La primera cuestión es una de la más clásicas, preguntando por cómo Tony Harris consiguió introducirse en el mercado editorial. La respuesta de Harris, por su parte, también fue de las más recurrentes: el aprendizaje, en su caso en Gaijin Studios de la mano de autores como Brian Stelfreeze (que le asignó su primer trabajo) y Dave Johnston. También destacó el poder de la tenacidad, así como la necesidad de confiar en uno mismo y en la propia capacidad. Aparece aquí también el lugar común de muchos artistas, evocando un primer editor que tras despedazar sus trabajos iniciales le dijo que nunca lo conseguiría y del que se ríe interiormente cuando ahora se lo cruza.
Pero para Harris lo más duro es crear un estilo propio, que es lo que, en definitiva, hace que algunos autores sean recordados: un grafismo distintivo. Harris lo ejemplificó con Mignola, al que calificó como «la voz más original en los últimos veinte años». En cualquier caso aclaró que todo el mundo se fija en sus propios referentes al comienzo de su carrera, pero que es cuando se sigue trabajando en el momento en que se desarrolla un estilo propio o no.
De esta forma, puede decirse que la mayor parte del trabajo de Harris se enfoca con un definido sentido cinemático. Así, cuando comenzó a trabajar en Ex Machina, le pidió a Brian K. Vaughan que escribiera los guiones para páginas de cuatro viñetas, que es para Harris la composición de página perfecta. Partiendo de esta base, Harris desarrolla viñetas panorámicas. En un alarde de transversalidad (guiño para Jordi Ballerà), Harris afirma amar profundamente películas como En busca del Arca Perdida o Encuentros en la Tercera Fase, «películas a gran escala [refiriéndose a la producción] pero en las que existen realmente pequeños detalles». Harris espera que la importancia de esos pequeños detalles matice «la actuación» en Ex Machina. La importancia de los movimientos de una mano es más importante que gente peleando. «Si puedes hacer funcionar los diálogos, hacer funcionar la acción es es pan comido».
No obstante, Harris evita colaborar con Hollywood en la elaboración de storyboards, pues no desea para sí la influencia creativa que lleva aparejada la industria cinematográfica. En este punto menciona cómo Vaughan tiene que colaborar con otros nueve guionistas en Perdidos. Pese a ello, su participación como diseñador del casco y el traje de vuelo en la película que sobre Ex Machina prepara New Line Cinema está asegurada.
Otra parte temática clave fue la referente a la forma de trabajar del autor. Harris colorea sus portadas con Photoshop CS. Para la imagen en la que se ve a la Gran Máquina volando por Nueva York, usó sin embargo Poser (un software de modelado en 3D). En un comentario algo irónico, Harris dijo que los referentes fotográficos son útiles excepto para escenas de vuelo. Cualquiera que haya visto los extras del primer tomo de Ex Machina de Norma Editorial sabe porqué lo dice: para sus dibujos se basa en una suerte de actores a los que fotografía para tener referencias posturales y anatómicas.
Hablando de su compañero en Ex Machina, Harris dijo de Vaughan que «es el individuo más colaborador con el que he trabajado en veinte años». Al parecer Harris contribuyó en gran medida al diseño definitivo del aspecto la Gran Máquina (inicialmente más cercano al de un superhéroe tradicional) y también a uno de los aspectos más enigmáticos de la serie (que se desarrollará al parecer más adelante en su propio arco argumental y que he de decir que como lector me tenía altamente intrigado): el misterioso Asesino del Váter, que aparece de forma recurrente en los titulares de portada periodísticos (fijaos en los periódicos de la serie).
Por último, no titubeó cuando afirmó que el personaje más duro de retratar era la propia ciudad de Nueva York. Tal vez por la obligación de no fallar en el diseño y la imagen de la ciudad que nunca duerme, tomó 2000 fotografías la última vez que la visitó (su hermano vive allí), retratando con precisión hasta los aspectos más nimios. «Espero que todos estos detalles se vean reflejados en el dibujo», sentenció.
Anda que a este paso lo de la transversalidad se va a poner tan de moda como lo de spoiler, jeje.
Sí pero es que ha venido al pelo… yo mismo no me lo creía. Y conste que no me gusta como queda pero bueno… tampoco puedo cambiar lo que dijo el hombre.
nos has salido un poco transverso con estas declaraciones , jeje.
Aunque no tiene nada que ver con este post, tengo la necesidad imperiosa de que alguien me responda a esta cuestión: SE PUEDE SABER PORQUE LA DOOM PATROL Nº 17 SOLO SE LE HA AÑADIDO UN NÚMERO AMERICANO, 24 PAGS MÁS, PASANDO DE 48 A UN TOTAL DE 72 Y EL PRECIO DE 3.50 A 9.50 EUROS?. SON 3 NUMEROS A AMERICANOS A 9.50, CUANDO LOS SEVEN SOLDIERS, POR PONER UN EJEMPLO, SON 4 AMERICANOS A 8.95. pOR QUE SE HA HECHO ESTO?.
Pues no sé. Ya nos hicimos eco de ello en el último Negativo Nacional, enlazando el post d UTCON donde se quejaban de ello.
Jajajajaj, tengo un nivel de inglés bastante aceptable xandar (entre leerme artículos científicos, ver series y películas en VO y leer cómics…), pero cuando leí ese «acting» en Newsarama te aseguro que me pasé más tiempo viendo si tenía otras traducciones posibles para no cagarla que traduciendo todo lo demás. Pero no… Harris quería decir justamente eso (como prueba el hecho de que cite dos películas inmediatamente antes).
A este respecto venían mis intervenciones en los dos post sobre la transversalidad (que por otra parte respeto mucho). ¿Entenderá más gente a qué se refiere Harris? Pues claro que sí. Pero si defendemos el cómic como un medio artístico y expresivo singular, ¿qué repercusión tiene que un dibujante use una palabra claramente cinematográfica para definir algo que podemos nombrar de mil maneras acuñando una terminología más adecuada, como «caracterización» por ejemplo?
Estas declaraciones de Harris exponen perfectamente todo lo malo que le veo a la dichosa transversalidad.
Menos en offtopic… no me termina de convencer esa forma que tiene Harris de hacer sus dibujos. Suelo dedicarme a la fotografía en mis ratos libres, y sé que para obtener retratos expresivos, que capten la personalidad del retratado más allá de sus rasgos faciales hace falta mucha experiencia.
Cuando me leí el primer tomo de Ex Machina y cuando me he puesto a buscar fotos para completar el artículo de Newsarama me he dado cuenta de que Harris no es un buen fotógrafo porque hace sobreactuar a los modelos. Eso hace que, al tomar las fotografías como referentes para el dibujo, éstas queden excesivamente planas (sin personalidad) y, la mayoría de las veces, desvinculadas del texto y de la acción. Personalmente me parecen algo anticlimáticas.
Si alguno tenéis el primer tomo de Ex Machina lo veréis en algunas viñetas en el personaje de Mitchell… en muchas ocasiones hay contradicciones entre lo que dice y parece que piensa, y las expresiones que emplea para ello (y al principio creí que era una doblez psicológica, pero no es así). Otras veces parece que la expresión de los personajes está forzada, artificiosamente exagerada. Y por último, resultan un tanto estáticas… como retratos de estudio 😀
Creo que la voz de la fotografía obtiene más vigor cuando se acerca a ciertas formas del cómic que no al contrario.
Totalmente de acuerdo.
se a q te refieres, al leer ex machina, viendo los dibujos y leyendolo, me hace recordar de alguna manera, aquellas revistas con/de telenovelas graficas, q hubo hace bastantes años en los kioskos.