargo, se ha mantenido siempre como uno de los iconos de la editorial y un personaje de importancia crucial, hasta el punto de ser uno de los miembros de la santa Trinidad de DC, junto a sus compañeros Superman y Batman. Pero, ¿qué es lo que hace que un personaje que no produce tantos beneficios económicos para lo que no olvidemos es una empresa, con todo lo que eso conlleva, mantenga sin embargo esa importancia en la editorial? Es una pregunta que plantea un debate muy extenso que daría para muchos artículos de gran longitud y sesudas reflexiones, pero que para mí tiene una respuesta muy cara y concisa: por su importancia simbólica. Esto es, Wonder Woman tiene una importancia social desde su origen que en DC Comics han tenido en cuenta como un valor social y moral positivo para ellos, que evidentemente además transmite una imagen corporativa. Hablamos de la primera superheroína de la historia que tiene una colección propia, protagonizada por ella misma, que se convierte en un icono pop de éxito y que además transmitía unos valores insólitos en ese tiempo, que incluso hoy en día siguen escandalizando a muchos vetustos y anquilosados individuos.

Con este artículo pretendo precisamente destacar por qué Wonder Woman es tan importante en el cómic de superhéroes, y compartir mis reflexiones con vosotros con respecto a esta cuestión. Y no, no es un artículo en el que vaya a repasar su trayectoria editorial, sus múltiples autores, etapas, historias importantes, etcétera. Para eso vendrán artículos posteriores de otros compañeros. Aquí vengo a poner de manifiesto los valores de un personaje increíble y único en 76 años de historia, y que, por unos motivos o por otros, ha pasado por momentos que no le hacían justicia al personaje, y que han sido criticados posteriormente.

Wonder Woman nace en 1941 de la mano de William Moulton Marston, un psicólogo estadounidense al que una prototípica DC Comics le encomienda la tarea de crear un personaje diferente mediante el cual atraer diferentes lectores. Para entender a la criatura hay que entender al padre, al creador. Marston fue un psicólogo brillante, que muchos califican de adelantado a su tiempo por sus ideas, y que, entre otras cosas, y esto está en debate histórico, se le considera parte más o menos importante de la creación de la famosa máquina de la verdad o polígrafo. Marston consideraba la verdad como uno de los valores más fundamentales en el ser humano, y de ahí se comprende la importancia que tendrá en la mujer maravilla, como uno de sus poderes principales a través de su mágico lazo, el de revelar la verdad a cualquier al que ate con el. Además de esto, Marston era un conocido feminista, emparejado en una relación poliamorosa con dos mujeres también feministas que evidentemente tuvieron su influencia en el personaje: Elizabeth Holloway y Olive Byrne, ésta última además sobrina de la famosa activista por los derechos de las mujeres con respecto al control de la natalidad Margaret Sanger. Marston consideraba que el cómic era un medio ideal no solo para entretener sino también para educar, principalmente a los niños, que eran los consumidores principales. Era sin duda una buena manera de educar a una generación unos valores de comprensión, respeto e igualdad de género que a Marston le resultaba tremendamente atractiva, máxime en un medio tan masculino y con tanta testosterona como era el cómic en esos momentos. Esto llego a oídos de Max Gaines, fundador y editor de All-American Comics, (editorial que también vio nacer a otros personajes importantes del universo DC, como Green Lantern, Flash o Hawkman), quien se pone en contacto con Marston para crear el personaje que hoy en día conocemos. Así, en octubre de 1941, Wonder Woman hace su debut en All-Star Comics #8, con Marston como guionista y Harry G. Peter a los lápices. Y entonces empieza a construirse el mito que es hoy en día.

Lección de feminismo

Desde el principio, la mujer maravilla fue un personaje que transmitía unos valores diferentes a otros superhéroes. Para empezar, era una amazona, con todo el valor simbólico que esos personajes mitológicos conllevaba. Las amazonas eran un pueblo griego habitado y gobernado de forma íntegra solo por mujeres guerreras. Y esto era Wonder Woman, una mujer guerrera que, por aquel entonces, no conocía al hombre. El simple hecho de recoger en brazos a un hombre, Steve Trevor, cuando aterriza en Themyscira, para después salvarle, era toda una declaración de intenciones. Todas o casi todas las apariciones de Wonder Woman llevaban consigo una enseñanza moral, casi siempre de corte feminista, con grandes cuadros de texto y largos diálogos. Wonder Woman enseñaba a las niñas de entonces que dependieran de sí mismas y no de sus maridos o de los hombres de su entorno, para construir su vida y su futuro. Wonder Woman ponía por delante sus objetivos personales, como es la lucha por la verdad, el bien y la justicia, antes que el matrimonio, tener hijos y otras tantos aspectos que se consideraban elementales y primarios para las mujeres por aquel entonces. Pero no solo promulgaba valores feministas, sino también de respeto a personas más allá de su etnia o religión.

Más lecciones de feminismo
Los valores de la mujer maravilla

La dominación y la sumisión, puntos importantes en Marston y en el personaje, han sido motivos de crítica especialmente hacia el autor, cuyos fetichismos relacionados con el mundo BDSM eran evidentes, y no solo por lo bondage del lazo del personaje, sino por las continuas situaciones en las que Wonder Woman era atada y amarrada. Esto plantearía otro sesudo debate en el que no me voy a meter, pero sencillamente me parece contradictorio que Marston considerase que su personaje debía de ser sumiso a la sociedad patriarcal en general cuando precisamente su valor más significativo era la rebeldía contra lo establecido y la lucha por la igualdad, la verdad y la libertad. Es más, la imagen más simbólica del personaje es la de la princesa amazona rompiendo unas cadenas en las que estaba atada, y que evidentemente no suponían mucho esfuerzo para ella quebrar. Puede que Marston nos quisiera representar constantemente cómo el personaje era capaz de transgredir y romper incansablemente las ataduras de la sociedad, a pesar de ser constantemente sometida a ello. Pero insisto, es harina de otro costal.

El evidente fetichismo de Marston

No sabemos si fue por el disgusto de ver a Wonder Woman humillada y defenestrada como secretaria en la JSA en plena Segunda Guerra Mundial mientras sus compañeros masculinos fueron a luchar, pero Marston falleció seis años después de la creación de su querido personaje. Y desde entonces, ya nada volvió a ser lo mismo. Atrás quedaron esas historias con constantes y pedagógicas soflamas feministas, y esos relatos breves de Wonder Woman reuniéndose con personajes históricos importantes en la historia del sufragismo feminista. El fatídico Comics Code, uno de los ejemplos más claros de censura cultural en la que decían entonces era la mejor democracia del mundo, EEUU, fue definitivo para enterrar un personaje que, aunque seguía publicándose, desde luego estaba muy lejos de lo que fue en su origen.

Relegada a secretaria

Otra lección de feminismo

Tenemos que viajar directamente a los años 70, coincidiendo con la segunda ola feminista, algo que no es casualidad, para poder ver una revitalización del personaje, gracias a Gloria Steinem, que eligió a Wonder Woman como protagonista de la primera portada de la histórica revista feminista Ms. Así, el personaje recuperó lo que había perdido con esa mítica “Wonder Woman for president” de la portada del primer número en 1972. En esta época tuvo lugar la polémica etapa de Dennis O’Neil en el personaje, al que arrebató todos sus poderes para convertirla en una mujer más mundana y mediante la cual, quizás quería transmitirnos que aún sin sus poderes podía seguir luchando contra la injusticia. Es posible que O’Neil, en su afán por hacer siempre algo diferente en los superhéroes, de esta forma quisiera acercar el personaje a las mujeres de a pie, pero el resultado de todas formas fue poco exitoso, tanto a nivel de ventas como en calidad, aunque esto es según a quién le preguntes, evidentemente.

La primera portada de la mítica revista feminista Ms.

Es entonces cuando ocurre algo crucial en la historia del personaje, la creación y emisión de la mítica serie de televisión. Así pues, en 1975 se estrenó en ABC el primer episodio de los 60 que duró hasta su cancelación en 1979, protagonizada por una carismática Lynda Carter que marcó a toda una generación. La serie, si bien es tontorrona, infantil e incluso ridícula, y no precisamente muy feminista debido a la cosificación del personaje, entre otras cosas, fue un éxito y es hoy considerada una serie de culto. Sí, una vez más Wonder Woman fue pionera con la primera serie de televisión centrada y protagonizada por una superheroína y que además sirvió para revitalizar y popularizar a un personaje que pese a todo lo que había sufrido, ya era mítico. Y esto es lo importante del personaje, el luchar siempre contra la adversidad (y nazis) y dar ejemplo de unos valores concretos, incluso cuando no los busca directamente. La Wonder Woman de Lynda fue, a pesar de lo que puedan decir, un símbolo feminista, por la representación pionera, una vez más, de las mujeres en un género coto exclusivo de los hombres. Y eso es lo que realmente trasciende de la serie de TV, más allá de la humillación machista a la que se vio sometida por la época, y que el personaje ha sabido superar, al marcar a toda una generación, y dar a conocer un personaje mítico.

Lynda Carter, la Wonder Woman de los 70

Después de esto, vendría la épica etapa de George Pérez, para muchos la mejor del personaje, y que vendría a definir al mismo desde entonces. Esto quiere decir que, pese a la etapa oscura del personaje, tanto en valores como en calidad argumental, éste volvía a recuperar ambas cosas, especialmente lo último. Wonder Woman nunca perdió sus valores, otra cosa bien diferente es que pasara de convertirse en un personaje que era prácticamente una sufragista, a un superhéroe más mainstream, gracias nuevamente a la serie de TV, con historias épicas repletas de acción, y por supuesto mitológicas, que caracterizan el género en el primer caso y el personaje en el segundo.

Antes hablábamos de cosificación e hipersexualización, un hueso duro y una de las críticas más importantes que se le hace al personaje para contrarrestar su importancia como símbolo feminista, y de hecho fue el argumento que se erigió en una petición que finalmente fue aceptada para impedir que se la considerara embajadora de Naciones Unidas por los derechos de las mujeres. Sí, Wonder Woman ha estado cosificada prácticamente desde el principio, y fue in crescendo, especialmente a partir de la Silver Age, algo que puede observarse simplemente fijándose en la evolución de sus uniformes, para lo que os encomiendo a leer el fantástico artículo que realizó mi compañero Gustavo Higuero al respecto. Diana Prince no escapó a la hipersexualización de los 90, con esas formas imposibles de Mike Deodato Jr. y compañía, dibujantes de la princesa amazona en aquella fatídica década, al menos en algunas cosas. Desde entonces, a la pobre Diana no le queda mucha más pierna que enseñar, y ya agotado todas las poses de culo y morritos que ha podido hacer, algo de lo que sus compañeros masculinos se han librado históricamente. Pero que haya sido fruto de una sublimación y humillación machista a nivel sexual no tira por tierra todo lo que significa el personaje y todo por lo que ha luchado y trabajado en su historia desde Marston. Wonder Woman trasciende todo eso, ya que el personaje representa unos valores que, a pesar de todo lo que ha sufrido, ha sabido transmitir a lo largo de su historia, de una manera u otra, y es será recordada para siempre como un símbolo contra la opresión patriarcal y un ejemplo, sobre todo, de empoderamiento femenino.

Cosificación e hipersexualización, otro de los puntos negros en la historia del personaje

Como decíamos al principio, Wonder Woman siempre tuvo importancia y presencia en el universo DC, tanto en eventos cruciales, como en colecciones propias, a pesar de que la calidad y sobre todo las ventas no hayan acompañado al personaje de forma más continuada como sí lo ha hecho a sus otros compañeros, especialmente de la Trinidad. Ya sea desprovista de poderes y trabajando como diseñadora de moda, de embajadora de paz de Themyscira en la Tierra, como diosa de la guerra, con sus orígenes reescritos cada dos por tres, con poderes que van y otros que vienen, Wonder Woman siempre ha sido poderosa y constante en su lucha. Podemos decir de hecho, que es más poderosa que su compañero, amigo y a veces amante Superman, que es el mito del superhéroe por excelencia. Wonder Woman ha ido ganando fuerza, literalmente con los años, siendo al principio más o menos una mujer muy bien entrenada, como amazona que es, hasta convertirse hoy en día, y especialmente en los últimos años, tras las etapas de Phil Jiménez, Greg Rucka, Gail Simone y Brian Azzarello, en una diosa literalmente, algo más allá incluso de una superheroína. Hemos visto en algunas escenas, como en los Nuevos 52, que Wonder Woman podía ser no solo tan fuerte como Superman, sino incluso más, algo absolutamente impensable décadas atrás. Porque, y esto es algo que el paranoico de Batman se pregunta, a Superman se le puede parar con kryptonita, pero a Wonder Woman, cuya única debilidad conocida, que es la de juntar sus brazaletes para reducirla, desapareció tiempo atrás, ¿Cómo consigues pararla entonces? Y si tenemos en cuenta que es una mujer entrenada en artes de la guerra, su poder y peligrosidad según la perspectiva del hombre murciélago, se dispara. Porque al fin y al cabo, Superman es un granjero al que un par de balas, bombas o gas de kryptonita reblandecen hasta el punto de poder matarlo (y si no que se lo pregunten a Ben Affleck), pero la princesa amazona es una diosa guerrera sin debilidades conocidas, al menos a nivel físico. Por lo que sí, amigos lectores, estamos ante la superheroína, y hablo en genérico, incluyendo ambos sexos, más poderosa del universo DC actualmente. Ahí queda eso.

Acerquémonos a la actualidad, de la que el personaje está precisamente, bien presente ahora mismo, con el motivo del estreno de su propia película. Pero también ha sido de actualidad por una, por supuesto y como no podía ser de otra manera para algunos, polémica noticia, y es la salida del armario como bisexual del personaje a manos de Greg Rucka,que en su primera etapa ya nos dejó intuir algo con la relación de Diana con Io, y que ahora lo hace explícito, aunque siempre se haya insinuado, o más bien comentado y rumoreado entre el fandom. Porque es que es obvio, diantres, hablamos de una persona que se ha criado entre mujeres y que no ha visto un varón en su vida, ¿Cómo diablos va a ser hetero? Se comprende que tras ver al guaperas de Steve Trevor le empiecen a interesar los hombres, pero hasta entonces se ha desarrollado y crecido entre mujeres, por lo que, además de su físico y su personalidad, su sexualidad se ha desarrollado en coherencia a la sociedad en la que ha vivido, como le habría pasado a Trevor o al machote y mujeriego de Bruce Wayne que… en fin, la sexualidad de Batman daría para otro largo debate. El caso es que ahora mismo, Wonder Woman se ha librado de otra de las ataduras que históricamente le habían puesto, convirtiéndose así no solo en un símbolo de lo que ya era, es decir, de la lucha feminista y de la equidad de género, si no también del colectivo LGBT en el cómic, cuyos personajes siguen siendo en su inmensa mayoría por desgracia heterosexuales y sobre todo, que es de verdad lo más sangrante, heteronormativos.

Volviendo al cine, es necesario hablar entonces de Gal Gadot, la actriz que da vida a la Wonder Woman actual del Universo Cinematográfico de DC Comics, y cuya película centrada y protagonizada por ella misma se estrenó hace tres semanas en los cines de casi todo el mundo, y que se estrena hoy mismo en España. Lo que ha conseguido Gadot es impresionante, ya que es de los pocos aspectos en que la mayoría de las personas están de acuerdo, críticos o no, que es de lo mejor de la película Batman V Superman, en donde el personaje tuvo su debut cinematográfico, lo cual, teniendo en cuenta los ríos de tinta que han corrido con la polémica que provocó este filme, y que incluso sigue hoy en día, es algo sencillamente increíble. Y yendo más allá, no solo es el personaje que posiblemente caiga mejor entre el público y crítica general, sino que su película se ha convertido en la único del Universo Cinematográfico DC que no ha sido vapuleada hasta le extenuación en la crítica y en las redes sociales, sino que todo lo contrario, está teniendo unas críticas excelentes, lo que le augura un futuro cinematográfico al personaje y a la actriz muy halagüeño, que no hará sino engrandecer el mito y la leyenda de Wonder Woman. Y, según las críticas, porque yo personalmente aún no la he podido ver, no es la película más feminista del mundo, pero, una vez más, es pionera en ser la primera película de una superheroína que se ha tomado en serio a la hora de hacerla, y que ha resultado, por lo que parece, en un éxito comercial y en calidad, no como las aberraciones de Catwoman o Elektra, que en realidad, técnicamente tampoco son superheroínas.

Gal Gadot, la actriz que da vida actualmente a Wonder Woman

Hemos podido ver tras esta reflexión en donde aquí mismo voy lanzar mi soflama final, como haría Diana en una historia de Marston, que Wonder Woman ha sufrido humillaciones, tanto en medios audiovisuales como en su propio medio, en el cómic, en donde lo podemos ver como comentábamos anteriormente en la evolución de sus uniformes, algo que los Finch quisieron revertir de forma clara y explícita con un uniforme equiparable de verdad al de sus compañeros masculinos, y que por desgracia fue efímero, y por supuesto polémico, y no caló entre los lectores y aficionados. Pero a pesar de todo ello, Diana supo reponerse, reinventarse como superheroína, perdiendo un poco de su fuerza discursiva inicial en pos de convertirse en un superhéroe más mainstream, pero manteniendo sus valores y su lucha, dando ejemplo de forma constante. Porque, entre otras cosas, fue durante muchos años y es en realidad todavía como tal la única superhéroina en un grupo de hombres, como la JSA y posteriormente la JLA, siendo una magnífica metáfora de lo que significa el personaje, una amazona guerrera en un mundo heteropatriarcal que lucha explícitamente por la justicia, la libertad, la verdad y la igualdad, por el respeto hacia todos, independientemente de su religión, género, etnia y sexualidad. Por todo ello, considero personalmente a Wonder Woman el personaje más poderoso del universo DC, pero no solo a nivel físico como teorizaba antes, sino sobre todo a nivel simbólico, cultural y social, lo cual es mucho más importante.

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ultron_ilimitado
ultron_ilimitado
Lector
23 junio, 2017 10:51

¿Wonder Woman más poderosa que Superman? Ni de coña. Es más, posiblemente también tenga por delante al Detective Marciano (que incluso podría ser argumentable que fuera más poderoso que Superman). Y en cuanto a que no tiene debilidades físicas conocidas… ¿qué tal las balas comunes y corrientes? Nunca entendí cómo es posible que los guionistas fueran aumentando progresivamente sus poderes y nunca se les ocurriera eliminar su vulnerabilidad a las armas convencionales, que no tiene ningún sentido en un personaje que puede soportar guantazos al nivel de Superman.

Reverend Dust
Lector
En respuesta a  ultron_ilimitado
23 junio, 2017 11:16

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Rasputin33
Rasputin33
Lector
En respuesta a  Reverend Dust
23 junio, 2017 11:43

¿Por qué no dejas de perseguir a determinados comentaristas con tus sofismas incendiarios y prepotentes?

earbudds
earbudds
Lector
En respuesta a  Rasputin33
23 junio, 2017 13:03

No te extrañes, es lo que acostumbra a hacer en este y otros foros de internet.

Moderación ZN
En respuesta a  Reverend Dust
23 junio, 2017 12:23

Evitemos los ataques personales que no aportan nada, por favor. La entrada se acaba de publicar, no desviemos ya el tema a las primeras de cambio. Gracias.

Un saludo

Reverend Dust
Lector
En respuesta a  Moderación ZN
23 junio, 2017 14:13

Contrariamente a lo que los amigos de más arriba han decidido inferir, no cabe interpretación de ataque personal en mi mensaje, señora Moderación ZN, sino precisamente reflejar que es Ultrón y no yo quien ha desviado el tema, siendo que pasa por encima totalmente del objetivo y los análisis del artículo para continuar su cruzada personal contra los «niveles de poder» de los héroes (véanse sus incisivas aportaciones a la reseña de La Visión, donde el tebeo se tornaba fallido porque ¿cómo va Visión a poder con los Vengadores?).

Pero vamos, que no deja de ser bonito que me responda, señora Moderación ZN, a mí y no a los entrañables caballeros que califican los memes de «sofisma incendiario» (comprendo que para su nivel puedan serlo) aprovechando para colar ahí un «prepotente» (que bien puedo serlo, pero señalarlo constituye un «ataque personal» más directo que un meme inofensivo). Del otro señor que me visualiza como un cazador sin vida acechando foros (como si tuviera tiempo) ya otro día, que hace muy bien poniéndose ese nick, para oírse sólo a sí mismo a través de sus «ear buds».

LA CUESTIÓN
El artículo es un repaso a la trayectoria de Wonder Woman como mujer, que puede ser más o menos acertado en según qué puntos, pero que al menos plantea una reflexión/debate sobre la esencia icónica del personaje. Si hablar de si el personaje «le puede» a Superman, como si estuviéramos en el patio del colegio con los muñequitos, no es desviar el tema, aquí paz y después gloria.

Moderación ZN
En respuesta a  Reverend Dust
23 junio, 2017 14:43

Hemos llamado la atención en general a los últimos comentarios (y aprovechamos también para hacerlo ahora a earbudds que no había comentado cuando hemos mandado nuestro aviso), no sólo al tuyo Reverend, sino te habríamos aludido solo a ti.

Por otro lado, intentamos evitar los off-topics pero intentando también dar algo de espacio a los comentaristas. Es nuestra interpretación de las normas y puede ser más o menos errada, y lamentamos si no las compartes, pero lo que no es objeto de interpretación es que el debate derive a cuestiones personales que si no tienen que ver con la entrada y solo hacen que provocar conflictos. Así que, por favor, no sígamos por ese camino y colaborad a evitar estas situaciones. Gracias.

Un saludo

ultron_ilimitado
ultron_ilimitado
Lector
En respuesta a  Reverend Dust
23 junio, 2017 16:06

No veo por qué va a ser desviar ningún tema cuando es el propio artículo el que lo menciona. Por otro lado yo leo cómics de superhéroes ante todo y sobre todo porque me gusta evadirme con aventuras fantásticas de gente que puede hacer cosas increíbles. Eso es lo que yo busco en un tebeo de superhéroes, eso es en lo primero que me fijo y eso es lo que disfruto, y todo lo demás es un extra. Si esa parte de la historia falla, para mí el resto se cae como un castillo de naipes. Soy así de simple, qué le vamos a hacer.

obnose
obnose
Lector
23 junio, 2017 11:11

Muy buen artículo. Desde luego que entre las buenas etapas recientes en los cómics (Azzarello y Rucka, y también el Earth One de Morrison) y la buena impresión de la Wonder Woman de cine el personaje ha ganado mucho peso dentro del imaginario de DC. Estoy de acuerdo con el autor en que ha superado a Superman al disponer del mayor superpoder imaginable, que gracias a Gaiman y su mítico duelo entre Sandman y Choronzon sabemos que es… la esperanza.

Un símbolo muy poderoso y si tienes una hija no puedes estar más contento de que esté avanzando un icono tan positivo.

Garrac
Garrac
Lector
23 junio, 2017 13:16

A ver. A ver. A ver a ver a ver. Hay puntos con los que estoy de acuerdo, pero creo que sería más divertido hablar de lo que más me ha llamado la atención. Voy a intentar hablar del sexismo y me da que la voy a cagar…

Primer punto: Marston no era feminista. Marston creía en la superioridad de las mujeres sobre los hombres, y ese no es el objetivo del femnismo ni mucho menos. Lo cual no quiere decir que no tuviese ideas interesantes, y personajes muy a contra rremora de la época como la fea, gorda y bajita Etta Candy

Segundo: En la creación de Wonder Woman no podemos olvidar a Olive Byrne y Elizabeth Marston. La primera fue la que le dió la energía y físico a Diana, mientras gracias a la segunda, bueno, el personaje es una mujer

Tercero: ¿En serio estáis revindicando el uniforme de los Finch?

Cuarto: Las amazonas de Marston no son primitivas guerreras que van por ahí buscando gresca. Sino sensuales mujeres físicamente mejores que cualquier hombre, que viven en una sociedad utópica y futurística, y pacífica, gobernada por el amor al prójimo

Quinto: Yo ya pienso que el bondage de Marston obedecía a una idea muy curiosa del autor: que el amor exigía un acto de sumisión. Y que por tanto, para él las mujeres eran las criaturas más sumisas de la Tierra. Pero que no le veía nada malo, sino al contrario, estas mujeres debían extender por la Tierra la sumisión al mundo del hombre, para sustituir la violencia y agresividad de estos últimos por la sumisión y el amor. No pocas veces vamos a ver a Steve Trevor cosificado (descojonante la votación a presidente del número 7) y siendo «acosado» para que «se convierta en mujer»

Sexto: Gloria Steinem, antigua fan de la etapa de Marston, en realidad reivindicó a Wonder Woman y la defendió como reacción a la etapa de O’Neil,anterior, que había cambiado demasiado al personaje, y estaba escribiendo en modo cuñao. El propio O’Neil hace poco pidió disculpas y todo

Séptimo: Wonder Woman en los cómics (como siempre el feminismo y los superhéroes a la remora…) en realidad no se convierte en un icono feminista hasta la etapa de George Pérez… que en realidad es una especie de reboot metiendo sentido y más ideas feministas al personaje a partir del origen de Sensation Cómics.

Octavo: El problema no es que un traje sea sexista o no(bueno, un poco también), sino que aparezca el dibujante de turno e insista en lo sexista sin fundamento alguno, ni implicación para la trama, esto lo ha sufrido Dian y lo habrá sufrido casi todo personaje femenino superheroico. Una mujer no tiene por qué estar vistiéndose para un hombre, sino sencillamente para ella misma, y este es un concepto de perogrullo que los inútiles de la ONU han sido incapaces de comprender.

Noveno: A mí no me gusta la Gal Gadot que se alegra de estar en batalla… pero la señora es más maja que el pan, es la priemra sonrisa genuina del DCEU y por eso puedo perdonárselo.

Décimo: Ojo, en la etapa de Marston el lazo no te obligaba a decir la verdad, TE OBLIGABA. Aquel que fuese atado con el lazo estaba obligado a obedecer las órdenes de la mano dominante. Esto en los cómics no lo cambian del todo hasta la etapa de George Pérez.

Undécimo: Para las amazonas no va a existir ni el homosexualismo ni el heterosexualismo: sencillamente el concepto no existe, son relacioens entre amazonas y punto. Que no me parece de todas maneras muy beuna la excusa de que un grupo de mujeres en un mismo lugar durante unos años va a acabar teniendo sexo entre sí por lo ridícula que es (joder, ¿Esto significa que si Martian Manhunter y Superman están encerrados en una celda durante 10 años, van a acabar teniendo sexo entre sí? ¿Los marineros también? ¿Scott Lang?) pero bueno, Rucka ahí tiene un punto, y lo defiende muy bien.

Duodécimo: ¿En serio estáis reivindicando el traje de los Finch? ¿O la etapa en general? ¿En serio?

Decimotercero: Que Wonder Woman sea la única mujer de la JSA y la JLA no es algo de lo que enorgullecerse: tendrían que haber más. Y lo peor es que muchos autores de la segunda se conforman y luego así nos vemos, con muchas mujeres dcitas que nunca han entrado en la Liga (o al menos eso juraría)

Asi que nada, a ver que tal la película, que yo también estoy muy interesado.

BibliotecaZuras
En respuesta a  Garrac
23 junio, 2017 13:50

Te aplaudo y lo digo sin ironía alguna. Me ha encantado tu respuesta punto por punto. Muy bien argumentado cada uno de los puntos.

BibliotecaZuras
Lector
23 junio, 2017 13:54

Cristian muy buen articulo, solo una puntualización. Diana no ha sido la única superheroina en pertenecer a la JSA, a parte de ella, han habido muchas otras en todas y cada una de sus multiples encarnaciones, por ejemplo:

– Hawkgirl
– Canario Negro
– Power Girl
– Huntress
– Miss America
– Star Girl
– Liberty Belle / Jesse Quick (Jesse Chambers)
– Judomaster
– Red Beetle
– Liberty Belle (Libby Lawrence)
– Cyclone
– Lightning
– Anne Fortune
– Red Tornado (Lois LAne)
– Aquawoman

BibliotecaZuras
En respuesta a  Cristian Miguel Sepulveda
23 junio, 2017 20:01

Ops, pues Cristian entonces te pido disculpas, entendí mal tu explicación 🙂

Dreker
Dreker
Lector
En respuesta a  BibliotecaZuras
23 junio, 2017 14:27

Y Zatanna en la JLA. Entre muchas otras.

Daniel Gavilán
23 junio, 2017 15:10

En relación al fantástico artículo de los compañeros y las no menos interesantes contribuciones de Garrac y Zuras, no he podido evitar acordarme a cierto debate en el que participe hace un tiempo, en el que se planteaba porque si bien Marvel tiene a los que son considerados mayoritariamente como los mejores y más reivindicativos personajes femeninos*, ninguno de ellos ha llegado nunca ni acercarse al grado de calado e iconicidad de Wonder Woman.

¿Será por que la creación de Marston y compañía vino en el momento adecuado? ¿Será por su base conceptual? ¿Será que mientras DC se ha centrado únicamente en un puñado de superheroinas permitiendo que estas hayan calado más, mientras que Marvel se ha movido intermitentemente entre tantas que solo han conseguido dejar huella a nivel puntual o dentro de equipos? ¿Será que a personajes como la Avispa o la Viuda Negra aun les falta su propio George Perez? Quien sabe, pero es un tema complejo con el que -teniendo en cuenta el enorme calado de Wonder Woman frente a cualquier otra superheroína- da que pensar

* Con lo dicho arriba no quiero decir que las superheroínas de Marvel sean mejores que las de DC, pero seguro que si hacemos una lista poniendo en un lado las superheroínas Marvel que han vivido grandes momentos de gloria como iconos de empoderamiento femenino, nos salen bastante más que con DC. Y aun así, ninguna de las de Marvel -salvo Patsy Walker y Mayday Parker- han llegado a estar tan afianzadas como iconos heroicos como si lo han estado el quinteto de DC (Wonder Woman, Harley Quinn, Catwoman, Supergirl y Batgirl)

Garrac
Garrac
Lector
En respuesta a  Daniel Gavilán
23 junio, 2017 17:49

¡Gracias a tí y a Zuras! Pues es interesante lo que dices… no te puedo quitar la razón, aunque a modo de meterte el dedo en el ojo DC ha tenido y está teniendo dos series de larga duración como están siendo Bombshells y C Superhero Girls, mientras Marvel apenas ha conseguido que Fuerza V durase un año. Lo malo es que, en DC no parece que trabajen tantas mujeres como en Marvel, solo hay que ver como esta integración no se empezó a ver de veras hasta que llegó Karen Berger a la editorial.

Creo que Wonder Woman ha tenido tanto calado porque llegó en el momento justo: con la edad dorada de la venta del comic-book, fue ya solo en sus primeros años una de las cabeceras más vendidas de la editorial, con al parecer un público femenino bastante amplio que leía las historias coincidiendo con la primera ola del feminismo.

También porque Wondie, pese a su gran altibajo en la Silver Age, ha sido un personaje publicado durante la friolera de 76 AÑOS con solo la cadencia de bimensual en un determinado momento en los 60. O sea, es la mujer que más tiempo ha pasado por el cómic book.

Y hombre, eso me recuerda que a mi vida le falta el Marvel Héroes de la Hulka de Byrne…

Paulo Hernando
23 junio, 2017 15:51

Gracias y felicitaciones por el articulo Cristian. Mas alla de que Marston de para un articulo para el solo , que Diana este cosificada o hipersexualizada, Wonder Woman siempre a sido la superheroina por excelencia. A pesar de malos momentos como ser relegada a secretaria, ha sido el reflejo para las pocas chicas que leian comics.
A mi personalmente me gusta verla dibujada buenorra , con sus curvas prominentes. No se , los heroes hombres tambien estan buenorros. Muy de acuerdo con que una mujer a de vestirse por ella misma , no por el hombre. Pero es que la misma sociedad las lleva a ser de determinada forma. Las marcas de cosmeticos tienen que vender ,y sin problema ,porque tienen en la cabeza que envejecer no mola. Gal Gadot esta demasiado delgada , asi como todas las amazonas que saldran en la pelicula. Todo esta estereotipado por lo que si ,Wonder woman es un icono feminista pero la veracidad del icono ya es otra cuestion ,pues tiene que pasar por el filtro de la sociedad y eso limita bastante las cosas. Con todo siempre es mejor que trasmita los valores que tiene Diana .Me encantan las mujeres y me gusta verlas guapas pero hasta que no dejen de depilarse ,maquillarse ,operarse, no estaran liberadas. Los hombres nos puede lo que nos puede , y las preferiremos depiladas ,operadas ,maquilladas (gustos aparte) en definitiva guapas. Pero cuando ninguna haga nada de esto , nos gustaran igual. Asi que chicas ,boicot a todo, que vamos a girar el cuello igual . Puff mira que no queria meterme porque no tengo una idea clara fornada al respecto pero espero no desbarrar mas de la cuenta. Mañana ire a ver la pelicula , a ver que tal 🙂

David For President
David For President
Lector
23 junio, 2017 15:58

Un personaje creado por tíos, escrito (casi siempre) por tíos. En este caso tenemos un magnífico artículo escrito pot un tío y en el que otros tíos van a dar su opinión con mayor o menor vehemencia.
Mientras tanto, a esas mujeres a las que representa como icono, Wonder Woman se la bufa.

Es un lamento, que conste. Al menos la peli no la dirige un tío y salvamos un poco los papeles.

Eso sí, creo que Harley Quinn (tarada con una dependencia enfermiza hacia su novio malote) es tremendamente popular entre las chavalitas.
Es lo que hay.

(Perdón por la interrupción. Sigan, sigan)

Moderación ZN
En respuesta a  David For President
23 junio, 2017 16:26

David, te pedimos por favor que moderes el lenguaje. Si bien no compartes la opinión del redactor o de los propios lectores, en ZN nos gusta la diversidad de opiniones, pero siempre con neutralidad, respeto y educación. Os lo pedimos a todxs.
Un saludo.

David For President
David For President
Lector
En respuesta a  Moderación ZN
23 junio, 2017 16:46

¿Señalar que Wonder Woman es un símbolo feminista consumido mayoritariamente por hombres es una falta de respeto o educación?
Yo entiendo y hasta comparto que viene bien una Moderación que corte discusiones desagradables, insultos y demás, pero si no hay fuegos que apagar tampoco hace falta ir echando agua por si acaso, ¿eh?

Moderación ZN
En respuesta a  David For President
23 junio, 2017 17:10

David, compartir opiniones es sano, pero utilizar términos como «se la bufa» no es muy adecuado, sobretodo después del debate que está generando este post y la posibilidad tan elevada que hay de que derive en un offtopic.
Solo os pedimos que cuidéis un poco el lenguaje, por lo demás, puedes seguir opinando desde el respeto 🙂
¡Gracias!

Raku
Raku
Lector
En respuesta a  David For President
23 junio, 2017 16:50

No sé cómo será la cosa aquí, pero al menos en EE.UU. lo están flipando todos con Wonder Woman. Y por todos me refiero a todos: hombres y mujeres, adultos y niños. Hasta los niños quieren disfrazarse de Wonder Woman. ¿Qué más quieres?

Jordi Molinari
En respuesta a  David For President
23 junio, 2017 17:13

Me hace mucha gracia tu primer párrafo, cuando en el tercero:

Mujeres: Nos gusta Harley Quinn porque en los últimos años pasó del Joker y se ha convertido en un personaje propio.
Tíos: No no, Harley Quinn debe ser siempre la novia dependiente del Joker, tiene que ser el token de las relaciones abusivas.
Mujeres: Nah, la preferimos cómo referente a que uno puede pasar página de las relaciones tóxicas.
Tíos: Madre mía, estas mujeres quieren ser novias del Joker. No entienden nada. Tenemos que salvarlas de ellas mismas.

Que al igual, que personajes cómo Harley Quinn o Jinx (League of Legends) sean tan populares entre las mujeres, quizás es un mensaje a todos estos caballeros de «blanca armadura» que creéis saber mejor lo que les conviene – tanto en actitudes cómo a iconos a los que seguir – que a ellas mismas.

Saludos 🙂

David For President
David For President
Lector
En respuesta a  Jordi Molinari
23 junio, 2017 22:49

Un poco arriesgado por tu parte, Jordi, querer hablar de parte de las lectoras y sus motivos para conectar con Harley Quinn, para agotar sus tebeos y para convertir a la versión de Margot Robbie en en número uno del top-cosplays.
Aún así, podríamos aceptar barco e incluso debatir sobre ello si no fuese porque tus formas denotan una educación lamentable (estamos guapos para pedir/exigir a los comentaristas que se moderen cuando en la propia página vamos de destroyer por la vida). De todas formas, da igual: si de lo que he dicho extraes que voy de «caballero de brillante armadura», me da que todo lo que vaya más allá del Mortal Kombat te va a venir un poco grande.

Por lo demás, preguntar al personal si conocen a muchas chicas que leyesen regularmente a Wonder Woman antes de que hubiese peli de por medio. Que lo mismo eran legión pero tenían un pacto de silencio, no sé. Que podemos hablar de la edad de Oro, de la serie de Lynda Carter o de discursos estupendos en los foros de CBR, pero la realidad es que es teoría de oidas: tan fácil como preguntar a los libreros quién compra los tebeos de Wonder Woman.

Bah, venga, que da igual.

Daniel Gavilán
En respuesta a  Jordi Molinari
24 junio, 2017 1:59

Hombre, David, teniendo en cuenta que dado a como se ha publicado aquí en España ya era difícil encontrar lectores de DC anteriores a la Crisis de Identidad -de encontrar lectores de Wonder Woman anteriores a Azzarello, fueran del género que fueran ya ni te digo- no tengo claro que aquí estemos en las mejores circunstancias para valorar el tema. Y aun así en mi caso si te puedo decir que conozco a mujeres que leen Wonder Woman. No sabría decir desde hace cuanto, ya que se alguna se está pillando ahora cosas como la Hulka de Byrne o la Wonder Woman de Perez a la par que otras cosas como el Thor de Aaron, pero ya te puedo decir que las lectoras de superhéroes -y de Wonder Woman en particular- son algo más que una entelequia.

Ya en si son más o menos me temo que poco puedo responder, pero sí decir que no olvidemos que en el momento transmedia en el que vivimos no se tiene porque ser lector de comics para ser fan de un superhéroe. Que seguramente no serán pocas las aficionadas que se hayan enganchado a Wonder Woman, Harley Quinn o Supergirl por encarnaciones con más carne y hueso.

David For President
David For President
Lector
En respuesta a  Daniel Gavilán
24 junio, 2017 10:29

Claro que habrán lectoras que siguen a Wonder Woman, al igual que a Harley Quinn, Supergirl, Ms Marvel, Capitana Marvel y otras muchas series. Pero es que a los otros personajes no se les está cargando sobre las espaldas el peso de ser «el personaje más poderoso anivel simbólico, cultural y social».
Si eres un icono femenino y feminista pero ni siquiera eres el personaje femenino de la editorial más popular entre las lectoras…

Que cambiará la cosa con la peli, no digo que no. Pero coño, estamos hablando de los simbolismos de un personaje con setenta y cinco años de historia y es una vulgaridad reducir el discurso a la aceptación de una peli que no debe llevar ni un mes en cartelera.

Daniel Gavilán
En respuesta a  Daniel Gavilán
24 junio, 2017 13:28

Yo es que ahí creo que el principal rol de Wonder Woman sigue siendo el de haber abierto camino y seguir como piedra angular sobre la que se apoyan todas las Supergirl, Jean Grey, Tormenta, Starfire, Kitty Pryde, la Mujer Invisible, Pícara, la Avispa, Monica Rambeau, Hulka, Buffy, Catwoman, Aves de Presa, Jessica Jones, X-23, Batwoman, Capitana Marvel, Batgirl, Ms Marvel, Harley Quinn, las Spider Women y demás etc que han venido después. Diana quizás no este tan arraigada a la actualidad como muchas de las citadas, pero sigue ejerciendo ese rol de gran matriarca, y la que con más pureza plasma la determinación guerrera en forma de hostiaca limpia

Krokop
Krokop
Lector
23 junio, 2017 17:37

Yo ya he contado muchas veces mi impresión sobre estos temas sociales en los superhéroes. Me recuerdan al Show de Truman, donde ponían una América a lo Norman Rockwell con familias de minorías y no sé que más viviendo todos en paz, armonía y abundancia cuando, en realidad, el exterior no era así.
No reflejaba las bondades del sistema sino que evitaba mostrar sus miserias y se trataba de mera propaganda alienante que lo fortalecía. Porque mientras haya marginación, se cebará en los diferentes y vulnerables, y si en la ficción no se muestra así, favorece que ésta exista. Los universos estos que ensalzan la idea de élites estadounidenses controladas por accionistas y ofrecen una visión netamente imperialista no pueden, a mi juicio, tomar partido por aquellos mismos a los que explotan. No tiene ningún sentido sino como propaganda de ese mismo sistema del que ofrecen una imagen irreal. Pero vamos, mi impresión sobre esto es similar a la de Marshall Law y no voy a dar más la brasa con ello.
En este caso concreto y en cuanto al feminismo… Ellas sabrán si aceptan WW como barco.
El caso es que a los accionistas encorbatados les vendría muy bien, porque en el presente siglo, prácticamente todas las que les han plantado cara con sus propias creaciones de las que han conservado la propiedad y los derechos derivados han sido señoras. La mayoría de los fenómenos de la industria del entretenimiento reciente les pertenecen a ellas: Harry Potter, Crepúsculo, Divergente, 50 Sombras de Grey, Los juegos del hambre…

En cuanto al cómic. Seguramente el americano comercial arrastra más que ninguno una excesiva preponderancia masculina por el propio sistema imperante. Quizá sea una de las razones por las cuales, porcentualmente, es el único ámbito del entretenimiento en el cual no tienen tanta supremacia.
En Europa, no es que haya una igualdad perfecta ni mucho menos, pero sí han tenido un papel más importante las mujeres y buena parte de los avances que han atraído nuevos públicos a la historieta los han hecho ellas.
Aparte de autoras de género como Chantal Montelier o Lauren Harle, han dado muchas de las innovaciones más exitosas.

En Italia, buena parte de la potente industria se cimenta en los hallazgos temáticos y editoriales de las hermanas Giussani.

En Francia, prácticamente todo el género de comedia costumbrista con dibujo monigotil que vende cientos de miles de ejemplares viene de la Brétecher, una auténtica institución allí, que además fue la primera en llegar a la prensa generalista con sus planchas.

a la Goetzinger la animó un profe a hacer cómic cuando iba para diseñadora de escenarios y vestuarios y es uno de los pilares de la historieta de época seriota que ha dado tan buenos dividendos en la industria francesa
Posteriormente, el gran figurón de la ‘Nueva BD’ que empujó al resto fue Marian Satrapi.
Incluso en la industria americana, es en la línea Vértigo con Gaiman, Vaughant y compañía empezaron a asentarse ‘dibujantas’.
Vamos, que está claro que tienen mogollón que aportar, que hay que darles mejores oportunidades, que no siempre es así, que los aficionados metemos la pata…
Pero no sé si es la mejor forma, por más que dirijan la peli o hagan los cómics, a partir de unos iconos corporativos que pertenecen a trajeados, probablemente, con bigote.

Ellas sabrán.

Anónimo
Anónimo
25 junio, 2017 17:39

«Harry Potter, Crepúsculo, Divergente, 50 Sombras de Grey, Los juegos del hambre…». Pues menudas «maravillas» (nunca mejor dicho) mencionas.
Me vuelvo a ver los toros desde la barrera. Saludos.

Krokop
Krokop
Lector
En respuesta a  Anónimo
25 junio, 2017 18:56

Ya, desde luego. Si hablamos de obracas literarias y adaptaciones cinematográficas grandiosas seguramente tiraríamos por otros derroteros, pero si nos referimos a fenómenos de la industria del entretenimiento en el presente siglo es lo que hay, guste más o menos.

Anónimo
Anónimo
En respuesta a  Krokop
25 junio, 2017 20:02

Y Justin Bieber, Ariana Grande, Katy Perry… son los referentes musicales del momento o Telecinco la cadena más vista, sí, en efecto nada de eso se puede negar. El target es el target.

Krokop
Krokop
Lector
En respuesta a  Anónimo
25 junio, 2017 22:48

Pues sí que he debido explicarme mal, gracias por hacérmelo notar, Luca y Cristian.

Mi interés no era centrarme en los valores morales o creativos de las obras, sino en el hecho de que en esos casos el poder sobre éstas sigue en manos de sus autoras (y los pingües beneficios que generan), y harán lo que les parezca bien con ellas.

Sin embargo, en el caso de WW, pues está en manos de los accionistas de la Warren que serán quienes se beneficien de ésta. Con lo cual, me preguntaba si realmente esto suponía un punto positivo o no, que no lo sé, dado que ellas han tenido el control de muchos de los éxitos recientes con nombre femenino y ahora, pues este último, pese a tener mujeres en el equipo creativo, pues no.

Aludía a la industria europea, donde han tenido algo más de oportunidades, y al hecho de que, desde Vértigo, y ahora Image, hay una mayor presencia de autoras y con ellas, de lectoras, a mi juicio, prueba de que con un sistema donde ellas se beneficien económicamente, hay mayor presencia femenina.

Pero vamos, si de lo que se trata es de que personalmente me guste lo que hacen, desde luego no habría elegido Crepúsculo o Harry Potter, sino quizá a Úrsula K. Le Guin y en cómic Emma Ríos, por ejemplo.

Respecto a mi desconfianza hacia la ficción y los valores de ésta controlada por estos conglomerados financieros americanos, podría poner muchos ejemplos, pero creo que escaparía al tema del post.

geek lantern
geek lantern
Lector
27 junio, 2017 4:58

Escuche por ahí que su debilidad es ser amarrada con su propio lazo (fetichismo de marston, quizá)