Los campistas deben morir
Aún recuerdo la primera vez que vi a Jason Voorhees. No fue en
De la mano del Kickstarter que sacó adelante Illfonic, donde triunfó en pocas semanas, llega esta aventura multijugador online en que podremos encarnar o a los campistas que sufrirán la persecución, o al propio Jason. Este es el principal atractivo del juego: en un online asimétrico, la posibilidad de encarnar al asesino y matar a adolescentes que buscan la fiesta, el sexo y la diversión.
Vienen curvas, queridos lectores.
Lo que ves es lo que hay: el juego no tiene campaña y no tiene demasiada profundidad. Partidas de 20 minutos en que encarnarás a un campista que tiene que sobrevivir o escapar, o a Jason. Obviamente jugar con Jason tiene mucho más gracia, pues además tenemos a nuestra disposición una serie de «poderes» que convierten la partida en una escabechina sangrienta. Imaginativo, eso sí. Por ejemplo: siempre que Jason se acerca a un campista, la música se eleva, se acelera, y nos advierte sobre la inminencia de la muerte. Sin embargo, uno de los poderes de Jason es cortar de raíz la música del juego durante unos segundos para aprovechar el factor sorpresa. Aunque encarnando a Jason seremos lentos y más torpes, sin duda la brutalidad siempre pondrá la balanza a nuestro favor en un enfrentamiento cara a cara.
Los campistas, por otro lado, deberán jugar a la estrategia.
Como campista, a nuestra disposición tendremos las cabañas del campamento, en las cuales Jason tiene bastante difícil entrar. Podremos atravesar ventanas en nuestra huida, escondernos en armarios y bajo las camas y recoger armas con las que podremos defendernos y retrasar así nuestra ejecución. Una serie de objetos nos ayudarán si lo que pretendemos es huir del campamento. Radio con la que llamar a la policía, un mapa para orientarnos, gasolina para el coche o la barca. Estos miniquest que nos obligan a reparar el teléfono para pedir ayuda, o el coche para escapar, añaden un plus de estrategia al juego que no nos limita a correr en la dirección opuesta al asesino y defendernos. Además, una serie de objetos ocultos en el juego nos ayudarán incluso a matar a Jason (lo más difícil del juego).
En cuanto a variedad, pues tampoco abunda. Apenas diez modelos de campistas, cinco o seis de Jason (cada uno de una película, con habilidades y armas diferentes) y tres mapas que tienen demasiado que ver entre sí.
Sin embargo, como anunciaba al principio del análisis, no puedo dejar de jugarlo. Tras la sorpresa inicial de la novedad, sigo jugando casi todos los días. Echarse un par de partidas en las que la tensión de no morir el primero, de escapar, o de matar a todos los campistas, realmente está bien conseguida. Y los fans de las películas se encontrarán con muchos guiños y elementos de estas que despiertan una sonrisa.
Un juego que parece echo por aficionados, y que si fuera un poco más barato, se convertiría en todo un referente. Sin embargo, estoy seguro de que cuando se arreglen los problemas de conexión con el esperado parche y cuando se añada contenido, se convertirá en uno de esos juegos recurrentes con los que echarse unas risas con los amigos. De momento, la nota que le pongo al juego no hace toda la justicia a la cantidad de horas que le estoy echando.
Valoración
Gráficos - 6
Jugabilidad - 6.5
Historia - 5
Sonido - 8
6.4
Valoración
Un juego que acusa una gran cantidad de errores y de falta de contenido, pero del que no logro despegarme. Un fenómeno para los fans de las películas y los amantes de los online en los que echarse unas risas.