Edición original: Zero #’s 6-10 USA (Image comics).
Edición nacional/ España: ECC.
Guión: Ales Kot.
Dibujo: Vanesa Del Rey, Matt Taylor, Jorge Coelho, Tonci Zonjic y Michael Gaydos.
Color: Jordie Bellaire.
Formato: Rústica, 160 páginas.
Precio: 14,95 euros.
Tal como hicimos con el anterior volumen, a pesar de que el gran Mariano Abrach ya reseñó los números USA que éste tomo recopila, dada su reciente edición en español por parte de ECC vamos a aprovechar la oportunidad de hablar del Zero de Ales Kot. Éste redactor cree que la obra lo merece, y que debe tener toda la visibilidad posible evitando en la medida de lo posible que su aparición en el mercado en castellano quede sepultada por la habitual avalancha de novedades.
En el centro de todo continua contando la trayectoria vital del agente Edward Zero allí donde finalizó Una emergencia. La serie se cuenta a modo de flashback, con el protagonista en el futuro, anciano, recordando su intrincada carrera antes de morir. En este volumen se juega menos que en el anterior a ofrecer historias mas o menos autoconclusivas ubicadas en diversos periodos temporales sin que estos vayan necesariamente correlativos. Una vez pasado el tramo inicial utilizando ése recurso para presentarnos al personaje y su mundo, Kot decide ya en esta entrega ir centrando la narración e ir haciéndola avanzar con episodios sucesivos. La excepción a esto es la escalofriante historia que transcurre en la Bosnia de 1993 y en la que se nos desvelan las terribles circunstancias que rodearon el nacimiento de Edward.
Por lo demás asistiremos a un nuevo encuentro con Ginsberg Nova, a cómo Edward dio el paso de abandonar la agencia, a lo que esto implicó para sus superiores Roman Zizek y Sara Cooke, y a un hermoso y tristísimo último episodio con nuestro protagonista oculto en Islandia. De nuevo, el espionaje crudo con sus más sucias duplicidades se combina con la ciencia ficción y con unas palpables atmósferas que sugieren interesantes reflexiones sobre la condición humana.
El guion de Kot vuelve a ser sobresaliente: lo que perdemos en experimentación con los saltos temporales del primer tomo lo ganamos precisamente en el abandono de ése recurso antes de agotarlo, y en una historia que comienza a centrarse más en el momento adecuado, antes de que nuestro interés pudiese diluirse una vez pasada la novedad de ése planteamiento. Tampoco están ausentes los juegos plásticos con viñetas aprovechando las posibilidades narrativas del medio, con por ejemplo escenas en las que la acción se acelera y la rejilla pasa a ser de cuatro por cuatro. Nada especialmente innovador, pero que junto a otros recursos siempre es de agradecer, y que hace que las trepidantes escenas de acción no sean las hermanas pobres sin luz, movimiento ni sonido del cine blockbuster.
El apartado gráfico, es paradójicamente coherente, tanto entre sí como con primer tomo, considerando que cada episodio es dibujado por un artista distinto. Vanesa Del Rey, Matt Taylor, Jorge Coelho, Tonci Zonjic y Michael Gaydos aportan un aspecto feista, sucio y apartado de los trazos limpios habituales en el cómic mainstream. Todos ellos son soberbios, pero claro, con cinco artistas hay para elegir según gustos. El color de la siempre magnífica Jordie Bellaire y los diseños de portada de Tom Muller ayudan a unificar con esta disparidad de dibujantes el look de una serie que por cómo avanza la trama va tendiendo a necesitar cada vez menos de esa por otra parte interesante táctica diferenciadora entre episodios.
Este redactor ha confesado en varias ocasiones su admiración en general por el trabajo de Kot y por esta obra en concreto. Este tomo no le ha decepcionado lo más mínimo y las expectativas han estado a la altura. A pesar de que se ha comentado que los últimos números aparecidos en el mercado angloparlante han bajado el nivel, las ganas de averiguar si esto es así no han hecho sino crecer, y la serie va camino de convertirse en una de las que en el futuro posiblemente sean calificadas como imprescindibles de ésta década.
Edición original: Zero #'s 6-10 USA (Image comics). Edición nacional/ España: ECC. Guión: Ales Kot. Dibujo: Vanesa Del Rey, Matt Taylor, Jorge Coelho, Tonci Zonjic y Michael Gaydos. Color: Jordie Bellaire. Formato: Rústica, 160 páginas. Precio: 14,95 euros. Tal como hicimos con el anterior volumen, a pesar de…
Zero volumen 2: En el centro de todo
Zero volumen 2: En el centro de todo
2015-07-01
Sergio Aguirre
Guion - 10
Dibujo - 9
Interés - 10
Vosotros puntuáis: 9 ( 1 votos)
Reseñaca para un obrón. Sólo quería matizar el «descontento» con lo que vino después de este arco, para no desanimar a aquellos que estén pensando en comprar la serie: no es una cuestión de que la calidad baje, sino que la historia se transforma en otra cosa, muta como los hongos que afectan a cierto sector de la población.
Es esa progresiva transformación en «otra cosa» que acaba llevando a un entorno mucho más metalingüístico lo que pudo echar para atrás a algunos y chocó con las expectativas de otros (cosa que me ocurrió a mí). Veo muy posible que el final de la serie me defraude, pero no por falta de calidad, sino por no ser lo que esperaba de la serie en base a las expectativas creadas. Cuando se hable de ZERO dentro de unos años, ya con el cuadro completo, podrá dirigirse mejor las expectativas de los futuros lectores de manera que la obra podrá apreciarse en todo su esplendor.
Dicho esto, lo que sí me tiene fascinado es que la evolución y cambios palpables de la serie las estemos viviendo a través de la evolución y cambios del guionista y de nosotros como lectores. Si nosotros no somos los mismos hoy que el día en que leímos ZERO #1, ¿por qué iba a serlo ZERO, una serie pulsátil, viviente, hecha carne y vida? Lo dicho: dentro de unos años tendrá un público objetivo; a día de hoy, estoy muy feliz de formar parte de esa evolución y cambio paralelo. Soy uno con los hongos 😛
Enhorabuena por la reseña Sergio, es estupenda. Y que decir también del comentario, no sé si esa palabra le hace justicia, de Reve, magnifico !!
En cuanto al comic, sinceramente lo tengo que leer de nuevo porque no me enteré de la misa la mitad, espero que fuera por el cansancio y la somnolencia y no por un problema de neuronas.
Se acabó ZERO. Acabo de leerme los 4 números finales del tirón para tratar de entender mejor el tema, y dudo que lo haya entendido al 100%, pero creo que ésa es también la intención, ser algo más sensorial, más de cada uno… en mi propio multiverso. Me ha encantado, como dije ayer, lo exigente que es la obra, obligando al lector a implicarse en ella, a formar parte de ella, y guardaré esta serie como oro en paño para siempre. Hasta siempre, Edward Zero.
http://i.imgur.com/dA40NB7.jpg
P.S. Gracias, Jaque. No creo que fuera para tanto, pero gracias 😉
Muchas gracias por los comentarios, la valoración de la reseña, y por supuesto por los aportes.
Me alegra que el desconcierto con los siguientes números sea debido a un cambio, sea en la dirección que sea, y no a un descenso de calidad. En cuanto saque tiempo me pondré con la obra completa ya que acaba de concluir. Por cierto, Reve, que me puse con con Wild Children y me gustó bastante, aunque el final me apreció que desafiaba un poco la plausibilidad. Sí ya se que plausibilidad es concepto que tal vez no sea muy aplicable, pero entiéndeme.
De momento es aquí en Zero donde más me ha gustado Kot, pero tal vez eso cambie según avance Material y empiece a publicarse Wolf. Que ganas de ésta última, oigan.
Pobre y olvidada THE SURFACE… Que llevamos 3 números majos, hombre 😛
http://www.comicbookresources.com/imgsrv/covers/0/0/1/TheSurface-01-Cover.jpg
WILD CHILDREN es un Ales Kot en los mimbres todavía, sí, quizá demasiado abstracto, demasiado críptico, sin terminar de salir del ensayo para adaptarse al cómic, pero creo que el resultado, aupado por Rossmo, es un gran debut (importante recordar que es un debut de un chaval de, por aquel entonces, 26 años -dios, los que tengo yo… ná, todavía tengo casi un año para escribir un cómic). El tema de fondo, una vez más, no es original, pero sí la forma de plantearlo. Y dado el formato breve de novela gráfica, tampoco se presta a muchas más explicaciones.
En esta línea iría ZERO, pero teniendo en cuenta que aquí sí ha tenido tiempo de establecer una base emocional, humana, de carne y hueso, con el lector.
P.S. Eso sí, ganazas de WOLF.