Dirección: Jeff Nichols Guión: Jeff Nichols Música: David Wingo Fotografía: Adam Stone Reparto: Michael Shannon, Joel Edgerton, Kirsten Dunst, Adam Driver, Sam Shepard, Paul Sparks, David Jensen, Scott Haze, Garrett Hines, James Moses Black, Jaeden Lieberher Duración: 111 minutos Productora: Warner Bros., Rat-Pac-Dune Entertainment Nacionalidad: Estados Unidos
Aviso de Spoilers: La siguiente crítica desvela algunos aspectos de la trama de Midnight Special pero sin entrar en detalles de los mismos que puedan comprometer el visionado de la misma.
El pasado miércoles se exhibía en el Festival de SitgesMidnight Special, la penúltima cinta del director Jeff Nichols, autor de obras tan interesantes como Take Shelter o Mud y sin duda uno de los autores norteamericanos más sugerentes de los últimos tiempos. Lo curioso del caso que nos ocupa es que Midnight Special, a pesar de pertenecer a un género tan atractivo de cara a la taquilla como la ciencia ficción y ser otro ejemplo en lo que llevamos de año de homenaje a la era Amblin de la década de los ochenta con Steven Spielberg a la cabeza, no ha llegado a ser estrenada en las salas españolas, siendo condenada al mercado del DVD y el Video On Demand en una estrategia comercial que cuesta mucho de entender, más aún si cabe teniendo detrás a una distribuidora tan potente como Warner Bros. Quizás el marcado carácter autoral de Midnight Special y su alejamiento de los cánones comerciales del género hayan sido razones de peso a la hora de tomar una decisión tan drástica de cara a la carrera comercial de la película, pero aun así nos encontramos sin duda ante una gran injusticia para con una de las películas más interesantes de lo que llevamos de año; así que, aprovechando su paso por el citado Festival de Sitges, no podíamos dejar de dedicar unas líneas a esta Midnight Special, a sus bondades y a las de un Jeff Nichols y su particular homenaje a la ciencia ficción con la que creció en la década de los ochenta.
Así reza el estribillo de Midnight Special, una canción tradicional asociada a los presos del sur de Estados Unidos, un canto a la libertad en forma de fuga de la prisión y que Nichols utiliza como metáfora para situarnos en una road movie que nos llevará por el corazón de Texas y donde acompañaremos a Roy (un espléndido como de costumbre Michael Shannon, actor fetiche de Nichols), quien huye de una secta religiosa comandada por Calvin Meyer (Sam Shepard) con su hijo Alton (Jaeden Lieberther), un niño de ocho años que esconde misteriosas habilidades y que le hace ser objetivo también del gobierno estadounidense encarnado en la piel del agente de Seguridad Nacional Sevier (Adam Driver). Roy, acusado de secuestrar al menor, está acompañado en su huida de su amigo Lucas (Joel Edgerton) y de la madre de Alton, Sarah (Kirsten Dunst), quienes se embarcan en un viaje hacia un enigmático destino. Poco más hay que saber de la trama a la hora de enfrentarse a Midnight Special, que jugará en su primera hora de metraje muy hábilmente con el desconcierto de un comienzo in medias res, soltando al espectador en medio de la trama sin darnos más explicaciones que la propia huida en coche de los protagonistas para ir desvelando poco a poco detalles del argumento pero manteniendo a la vez el misterio durante prácticamente todo el metraje. Esa atmósfera magnética que Nichols construye con ayuda de su director de fotografía habitual, Adam Stone, y sobre todo con la magnífica ambientación sonora del enorme David Wingo, quien compone una de las mejores bandas sonoras del año, hacen que Midnight Special nos atrape en esa red hipnótica que suelen ser las películas de Jeff Nichols de la que es imposible escapar a pesar de la ausencia de respuestas; y todo ello con la colaboración de un magnífico y contenido Michael Shannon y unos también sobresalientes Joel Edgerton y Adam Driver, los personajes más cercanos a ser nuestros nexos con la realidad.
Hay que recordar que en 2011, Nichols firmó la que fue para este humilde redactor una seria candidata a la mejor cinta de aquel año, Take Shelter, un drama familiar con tintes de ciencia ficción en la que un de nuevo sobrenatural Michael Shannon nos llevaba a diseccionar un núcleo familiar a través de la supuesta enfermedad mental del protagonista; en Take Shelter Nichols jugaba con la realidad y la ilusión dejando al espectador en un fascinante punto intermedio, una jugada muy parecida a la que realiza en una Midnight Special que, ayudada de su poco habitual narrativa, no proporciona toda la información para acabar de desentrañar el argumento; este puede ser un punto incómodo para muchos espectadores (más en un género como la ciencia ficción) ansiosos por conocer las respuestas a los enigmas planteados, pero ante todo hay que dejar clara una cosa a los despistados o a los que puedan sentirse desencantados una vez vista Midnight Special: Jeff Nichols es, ante todo, un autor fiel a su estilo y sus áreas temáticas, aspectos que no traicionará a pesar del género que esté tocando, en este caso una ciencia ficción a la que homenajea y a la vez moldea y consigue llevar a su terreno. Puede que a muchos les resulte un experimento fallido, tramposo o directamente torpe: nada más lejos de la realidad una vez se rasca la aparentemente sencilla superficie de una Midnight Special que es a la vez radiografía de la paternidad (Nichols fue padre en la época en la que se le ocurrió la idea de la cinta, en la que quiso reflejar el miedo ante la sombra de la pérdida y la responsabilidad y el instinto de protección como progenitor, algo reflejado a la perfección en uno de los últimos diálogos entre Roy y Alton) y deudora de cintas como Starman de John Carpenter o E.T. y Encuentros en la Tercera Fase de Steven Spielberg; todas ellas metáforas de despedidas y familias rotas como Midnight Special, que recoge el testigo del Spielberg más traumatizado pasado por la óptica de Nichols y sus propias filias y fobias. Quizás Midnight Special a veces se pasa de frenada tanto en el planeamiento de sus enigmas y su escasa resolución como en su pretensión de trascendencia, pero eso no le quita un ápice de sus extraordinarias virtudes.
También es curioso el acercamiento de Nichols al mundo de la ficción a través de los cómics de Superman que Alton lee continuamente, su primer contacto con la fantasía tras el escape de su aislamiento, unos tebeos curiosamente criticados en la película por el que un año antes del rodaje de Midnight Special fuera el general Zod en El Hombre de Acero (Zack Snyder, 2013), reflejando esa dualidad y separación entre el alegre abandono a lo ficticio y lo descarnado (y violento) de la realidad de la que huye Roy (un personaje con el mismo nombre que el de Richard Dreyfuss en Close Encounters, que también huía de su realidad a través de la visión de un destino en forma de coordenadas). Pero Midnight Special también nos habla de la familia, de la fe e incluso de la inseguridad ciudadana provocada por las nuevas tecnologías. Una mezcla de conceptos que la hace más interesante y a la vez más áspera que las amigables cintas en las que se refleja, pero que nos deja una nueva visión única de Jeff Nichols, y un nuevo peldaño en una prometedora carrera que ha continuado este año con Loving, cinta que ha cosechado elogios en los festivales en los que se ha presentado. Sin duda y a la espera de la llegada el mes que viene de la también aclamada La Llegada (The Arrival) de Dennis Villeneuve, nos encontramos con Midnight Special ante una de las cintas más interesantes y merecedoras de un visionado de este 2016. Una película que crece poco a poco en tu memoria y a la que es fácil perdonar los posibles fallos argumentales que se le pueden achacar y ante la que pocas veces ha estado más justificado el consabido refrán: que los árboles no te impidan ver el bosque. El de Midnight Special merece, y mucho, la pena.
*Como complemento a la reseña, os dejo un pequeño pero interesantísimo ensayo sobre la cinta (en inglés, aunque se pueden activar los subtítulos automáticos de Youtube), muy recomendable para ver tras el visionado, y que pone a Midnight Special como ejemplo y metáfora para hablarnos del Hollywood actual e incluso enlazar su propuesta con las adaptaciones del cómic al cine. Un vídeo que arroja más luz, como la canción de la que hablábamos al comienzo, sobre la propuesta que Nichols lanza a la narrativa y la cinematografía de nuestros días.
Dirección: Jeff Nichols Guión: Jeff Nichols Música: David Wingo Fotografía: Adam Stone Reparto: Michael Shannon, Joel Edgerton, Kirsten Dunst, Adam Driver, Sam Shepard, Paul Sparks, David Jensen, Scott Haze, Garrett Hines, James Moses Black, Jaeden Lieberher Duración: 111 minutos Productora: Warner Bros., Rat-Pac-Dune Entertainment Nacionalidad: Estados Unidos Aviso…
#ZNCine – Crítica de Midnight Special, de Jeff Nichols
#ZNCine – Crítica de Midnight Special, de Jeff Nichols
2016-10-14
Samuel Secades
Dirección - 8.5
Reparto - 7.5
Guion - 6
Aspecto Visual - 8.5
Banda Sonora - 9
79
7.9
Midnight Special es un acercamiento inusualmente personal a la ciencia ficción y una rendición del siempre interesante Jeff Nichols a las grandes obras del género durante la década de los ochenta. Una propuesta más que recomendable.
Con el tema de la distribución estoy contigo, esta película merecía estreno en cines. Y conste que como verás a continuación no ha significado para mi lo mismo que para ti, pero si creo que hubiera sido un título mucho más que interesante en cines y a mi parecer WB España ha actuado erroneamente.
De hecho creo que todos sabemos que WB Pictures apoya mucho el talento y apuesta por el buen cine, pero también sabemos que su filial WB España tiene una forma de trabajar que la mayoría de las ocasiones carece de sentido. Una pena.
Respecto a la película. Es curioso lo bien que lo has resumido tu aquí: «Quizás Midnight Special a veces se pasa de frenada tanto en el planeamiento de sus enigmas y su escasa resolución como en su pretensión de trascendencia[…]» y hasta aquí diría yo.
Para mi la película se queda a medias, y en varias ocasiones, final incluido, corre el peligro de parecer más un panfleto o una obra didáctica de alguna religión que no una película. De hecho mi problema no son el planteamiento de sus enigmas (el comienzo me encantó justamente por esto) sino su resolución (a mitad de película queda claro el final) y sobretodo en lo pretenciosa que me ha parecido en muchos momentos.
No quiero decir con esto que Nichols intente continuamente ser el más o que su obra sea la pretenciosidad infinita. Sencillamente no he conectado con su mensaje y en muchas ocasiones me ha parecido demasiado paternalista. Además la forma en que los padres del niño encaran todo el tema en la parte final no me ha gustado.
Lo mejor para mi Michael Shanon, este tío me encanta. Y el resto de protagonistas acompañan muy bien. Mención especial el principio, de hecho casi diría la primera mitad de la película, esa si me llegó con fuerza.
Lo peor es sin duda la pretenciosidad que rodea todo su mensaje.
De este cineasta yo solo he visto Mud, que me pareció superior a esta. Más que superior diría más entretenida, con menos altibajos. Como ya he dicho para mi Midnight Special pega un bajón enorme
Aviso de Spoiler
a partir de que los padres se encuentran
pero sin embargo Mud no adolece de este problema.
Espero echarle un ojo a alguna otra de sus otras obras a ver que tal 🙂
Con el tema de la distribución estoy contigo, esta película merecía estreno en cines. Y conste que como verás a continuación no ha significado para mi lo mismo que para ti, pero si creo que hubiera sido un título mucho más que interesante en cines y a mi parecer WB España ha actuado erroneamente.
De hecho creo que todos sabemos que WB Pictures apoya mucho el talento y apuesta por el buen cine, pero también sabemos que su filial WB España tiene una forma de trabajar que la mayoría de las ocasiones carece de sentido. Una pena.
Respecto a la película. Es curioso lo bien que lo has resumido tu aquí: «Quizás Midnight Special a veces se pasa de frenada tanto en el planeamiento de sus enigmas y su escasa resolución como en su pretensión de trascendencia[…]» y hasta aquí diría yo.
Para mi la película se queda a medias, y en varias ocasiones, final incluido, corre el peligro de parecer más un panfleto o una obra didáctica de alguna religión que no una película. De hecho mi problema no son el planteamiento de sus enigmas (el comienzo me encantó justamente por esto) sino su resolución (a mitad de película queda claro el final) y sobretodo en lo pretenciosa que me ha parecido en muchos momentos.
No quiero decir con esto que Nichols intente continuamente ser el más o que su obra sea la pretenciosidad infinita. Sencillamente no he conectado con su mensaje y en muchas ocasiones me ha parecido demasiado paternalista. Además la forma en que los padres del niño encaran todo el tema en la parte final no me ha gustado.
Lo mejor para mi Michael Shanon, este tío me encanta. Y el resto de protagonistas acompañan muy bien. Mención especial el principio, de hecho casi diría la primera mitad de la película, esa si me llegó con fuerza.
Lo peor es sin duda la pretenciosidad que rodea todo su mensaje.
De este cineasta yo solo he visto Mud, que me pareció superior a esta. Más que superior diría más entretenida, con menos altibajos. Como ya he dicho para mi Midnight Special pega un bajón enorme
a partir de que los padres se encuentran
pero sin embargo Mud no adolece de este problema.
Espero echarle un ojo a alguna otra de sus otras obras a ver que tal 🙂
Un saludo.