ZN Spoilers #1 – Marvel, el Castigador de Ennis y el ascenso de los Inhumanos

Hola a todos de vuelta. ¿Parece que hace una eternidad desde que dimos por finalizada la última etapa del Qué está pasando en el cómic americano, verdad? Pero como ya os comentamos, en Zona Negativa cada vez que una sección dedicada a seguir la actualidad americana termina su andadura, otra nueva nace para ocupar su lugar. Así ha sido desde que este rincón de la web naciera bajo el nombre de WTF? y que se ha mantenido en activo durante un par de lustros bajo diferentes denominaciones. Entre ellas, la que ahora recuperamos, y que en su día dieran nombre los compañeros Pedro Monje y Jordi Molinari.

Ahora bien, os preguntaréis por qué el cambio en la sección. En primer lugar, por mantener la tradición de concluir cada etapa a las 52 entregas. Llamémoslo capricho si hace falta, pero así ha sido durante varias de las etapas del WTF?, Qué está pasando, ZN Spoilers, y que menos que darse el gusto de continuar fiel a esas costumbres. En segundo lugar y más importante, ya que por mi parte cada vez me estaba resultando más difícil tanto mantener el ritmo semanal de la sección, como estar pendiente -por mucho que los compañeros y el seguimiento de las diferentes webs de referencia pudieran ayudar al respecto- de todo lo que se estuviera fraguando en el mercado americano.

Por esa razón, en esta nueva temporada entran en juego dos importantes novedades: Por un lado la incorporación del compañero Jordi Molinari, quien a partir de ahora se encargará de la cobertura de todo lo relativo a DC Comics. En segundo, que nos turnaremos de forma que tendréis una entrega de la sección cada 14/15 días, alternándonos de forma que a cada selección dedicada a Marvel seguirá una de DC, y tras esta de nuevo con Marvel para mantener este ciclo. ¿Qué ganamos con esto? En nuestro caso está claro que el disponer de más tiempo para preparar los posts. En el vuestro, que se encargue de la selección de DC alguien que de verdad está al tanto de todo lo que sucede de la compañía de Geoff Johns, y que no se note tanto que si lo sacas de Tom King, Mark Russell, Young Animal y alguno más se pierde, como le empezaba a pasar a un servidor desde que tenía menos tiempo para seguir la actualidad.

Dicho todo, entremos en faena, que qué menos que ocuparme de dar el pistoletazo de salida mientras el compañero Jordi continúa en boxes preparando la próxima sección dedicada a DC. Con una selección extralarga para celebrar el comienzo de esta nueva etapa, aquí va nuestra primera remesa para el regreso de ZN Spoilers:

Recibido con incertidumbre por la responsabilidad que supone tomar el testigo de una de las mejores etapas que ha dado el género a lo largo de los últimos años, la primera entrega de la nueva serie de Sam Wilson nos deja uno de esos comics cargados de sustancia, de los que conviene digerir a fuego lento. Sabiendo tomar el testigo del trabajo de Nick Spencer, el debutante Rodney Barnes no solo ha captado el espíritu de la etapa de su predecesor, haciendo de esta nueva serie del Halcón una continuación muy solidad de la que gran parte de los que veníamos siguiendo la cabecera del Capitán América teníamos claro era la más sólida de las dos colecciones. Además, lo hace con uno de esos comics que saben transmitir la autenticidad del que se conoce el camino que recorre, y si bien no es que se complique demasiado la vida con la trama que se nos presenta, son incontables los detalles con los que nos bombardea, en torno a la problemática de convivencia racial de los Estados Unidos actuales, especialmente en lo relativo a la tumultuosa área de Chicago.

Una de las ciudades con mayor población negra de los Estados Unidos y también de las más fuertemente azotadas por la crisis económica, su peculiar situación ha sido abordada en colecciones como Halcón Nocturno, Invencible Iron Man o Deathstroke. Ahora le toca hacerlo al nuevo guionista de El Halcón, y en veinte páginas que tiene para presentar sus cartas le da tiempo a flirtear con cuestiones que van desde la violencia entre bandas, el abuso de la fuerza policial como herramienta policial mediante la que alardear de una posición de poder en lugar de abordar los complejos problemas sociales que dan lugar a esta, las luces y sombras del casco urbano de una ciudad afectada por la crisis, la popularización de la figura de los negros mágicos en la ficción frente a la paradójica falta de difusión de la obra de artistas como Black Herman, la controversia entorno a la penitenciaría Menard Correctional Center de Illinois, en la que Michael Jefferson murió en extrañas circunstancias, el asesinado del líder de los Panteras Negras de Illinois Fred Hampton a manos del FBI o Laquan McDonald a manos de la policía, Croocklyn y la obra de Spike Lee, el legado del fallecido rapero de Mobb Deep Albert Johnson, más conocido como Prodigy…

Eso por no hablar de la siempre presente figura del Tio Tom como negro traidor a los suyos, o el clima de desconfianza presente entre la población de color de América, por como tras ocho años de una política de aproximación a los sectores tradicionalmente más afectados, se ha pasado a una situación radicalmente contraria. Tema presente en la nueva novela de Ta-Nehisi Coates la cual tuviera a bien descubrirme su existencia David Alday, en general es una serie que ha sabido aprovechar la situación de Sam Wilson tras Imperio Secreto, aplicándola a problemas del mundo real, a la vez que aborda la diferencia generacional entre el Halcón y su nuevo sidekick Patriota en plena acción.

En líneas generales, y aunque algunos detalles en cuanto a su parte más superheroíca que quizás no terminan de encajar con el marco real que transmite el resto del número, un cómic que sabe que sabe entender tanto al personaje como su situación actual y dejar claro que

Garth Ennis vuelve a donde históricamente ha logrado sus mejores obras del presente siglo. Vuelve al sello MAX de Marvel Comics, y lo hace junto a Frank Castle. Junto a Castle y Goran Parlov. La razón es esta miniserie que nos lleva de regreso a los primeros días del futuro Castigador en Vietnam. Y quien dice los primeros días…

Dice los primerísimos días. ¿Un Frank Castle sin experiencia en combate? No way. Llevándonos a los días entre El Tigre, Furia MAX y Nacimiento, La Sección está repleta de conexiones con el resto del ennisverso, no faltando nombres tan familiares como los de Michael Goodwin o Letrong Giap. Pero si hay un factor -con el que Ennis ya había flirteado antes- que hace esta mini-serie especialmente interesante más allá de la oportunidad de ver como Castle comenzó a curtirse en las trincheras es por atreverse con

Hablando de Ennis, mucho se habla de su contribución a personajes como el Castigador, pero muy poco de cómo redefinió al Motorista Fantasma. Muy diferente sería al personaje respecto al que conocemos hoy, si aquel guionista recién salido de Predicador no lo hubiera rodeado de interminables carreteras malditas en las áridas llanuras de los Estados Unidos, enigmáticos autoestopistas de ultratumba, demonios acechando entre patrulleras interestatales o easy riders con cabalgaduras industriales alimentadas por el fuego del infierno, entre un largo etc.

Todos esos ingredientes se pueden encontrar en el primer número de la serie del guionista de Buffy Cazavampiros Victor Gischler y David Baldeón, quienes -ya que en DC nadie parece tener interes alguno en proseguir el legado de la Liga de la Justicia Oscura– se acuerdan del legado de los Hijos de Medianoche para recuperar a la plana mayor de la Marvel sobrenatural de los noventa. Así tenemos de vuelta a temerarios motociclistas curtidos en mil batallas contra las fuerzas del más allá, expertos en lo sobrenatural que podrían dar buenas clases magistrales a los responsables de Cuarto Milenio y sobre todo

En octubre, Marvel se llena de amor. Amor como el que trata de revivir la Hulka de Mariko Tamaki aplicando un RCP de urgencia a su vida sentimental. ¿Cuando fue la última vez que te permitiste una alegría para el cuerpo, Jen? Puede que hace más tiempo que el que le gustaría. O al menos eso da la impresión con su repaso de amoríos pasados.

Tampoco es que sea menos accidentada la vida sentimental del Hombre de Hielo teniendo en cuenta su trayectoria personal. Pero, eh, quien sabe si una escapada a Los Ángeles para reunirse con los antiguos Campeones puede ser la ocasión definitiva para quitarse de encima las telarañas que aun le mantienen atado al armario

Mientras Venomverse llega a su final con intenso derramamiento de sangre y un final de los de agarrarse a los machos -así como un Iban Coello que se ha ganado el derecho a pasar a las primeras ligas de los grandes de Marvel-, el Legado Marvel llega con fuerza a la serie de Eddie Brock, con el regreso a territorio simbionte de Mark Bagley. Y no se si será el acabado de John Dell y Dono Sánchez-Almara o que se nota las ganas que el dibujante de la primera mini-serie de Veneno tenía de reencontrarse con su críatura, pero seguramente llevéis años sin ver a un Bagley como el que vais a encontrar en estas páginas.

Pero ojo, porque Bagley no viene solo. Y si Brock quiere demostrar que realmente es a él a quien le corresponde el único y verdadero derecho a ejercer como Spider-Man siniestro, tendrá antes que vérselas

Y hablando de Thompson, la serie de Dan Slott es otra que se ha tomado muy en serio el tema del Legado, y la primera entrega dentro de la iniciativa frenazo que tiene como objetivo para en seco la evolución de los personajes Marvel para facilitarles las cosas a aquellos aficionados que se sentían perdidos es todo un quién es quién de caras conocidas.

En lo que respecta a Peter Parker, los recientes cambios en la vida sentimental del personaje comienzan a demostrar ser todo un acierto. Por un lado, porque -si las cuentas no me fallan- nunca habíamos visto al arácnido hacer frente a un caso de novia madre tan evidente como el que aquí se da, lo cual sin duda lo sitúa en una dinámica muy diferente al que tuvo con sus anteriores parejas. Pero también porque quizás es lo que más le beneficia teniendo en cuenta su particular situación actual. Porque sí, por si alguno todavía no os lo creíais

Con la Gwenpool de Jonathan Hastings adentrándose por territorios perturbadoramente oscuros al descubrir sus nuevos poderes

Wade se suma también al legado, que de momento está transmitiendo una sensación cuando menos extraña. Porque están devolviendo a los personajes a un estatus similar al que tenían en los días de gloria de sus comienzos, pero a la vez con un marcado componente agridulce, con el que es imposible no palpar un sentimiento de tragedia en el que estos se vean obligados a emprender esta regresión al son de este imperio de la nostalgia que parecemos estar viviendo.

No sería extraño que fuera así, teniendo en cuenta que buena parte de estos autores son los mismos que han propiciado la evolución de los personajes a lo largo de los últimos veinte años, por lo que en parte debe ser como ver a un hijo verse obligado a tirar por tierra buena parte del esfuerzo de varios años. Décadas en algunos casos. Así podría interpretarse en la caída de las alturas impuesta a Peter Parker forzado a dejar atrás las mieles del éxito a las que siempre estuvo destinado vuelve prácticamente a la casilla de salidad pero también un Masacre que obligado a prender fuego a todos estos años de redención que lo han conducido a ser un Vengador de pleno derecho, a tener que volver a su senda original como el despreciable mercenario que conocieramos en Nuevos Mutantes.

Pero lejos de amilanarse frente a esta exigencia de los extraños tiempos en los que vivimos en los que retroceso y estatismo se confunden con fidelidad y esencia, Gerry Duggan aprovecha para explotar el drama que pueda suponer para todos lo que lo hemos visto crecer esta traumática vuelta a los orígenes. Y la primera víctima para ilustrarlo no podía ser otro que alguien que durante todos estos años ha tenido una relación tan estrecha con Masacre como el propio Cable. Sabiendo ya que cuando Wade se decidía a ir a por alguien podía ser @#$%&mente terrorífico -que se lo pregunten a los agentes de ULTIMATUM o Dientes de Sable- todo lo que podemos decir sobre esta cruenta vuelta a las andadas del mercenario bocazas y el hijo de Askani es que

“Alguien está intentando matarnos usando la nostalgia”. La más brillante afirmación sobre el estado actual de la mayor parte de las plataformas de creación a nivel de cómic, cine, música, televisión, literatura, videojuegos y un interminable etc no la han tenido ni Grant Morrison ni Warren Ellis, sino Marc Guggenheim. Añadiendo un “No lo llames nostalgia, llámalo Legado” que ha disparado todo medidor de cabronismo de aquí a Helsinki, la saga que reune a los equipos Oro y Azul se presenta con un inesperado alarde de mala leche festiva en esta recreación de los grandes éxitos del pasado de la Patrulla-X.

El cual, como no podía ser de otra forma, arranca con el correspondiente partido de softball. Más allá de esto, pocas pegas se pueden poner a contar con Mike Mayhew y Jorge Molina

Mientras en Arma-X se resuelve el misterio en torno al responsable de recuperar el proyecto armamentístico que convirtiese a James Howlett en Lobezno y en El Viejo Logan culmina la descarnada batalla entre Logan y el Maestro, tenemos nuevo arco en la serie de Laura, con Juann Cabal debutando como nuevo dibujante de su colección. Y entre la recreación de cierto momento de gran importancia en el pasado de Lobezno como en el regreso de alguien muy ligado por conexión genética a la protagonista, no nos tiembla el pulso en afirmar que sin duda es el mejor dibujante que pasado por la colección desde que se fue David López.

Añadiendo cierto toque a lo Kevin Maguire al trazo puramente Frank Cho que ya mostrase en la mini-serie de Elektra, Cabal se alia a Tom Taylor para llevar a Laura y Gabby por un viaje por el pasado de la primera que promete sacudir el universo de Lobezno, y que además de un clifhanger tan loco que no nos atrevemos a destripar a nadie, introduce en escena a

Mientras en Imposibles Vengadores Hank McCoy y Simon Williams reviven los viejos tiempos, arranca el crossover entre Vengadores y Campeones a cargo de Mark Waid. Con el recuerdo a La Guerra de la Evolución de fondo, el guionista de Deredevil y La Viuda Negra reune a ambos grupos para hacer frente a una amenaza de extinción masiva que pone en peligro la supervivencia de la Tierra…

… y con la que ya le vale al guionista

“¿De qué está hecha una mujer? Qué maldición es capaz de forzar a una niña a soportar la carga de ser querida y protegida mientras aun es pequeña, para en cuanto crece servir de catalizador de la locura eb corazones oscuros. Como niña, es la fruta prohibida que después florece como queso ante los ojos de un mundo lleno de ratas hambrientas de lujuria. He llegado a convertirme en tal imagen del contenedor sin mente de la virtud de una niña, que los hombres deberían quedar embrujados con mi mera respiración”. Palabras palabras de Christopher Priest en el tercer número de Los Únicos y Verdaderos Reyes, donde además cuestiona el esclavismo de los Alpha Primitivos y nos deja una importante lección de cual es el lugar de la perspicacía en un mundo gobernado por la estulticia.

Pero lo que verdad cabe preguntarse es si alguien hace unos años podía haberse imaginado que iba a llegar un día en el que los Inhumanos iban a terminar convirtiéndose en una de las franquiciass más interesantes del mercado de superhéroes americanos. Y aunque les ha costado, entre la febril aproximación de Priest y Phil Noto a la juventud de los Inhumanos originales, la desbocada imaginación de Saladin Ahmed y Christian Ward en Rayo Negro y Al Ewing han conseguido que los Inhumanos vivan uno de sus mejores momentos, desde que Jack Kirby o Jae Lee se dejasen caer por sus vidas. El último, haciendo doblete además al terminar Cohete por todo lo alto.

Pero si nos centramos en su trabajo del guionista de Ultimates en la colección de la Familia Real, si bien la incorporación de Javier Rodriguez ha ayudado mucho al otorgar a la serie una fuerza narrativa que no tenía hasta el momento, no es que el propio Ewing se quede atrás, con el trabajo que está realizando en torno a Medusa y la mayor parte de su tripulación.

Continuando su particular descenso a los infiernos merced de una misteriosa y cruelmente irónica afección terrígena, Ewing sigue empujando a la antaño reina de los Inhumanos a enfrentarse a todo aquello que daba por asumido, planteándose cuestiones como quién es realmente más allá de los compromisos de su otrora cargo real o cuanto tenía de auténtico y cuanto de impostado y apariencia su relación con Rayo Negro. Cuestiones, de las que bien pueden permitir

Penúltimo número de la serie antes de internarse en Legado, y que responde dos de las cuestiones que quedaron huérfanas tras la marcha de Dan Abnett y Andy Lanning de la franquicia.

En primer lugar, ¿qué fue de los Nova Corps formados por la Mundomente en las puertas de Guerra de Reyes y la desaparición de Richard Rider en los abismos de la brecha del Cancerverso? Y en segundo, dentro de la aniquilación masiva padecida en las filas de estos

Brian Michael Bendis vuelve a estar on fire, y sus series callejeras a encandilar a los miembros de nuestra redacción. Así lo pueden dar cuenta tanto el compañero Jose María Vicente como el que aquí suscribe respecto a su etapa en los Defensores, que tras poner todas las piezas en posición en el final de su primer arco argumental, nos lleva hasta un terreno que el guionista de Cleveland le gusta visitar a menudo: Los juzgados.

Pero sin duda la joya de la corona es el arranque del nuevo arco argumental de Jessica Jones, tras la bomba que soltase al final de la anterior saga centrada en Maria Hill. Tras desaparecer de la custodia de SHIELD sin que nadie sepa nada respecto a su paradero actual, efectivamente

Así que toca poner en orden el fuerte y tener claro donde están los seres queridos, avisando a amigos, familiares y otros allegados para estar preparados en caso de que pueda terminar dándose una nueva confrontación. Una excusa como otra cualquiera para que Jessica y Carol Danvers vuelvan a reencontrarse para poner bajo el cuidado de esta última a su hija Danielle, y ya de paso ahondar un poco en la psique de la Capitana explorando porqué nunca ha sido muy fan de los bebés. ¿Te acuerdas de lo de Marcus Inmortus, Jess?

Supongo que tiene todo el sentido del mundo. El caso es que cuando hablamos de un adversario tan retorcido como del que aquí halamos, cuyos poderes además le permiten afectar a sus víctimas de forma que esto no se haga manifiesto hasta mucho después, mantener la guardia puede arrojarle a uno a una situación de paranoia especialmente difícil de sobrellevar. Y, en uno de los alardes más insólitamente perverso que haya tenido el guionista, ya sabéis lo que dicen de la esta

Con solo dos entregas en la serie, ya se puede constatar que la dupla formada por la escritora Rainbow Rowell y el dibujante Kris Anka es lo mejor que le ha pasado al grupo de adolescentes con superpoderes fugados desde que los creasen Brian K. Vaughan y Adian Alphona. Must en toda regla para cualquiera que guarde un mínimo de vínculo con los cachorros, la serie recupera el espíritu de una colección que se hizo grande convirtiendo la eterna batalla de la transición a la madurez en una epopeya de superhéroes, devolviéndonos hasta uno de los momentos más duros de la serie original.

A partir de ese punto, todos y cada uno de los acontecimientos que han sacudido al grupo desde su formación hasta la actualidad, tanto aquellos que tuvieron lugar en la propia serie del grupo como en otras colecciones en las que aparecieron sus diferentes integrantes -así como otras que ocurrieron fuera de plano sin que tuvieramos consciencia de los mismos- nos estallan en las narices

Concluimos este primer especial de esta sección quincenal dedicada a repasar lo que está ocurriendo en la actualidad americana con el habitual repertorio de menciones especiales. Menciones como al Daredevil de Charles Soule y Ron Garney, que según nuestros compañeros está experimentando una importante mejoría con su actual arco argumental. Tampoco olvidar la serie de Kate Bishop a cargo de Kelly Thompson, con Leonardo Romero volviendo a hacer magia con cada una de las páginas que dibuja para Ojo de Halcón.

Si a eso sumamos la línea argumental sobre la que parece se va a guiar la colección de nuestra arquera favorita, difícilmente podría encontrarse en una situación más interesante la cabecera de la discípula de Clint Barton en las puertas de Legado. No dejar de lado tampoco la serie de la ganadora del Eisner La Imbatible Chica Ardilla de Ryan North y Erica Henderson con su brillante final para el enfrenamiento de la roedora contra Ultron.

Sumando el final de la etapa de Gerry Conway en Renueva Tus Votos que -sin Gerry Conway- da paso al salto de ocho años para la llegada de Jody Houser y el extraordinario trabajo de Carlos Pacheco en la cuarta entrega de La Increíble Patrulla-X para completar el repaso a esta quincena, no esta para nada mal el material de lo que nos ha ofrecido Marvel en el arranque de esta nueva temporada de nuestra sección.

Para terminar, como no podía ser de otra forma, la correspondiente encuesta para que decidáis que os ha gustado más, así como la nunca fuera de lugar banda sonora. Dentro de dos semanas, el compañero Jordi Molinari cogerá el testigo para poneros al día sobre lo más interesante que haya acontecido en DC Comics durante todo este mes de octubre. Deseándole suerte en este cara a cara para sacar las mejores galas de cada una de las editoriales, por mi parte aquí volveré a estar dentro de un mes.

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