ZN Marvel: New X-Men Nuevos Mundos. Parte 2 de 2.

Segunda parte del artículo publicado en el BoME Nuevos X-Men Tomo 3.

El destino elegido por Charles y Jean para inaugurar oficialmente la Corporación-X es Paris, enclave de una de las sedes más prominentes del solidario ente.
Cada sucursal cuenta con un personal civil, de naturaleza mutante, principalmente dedicado a labores administrativas, y con un cuerpo de colaboradores y ex alumnos de Xavier que constituyen una unidad táctica entrenada para operaciones de campo: los Cuerpos-X.
No se deben confundir a estos Cuerpos-X con la malograda formación del mismo nombre que dirigía el ex hombre-x Banshee, porque aquella tenía un cariz militar y autoritario muy alejado de la labor policial que desempeñan los agentes de la Corporación-X. La mayoría de componentes del grupo de Banshee han sido trasferidos a la rama parisina de los Cuerpos-X, en un intento de reorientar sus capacidades y de lavar su imagen, lo que nos lleva a repasar quiénes forman parte de esta unidad francesa:

El Hombre Múltiple: como se desprende de su nombre código, Jamie Madrox posee el poder de crear duplicados de si mismo, clones que es capaz de reabsorber en cualquier momento, adquiriendo sus recuerdos y vivencias. Cuando es herido, le basta con dividirse para repartir el daño entre sus réplicas, y si produce demasiadas corre el peligro de disgregar su consciencia hasta un punto de no retorno.

Bala de Cañón: Sam Guthrie es un humilde joven de Kentucky que desde siempre se ha desvivido por su familia, llegando a asumir el puesto de minero al fallecer su padre. Pero la mutación que le permite impulsarse como si fuese una bala humana llamó la atención del Profesor-X, que no tardó en ingresarlo en su escuela y ponerle al mando de los Nuevos Mutantes, el equipo de adolescentes aspirantes a hombres-x.

Syrin: Theresa Cassidy ha heredado el grito sónico de su padre Banshee, pero también su afición por la bebida. Con empeño y fuerza de voluntad ha conseguido contener su alcoholismo y regresar a la vida de heroína que ya tuvo mientras limitaba en el X-Force de Cable.

Ríctor: también procedente de los Nuevos Mutantes y X-Force, James Richter tiene la capacidad de proyectar ondas sísmicas con sus manos. Aplicadas sobre tierra firme, estas ondas desencadenan terremotos de intensidad variable en la escala que da apellido a James.

Estrella Oscura: de nombre real Laynia Petrovna, es una veterana superheroína rusa que controla la Fuerza Oscura, una energía procedente de otra dimensión y a la que puede dar forma para disparar rayos, levantar campos de fuerza o efectuar teletransportaciones. Su papel en el Universo Marvel ha sido notable en títulos como Contest of Champions o Los Campeones.

M: Monet Saint Croix es una remilgada chica de clase alta con un complejo de superioridad tan grande como su superfuerza y resistencia. También poseee la habilidad de volar y ciertas dotes telepáticas.
Fue alumna de Emma Frost y de Banshee en la clausurada Escuela de Massachussets.

Sabra: experta agente del Mossad, el servicio de inteligencia israelí, que cuenta con un físico portentoso y desarrollado genéticamente para la lucha. Hasta su paso por Genosha no conocemos su afiliación a la vertiente parisina de la Corporación-X.

A lo largo de este volumen Jean y Xavier también visitan Mumbai (anteriormente conocida como Bombay), en cuyos Cuerpos-X encontramos a:

Sendero de Guerra: el indio americano James Proudstar tiene una gama de características físicas aumentadas, que incluye reflejos y sentidos aumentados, fuerza descomunal y velocidad sobrehumana. En su etapa como miembro de X-Force mantuvo un romance con Syrin.

Feroz: la más violenta componente de X-Force era María Callasantos, una joven de aspecto y habilidades felinas con un instinto de lucha muy agresivo. Antes de reformarse al amparo de los hombres-x, había cometido crímenes de tal calibre como el asesinato de su familia, motivado por los abusos sufridos de niña.

Espina: Lucía al igual que su hermana Feroz, formó parte de Los Morlocks, la red clandestina de mutantes apartados de la sociedad por su apariencia. Sus habilidades mutantes son similares a las de su hermana, así como su historial delictivo. La Corporación-X ha sido su oportunidad de redención y de superar el odio hacia María.

Fuego Solar: Shiro Yoshida es el mutante japonés más famoso de todos los tiempos. Puede generar energía calorífica de magnitud y potencia solar. Su paso por los X-Men fue breve pero decisivo, pues contribuyó al rescate del equipo-x original de las entrañas de la Isla Krakoa. Esto no le ha impedido reunirse y ayudar de vez en cuando a los hombres-x.

Hay más viejos conocidos del universo de los X-Men, sobre todo en el capitulo centrado en las ruinas de Genosha, así que no está de más presentar sus rasgos más relevantes.

Tormenta: Ororo Munroe es una de las más preciadas mujeres-x. Bajo su mando están el clima y los elementos. Sus choques ideológicos con la filosofía de Xavier la han apartado del grupo central de X-Men, por lo que fundó una banda independiente de hombres-x entre la que se encuentra Bishop, Pícara, Sabia o Ave de Trueno, el hindú de poderes flamígeros que la acompaña a Genosha.

Mercurio: el hijo varón de Magneto y hermano de La Bruja Escarlata es un supervelocista con un carácter difícil pero una carrera heroica demostrada como miembro de Los Vengadores. Al buscar las respuestas sobre su padre se topará con dos compañeros de La Hermandad de Mutantes que militó en su época de villano, Sapo y Unus el Intocable, a quien se creía muerto.

Polaris: hija no reconocida de Magneto, Lorna Dane comparte el dominio del magnetismo con su supuesto padre, a quien ha servido fielmente en el gabinete de gobierno genoshano.

Arcángel: miembro fundador de los X-Men, Warren Worthington es rico, guapo y tiene dos grandes alas con las que alzar el vuelo. Precisamente en esa disciplina imparte una serie de clases a los alumnos con habilidades idóneas para desafiar a la gravedad.

En este volumen debuta el ladrón mutante Fantomex, un hábil remedo del Neo de Matrix y de Fantomas, el maestro criminal creado por Marcel Allain para la literatura gala. Por lo tanto combina una estética repleta de cuero, armas de fuego y estilo de lucha hipercinético con dotes de infiltración y de ladrón de guante blanco. Sin olvidar a E.V.A., su exótico platillo volante que en realidad es la manifestación externa de su sistema nervioso, ni los paneles que lleva acoplados a su máscara para escudarse de telépatas. Con Charles y Jean como improvisados salvadores a tanta proximidad, no es de extrañar que deba refrigerar con frecuencia los citados escudos. La conexión de Fantomax con el proyecto Arma-X y las vitales revelaciones que trae consigo será un tema a desarrollar en posteriores artículos para no desvelar sucesos que leeréis en este tomo.

No es casual que sea Jean Grey la encargada de levantar junto a Charles Xavier la colosal Corporación-X. Desde las primeras historias de los hijos del átomo, la pelirroja se ha perfilado como la heredera directa y la mano derecha de Xavier, por encima de Cíclope, el hombre en quien el profesor confió el liderazgo delos X-Men. No en vano al ser desde niña la primera mutante atendida por Xavier, ella le inspiró la idea de construir una escuela para seres superpoderosos, sobre todo a tenor del ilimitado potencial que percibía en la futura mujer-x.
Posiblemente la relación entre Charles y Jean sea tan estrecha porque como compañera telépata ella es la única que comprende y veladamente acepta las abundantes mentiras y manipulaciones de las que se vale su maestro para asegurar la consecución de sus fines. Existen dos ejemplos claros de esta manifiesta confianza. Cuando Charles fingió su muerte para preparar en secreto la defensa de la Tierra contra la invasión alienígena Z´Nox, sólo compartió con Jean la verdad de sus planes. Y cuando sucumbió al lado oscuro hasta convertirse en el monstruoso Onslaught, fue a través de su alumna como prendió la llama del fuego que acabaría por sellar su propia derrota. Durante este incidente con Onslaught, Jean descubrió que el profesor la amaba en secreto desde hacía años, y que había reprimido esos sentimientos por no considerar adecuado enamorarse de su joven pupila. Es de suponer que ese amor latente evolucionó en la relación padre/hija que ambos comparten en la actualidad, porque el corazón de la chica siempre le ha pertenecido a Scott Summers.

Los dibujantes encargados de ilustrar este volumen de los New X-Men de Grant Morrison son en primer lugar Igor Kordey, el artista croata al que ya conocíamos de capítulos anteriores y que en esta ocasión da lo mejor de sí para reproducir la angustiosa atmósfera del primer arco argumental de 3 episodios, sobre todo en las escenas que trascurren en el Eurotúnel que conecta a Francia e Inglaterra.
En segundo lugar contamos con el sofisticado estilo de Jean Paul Leon, narrador gráfico del primer y el antepenúltimo capítulo. Sus obras más destacadas son Tierra-X, Las Aventuras de Cíclope y Fénix y The Winter Men.
El preciosista Ethan Van Sciver se despide en el penúltimo episodio de la serie para la que ya ha dibujado un total de cuatro números, y en el capitulo final toma el relevo Phil Jimenez, uno de los mejores y más importantes dibujantes de superhéroes. Será él quien asuma los lápices de otro par de arcos argumentales de los New X-Men de Grant Morrison, con quien ya colaboró en Los Invisibles.

Morrison tiene una dirección definida por la que conducir a los mutantes, y pasa por sacarles del rincón oscuro en el que se han ocultado para que admiren el mundo que heredarán dentro de unas generaciones. Un nuevo mundo al que darán forma bajo el amparo de la enigmática Fénix.