Con la reciente publicación de Super Spy por parte de Norma Editorial, algunos lectores españoles estarán descubriendo el peculiar estilo de Matt Kindt (Cheektowaga, Nueva York, EE.UU.; 1973), autor que por méritos propios goza de una sólida reputación en el cómic independiente estadounidense.
Gracias a la mediación de Raúl López -quien también se rindió ante el indudable atractivo de este tebeo- tuve la oportunidad de ponerme en contacto con el autor y gracias Alberto Morán, los lectores de Zona Negativa podéis disfrutar de la versión traducida de esta entrevista, que os ofrecemos en las líneas que siguen a continuación. Una entrevista a través de la cual indagamos en las diferentes etapas de la carrera profesional de este talentoso historietista, a quien antes de entrar en materia, le agradecemos su amabilidad, paciencia e interés a la hora de abordar la siguiente «conversación»…
[Versión en inglés de la entrevista a Matt Kindt]
David Fernández.- Iniciaste tu carrera profesional de la forma más atrevida: lanzándote a la autoedición de 20 copias de una obra que distribuiste a diferentes editores en la Convención de San Diego. ¿Cómo recuerdas esa etapa, imaginamos cargada de ilusión? ¿Y la primera llamada de un editor aceptando tu proyecto?
Matt Kindt.- Pensé que ese viaje a San Diego iba a ser mi única oportunidad de que publicasen mi trabajo, y de poder ganarme la vida como autor de comics. Si no hubiese funcionado y hubiese vuelto del viaje de vacío, sin que nadie se interesase en mi primera serie (Pistolwhip) hubiese seguido en mi trabajo como diseñador gráfico, escribiendo y dibujando en mis ratos libres. No me hubiese hecho mucha gracia, pero hacer comics exige tanto tiempo y energía que salir del trabajo y ponerse a escribir desde que llegas a casa hasta la noche es demasiado duro. Así que algo tenía que quedarse fuera: o el trabajo, o los comics. Cuando volví de San Diego sentí que ya había hecho todo lo posible: había hecho la mejor serie posible, y se la había dado a todo editor interesado en publicarlo. Dicho esto, cuando me llamaron de Top Shelf una semana después, no me lo podía creer. En cuanto colgué, después de hablar con Chris Staros, me puse a saltar literalmente por toda la casa. Fue un momento equivalente a casarme o a tener a mi primera hija, Ella.
David Fernández.- ¿Cómo influyen tus conocimientos académicos de Arte y tu experiencia profesional en el campo del diseño gráfico, a la hora de sentarte en el tablero de dibujo? ¿Cuáles crees que han sido las enseñanzas más valiosas obtenidas de ambas experiencias?
Matt Kindt.- Además de la experiencia práctica que me ha proporcionado – en lo relativo a producción e imprenta – me ha permitido tomar el control de mis colecciones, desde la presentación al diseño de la portada. Por otra parte, creo que saber qué se puede y qué no se puede hacer a nivel de diseño, los aspectos técnicos, te permiten ser más creativo. Uno de los aspectos más importantes que he aprendido gracias a mi experiencia es dejar que el contenido de la historia dicte el aspecto de la serie. Soy un gran estudioso del diseño: me encanta diseñar comics, así que cada vez que me embarco en un proyecto nuevo, intento hacer mi presentación soñada. Algo que te despierte la curiosidad sin siquiera conocer su contenido.
Portadas Pistolwhip, Pistolwhip: The yellow menace y Mephisto and the empty box
David Fernández.- Partiendo de la especial implicación del destinatario de un cómic durante su lectura, de los numerosos recursos narrativos y artísticos aplicables, de la intensa y casi mágica relación imagen – palabra, y de las infinitas posibilidades y margen de experimentación que presentan los tebeos, habida cuenta de su juventud, ¿por qué crees que en círculos académicos y artísticos goza de tan poca consideración?
Matt Kindt.- Bueno, creo que los comics todavía están dando sus primeros pasos como medio. La prosa tiene mucho más tiempo a sus espaldas, y por lo tanto es un medio más aceptado, una forma de expresión artística más considerada. El comic tienen que afrontar varios obstáculos, como quitarse el estigma de ser solo “para niños” (por lo menos aquí en América), o la mayor dificultad de elaborar una historia visual y literaria frente a escribir sobre una página en blanco. Un guionista tiene que buscarse un dibujante o encargarse él mismo del aspecto artístico, y no hay mucha gente capaz de escribir y dibujar bien. Pero creo que poco a poco estamos superando esos obstáculos: los comics están teniendo una acogida mucho mejor ahora que hace diez años. Cuando era niño, apenas podía encontrar comics en las librerías, y ahora hasta la tienda más pequeña tiene una selección de novelas gráficas.
Creo que es difícil conectar y retener al gran público. Un buen ejemplo es uno de mis escritores favoritos, Philip K. Dick. Sus historias se enmarcan dentro del género de la ciencia ficción pulp, pero siempre son algo más que eso. Al final, cada vez más gente reconoce su trabajo, se interesa por él y acaba comprándolo. Ahora si vas a una librería siempre encuentras una sección de “ficción-literatura” en vez de “ciencia ficción”. ¿Cómo consigue darse ese salto? No estoy seguro, pero creo que aquellos comics que consigan mantener su popularidad en el tiempo acabaran dándolo.
David Fernández.- Junto a Jason Hall realizaste el cómic Pistolwhip, que supuso vuestro contacto con Top Shelf. ¿Cómo surgió esta historia y qué hizo que tras diferentes obras de corte autobiográfico te decantaras por el género negro?
Matt Kindt.- Hacía mini-comics, la mayoría autobiográficos. Fue el periodo en el que trabajaba en mis primeros diseños gráficos… que suponían una experiencia horrible. Así que acabé escribiendo sobre aquellas experiencias, lo que convirtió el hecho de hacer comics en otra experiencia horrible: no me reportaban ninguna novedad o diversión, era revivir los malos momentos de mi trabajo diario. Así que decidí que si iba a dedicar tanto tiempo a escribir y dibujar, por lo menos que me resultase divertido. Que dibujase lo que quería dibujar, que contase lo que quería contar. Siempre he sido un gran aficionado a las películas de género negro, y de ahí surgió Pistolwhip.
Portada y cuatro páginas de Mephisto and the empty box
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David Fernández.- Has continuado la historia a través de Mephisto and the Empty Box y Pistolwhip 2. ¿Todavía tienes en mente más historias protagonizadas por este personaje?
Matt Kindt.- Al principio quería hacer una serie de novelas gráficas con los personajes de Pistolwhip, pero la colaboración con Jason Hall no funcionó. Además, sentía que era un compromiso demasiado grande. No fui capaz de hacer las historias que había planeado, y sentí la necesidad ocuparme tanto del guión como del dibujo. Y de ahí surgió el universo de 2 Sisters y Super Spy.
David Fernández.- Precisamente con 2 Sisters te adentraste en el marco histórico de la II Guerra Mundial, para narrar una trama centrada precisamente en las peripecias de dos hermanas en Inglaterra. ¿Qué es lo que tanto te atrae de esta época histórica y porqué te decantaste por ella para este tebeo?
Matt Kindt.- Mi abuelo murió en la 2ª Guerra Mundial. Las fotos en las que aparece él entrenando y trabajando en una radio de campo me causaron una gran impresión de niño… me interesa aquella guerra y las historias que surgieron de aquel periodo, así como las películas: cine de género negro, y casi cualquier cosa del periodo post-bélico. Historias oscuras de aislamiento y soledad. A medida que leía e investigaba fueron interesándome más la vida de los espías que tenían que vivir una vida falsa por un bien (o un mal) mayor. La idea de estar atrapado en una existencia falsa me resulta muy interesante, creo que es una gran fuente de historias.
David Fernández.- Dentro de ese mismo contexto histórico, revisitaste el particular “universo” creado en 2 Sisters en Super Spy. ¿La idea surgió durante la realización de 2 Sisters, o con posterioridad?
Matt Kindt.- Siempre he pensado en 2 Sisters como parte de una serie de historias, como los comics de Pistolwhip. Me gustó la idea de tener un gran elenco de personajes y poder pasar de uno a otro. De hecho, hice una historia de Super Spy antes de escribir 2 Sisters – el primer capítulo de Super Spy fue el capítulo de “Henry” – en formato de tira para una galería de arte. Después de terminar aquella historia me interesé por hacer más historias de ese estilo, y así fue como nació 2 Sisters.
Portadas de 2 Sisters, Super Spy y Super Spy: The lost dossiers
David Fernández.- Al parecer, la inicialmente realizaste planchas para una exposición artística. ¿En qué momento decidiste que querías contar esas pequeñas historias, que derivan en la gran historia que es Super Spy?
Matt Kindt.- Diría que la idea empezó con la galería de arte para la que hice la tira de Super Spy. Recuerdo estar sentado en mi casa, esbozando y escribiendo distintas ideas para los personajes y las historias… entonces oí en las noticias la historia de una niña que había dado de comer piedras a una foca en el zoo, y la foca murió. Aquella historia acabó convirtiéndose en el primer capítulo de Super Spy: usé aquella historia para que un personaje tuviese un correlato con la realidad.
David Fernández.- Tras tomar la determinación de realizar ese tebeo, te decantaste por el formato webcomic. Cuando surgió la posibilidad de que Top Shelf lo publicara en forma de tomo ¿te dio muchos quebraderos de cabeza adaptarlo a un formato diferente? Como historietista, ¿qué te aporta un webcomic que no pueda aportar un cómic tradicional, y viceversa?
Matt Kindt.- Bueno, estaba bastante seguro de que Top Shelf iba a publicar Super Spy, mi próxima serie, desde el principio. Pero ya que la historia estaba tan fragmentada, pensé: ¿por qué no colgarla en internet a medida que la voy publicando? Uno de los problemas de ser historietista es que el tiempo que dedicas a preparar la siguiente colección, desapareces. Yo no quería desaparecer un año entero, así que me decidí a publicar una historia semanal. Así, mis lectores podrían seguir en contacto con mi trabajo, ver qué estaba haciendo para hacerse una idea de lo que se iban a encontrar. Eso también me permitió tener un feedback inmediato con lo que publicaba, al contrario que con los formatos tradicionales, en los que oyes la opinión del público después de haber publicado. Estuvo muy bien, y me mantuvo inspirado y con motivación para hacer la historieta semanal incluso cuando no me apetecía dibujar. La otra ventaja fue que pude probar muchas más cosas con el color. Hasta Super Spy todas mis series habían sido en blanco y negro y asumí que Top Shelf también la publicaría así, pero cuando vieron lo integrado que estaba el color con la historia decidieron que tenía que publicarse a color.
David Fernández.- En esta obra –Super Spy– destaca la estructura narrativa “aparentemente desordenada”, que en realidad potencia sobremanera la sensación de sorpresa del lector, quien poco a poco va conociendo detalles que tiran por tierra los prejuicios que se forma acerca de la personalidad y motivaciones de los personajes. ¿Fue una opción muy premeditada desde fases iniciales del proyecto, o en un principio pensaste en una estructura cronológica lineal?
Matt Kindt.- No, nunca me he planteado contar la historia de forma cronológica, siempre he sido un gran aficionado de la narrativa no lineal. Creo que da lugar a momentos muy divertidos, y es un formato estupendo para describir personajes y revelar giros argumentales. Es muy, muy divertido. No escribí la serie de forma lineal para luego volver a ella y desordenarla, lo escribí tal y como se publicó. Así es como quería que fuese la historia.
Preview de 4 páginas de Super Spy, extraida de la página web de Norma Editorial
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David Fernández.- En relación a la pregunta anterior, los diferentes capítulos presentan una clara diferenciación estilística, tanto en planificación de página, como en recurso gráficos y cromáticos empleados que derivan en una disparidad muy armónica y narrativamente justificable. ¿Decantarte por una u otra opción obedecía a criterios intuitivos o racionales?
Matt Kindt.- Intento que sean la historia y los personajes quienes dicten la imagen y el dibujo. Que el contenido determine el estilo. Algunas historias sobre personajes concretos necesitan tener un aspecto distinto porque estás hablando de una persona diferente. En cuanto al color, está bastante estandarizado en función de la ubicación geográfica del personaje: así, para Inglaterra y Alemania elegí colores fríos y claros, y tonos cálidos para Francia y España.
David Fernández.- Los protagonistas de Super Spy parecen instalados en la melancolía y la tristeza… Son pesimistas acerca de la posibilidad de salir indemnes de una situación que en la mayoría de las ocasiones no han buscado, y ha afectado sus vidas de forma muy drástica. En definitiva, el tono es predominantemente serio. ¿Fue concebido así desde un primer momento?
Matt Kindt.- Lo planeé en cierta medida: disfruto con las historias tristes, pero con un punto divertido. Creo que aunque la mayoría de la serie es oscura y un poco deprimente, también tiene sus momentos de humor; y que el protagonista de Super Spy es trágico a la vez que divertido. Todos los libros y películas sobre espías le dan un aire de glamour y emoción a la profesión, pero a medida que escribo la historia y me pongo en su lugar me doy cuenta de que la vida real de un espía tiene que ser un poco más desagradable.
David Fernández.- Una de las peculiaridades que rodean a esta obra es que si el lector lee los capítulos en el orden asignado a cada “dossier”, lo hará de forma cronológica. Haciendo una analogía cinematográfica, sería como ver el film Memento, de Christopher Nolan, siguiendo el montaje cronológico disponible en diferentes ediciones de DVD. Personalmente, me parece una idea muy curiosa, pero entiendo que de este modo pierde gran parte de su fuerza e impacto. ¿Qué opinas al respecto?
Matt Kindt.- Estoy de acuerdo. La escribí con el mismo orden que la publicación final, pero añadí el orden cronológico por si alguien quería leerlo así. Algunos lectores me han comentado que les ha gustado leerla “desordenada” por primera vez, para luego volverla a leer en orden y rellenar los huecos que hayan podido quedar tras la primera lectura, sobre todo aquellos referidos a los personajes y a las relaciones que hay entre ellos.
David Fernández.- Teniendo presente los emplazamientos geográficos y las circunstancias históricas relacionadas con la trama de Super Spy, ¿hiciste especial hincapié en el proceso de documentación? ¿A qué fuentes acudiste?
Matt Kindt.- Leí muchas historias sobre la vida durante la 2ª Guerra Mundial (las memorias de Helen Forrester son particularmente buenas). Muchas de mis historias están basadas en historias reales. Para documentarme usé un libro que recopila titulares del día a día de la guerra, que me ayudó mucho a ordenar los acontecimientos.
David Fernández.- En Super Spy: The Lost Dossiers, recopilaste diferentes historias que no tuvieron cabida en el primer tomo. ¿Crees que todavía quedan historias por contar protagonizadas por estos personajes?
Matt Kindt.- Sí, tenía tres o cuatro historias que había publicado en internet durante aquel año en el que preparé Super Spy, y mientras lo editaba pensé que aquellas historias no encajaban narrativamente. Había personajes que no encajaban en la globalidad de la historia pero funcionaban bien por sí mismo, así que acabé haciendo Lost Dossiers con anotaciones para Super Spy y un montón de esbozos, esquemas, etc.
David Fernández.- Tras Super Spy, te embarcaste en un proyecto de ciencia-ficción titulado End of the word, mezcla de prosa, ilustración y cómic. ¿Cómo te las apañas para, como ya hiciste en Super Spy, encontrar el equilibrio en la narración echando mano de recursos tan variados? ¿Qué nos puedes comentar acerca de este tebeo?
Matt Kindt.- Publiqué la novela End of the world después de Super Spy. Hacer Super Spy resultó una experiencia agotadora, estaba cansado de hacer comics durante un año entero, así que cogí todas las anotaciones y esbozos que había ido escribiendo para una hipotética novela durante ese año y la terminé. Se parece mucho a Super Spy en tanto que los capítulos y la narrativa dictan los acontecimientos: hay páginas de cómic, ilustraciones, capítulos escritos como guiones de televisión, como poemas, comentarios… tiene un poco de todo, pero es muy divertido. Tan divertida como puede ser una novela sobre el fin del mundo, claro. Es mi trabajo más personal hasta la fecha: trata sobre un marido, una mujer y la hija de ambos recorriendo el país después del fin del mundo. No he tenido tiempo de mostrarla a ninguna editorial, ya que he estado trabajando en dos novelas gráficas para 2009: cuando estén terminadas, podré centrarme en publicar la novela.
David Fernández.- También has colaborado en la antología en cómic de El Escapista, de Michael Chabon. ¿Qué tal resultó la experiencia?
Matt Kindt.- Era un gran aficionado de The Amazing Adventures of Kavalier and Clay, y me invitaron a hacer una historia para una antología de Dark Horse. Fue muy divertido, y me gustó poder contribuir a la mitología que Michael (Chabon) había construido. Ha sido uno de los momentos cumbres de mi carrera.
David Fernández.- En el campo del diseño, ha sido muy alabado tu trabajo en colaboración con Brett Warnock en la edición de Lost Girls, de Alan Moore y Melinda Gebbie, trabajo por el que recibisteis una nominación a los Premios Eisner. ¿Se implicaron de algún modo Moore y Gebbie, o por el contrario os concedieron total libertad? ¿Cómo surgió la idea de presentar un formato y edición tan peculiar?
Matt Kindt.- Bueno, Alan y Melinda tenían algunas ideas claras sobre lo que querían para la serie, ya que estaban dedicándole mucho cariño. Creo que me escogieron para los diseños por mis trabajos previos: sabían que sería capaz de lograr el aspecto que ellos querían que tuviese. Para mí fue un honor trabajar con ellos. .
David Fernández.- En relación a la pregunta anterior, ¿cómo has recibido las diferentes nominaciones premios tan prestigiosos como los Eisner o Harvey? Profesionalmente, ¿has notado un cambio significativo derivado de dichas nominaciones?
Matt Kindt.- Creo que la gente presta más atención a tu trabajo después de haber sido nominado. Es un honor y ayuda a aumentar el público de mi obra, así que me alegro mucho. Profesionalmente, creo que contribuye a llamar la atención de editores y editoriales. Da bastante tranquilidad no tener que preocuparse de cuándo sacarás tu próxima obra, sabiendo que cuando quieras hacerlo tendrás a un editor en la puerta.
Commissions: homenajeando a los clásicos
David Fernández.- Comparando las obras apreciables en tu bibliografía, ¿cómo entiendes que ha variado tu propio estilo a lo largo de los años? ¿De qué aspectos estás especialmente satisfecho y cuales te gustaría mejorar o potenciar?
Matt Kindt.- Siempre me ha gustado escribir, y aunque echando la vista atrás me satisfacen bastante mis historias, nunca estoy totalmente satisfecho con el dibujo: en cuanto termino de publicar una serie, ya estoy trabajando en la siguiente pensando que tengo que dibujar un poco mejor, que tengo que mejorar el apartado gráfico. Eso es bueno en la medida en que ese esfuerzo me hace estar cada vez más cerca de plasmar aquello que imagino, pero también me hace ser muy crítico con mis trabajos previos.
David Fernández.- ¿Podrías comentarnos qué materiales, tanto artesanales como informáticos, sueles emplear en la realización de tus tebeos?
Matt Kindt.- Utilizo un pincel Kolinsky Sable Nº2 y tinta Sumi para hacer la base. Después uso tinta Windsor Newton para el color básico (como en Super Spy) y acuarelas tradicionales para añadir el resto de los colores. Todo ello sobre papel preparado para acuarela.
David Fernández.- ¿Qué proyectos te esperan tanto a medio como a largo plazo?
Matt Kindt.- En 2009 publicaré una serie bajo el sello de Dark Horse llamada 3 Story: The Secret History of the Giant Man y una novela gráfica que no puedo anunciar todavía. Sólo he terminado 28 páginas, por lo que la editorial quiere esperar un poco a que quede menos para publicarla antes de hacer declaraciones.
Cinco páginas de 3 Story: The Secret History of the Giant Man
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David Fernández.- A lo largo de los años has desarrollado tu faceta docente a través de talleres de cómic en la biblioteca de St. Louis. Has comentado que tu objetivo era el de que los asistentes “alcancen la misma explosión de emoción que yo padezco cada vez que tengo una nueva idea para una historia o cojo un libro que tenga muy buena pinta.”. ¿Crees que lo ha conseguido? ¿Qué es lo que más te ha sorprendido de esta iniciativa?
Matt Kindt.- Creo que sí lo he conseguido: he recibido muchas respuestas sobre Super Spy, más que con cualquier otra serie que haya hecho nunca. Creo que por fin he conseguido conectar con un montón de gente a la que le gustan y emocionan las mismas cosas que a mí. Cada vez que hago una serie intento hacer el comic que a MI más me gusta, una serie que tenga todo lo que me gusta. Lo irónico es que para cuando lo estoy terminando, estoy tan harto de él que ya no me gusta. Pero oír que a la gente le gusta ayuda mucho, me devuelve el interés.
David Fernández.- En diferentes entrevistas demuestras tener gustos muy eclécticos: desde Dan Clowes hasta Chris Ware, pasando por Grant Morrison, Lewis Trondheim o Will Eisner. ¿Cuáles son los tebeos que has leído más recientemente? ¿A qué autores clásicos o modernos destacarías entre tus influencias?
Matt Kindt.- Me gustan mucho los libros de La Mazmorra de Trondheim, Sfar, etc. También estoy terminando de leer el Cuarto Mundo de Jack Kirby, Terry y los piratas, Dick Tracy, estoy volviendo a leer Watchmen, And the Hippos Were Boiled in Their Tanks, de Burroughs y Kerouac, Entrevista con el vampiro de Anne Rice… he estado tonteando con la idea de hacer una serie de vampiros, así que intento leer todo el material relacionado a mi alcance para no repetir lo que ya se ha hecho. Pero creo que está pasando de ser una historia de vampiros a algo distinto, así que ya veremos en qué queda la cosa. En cuanto a mis mayores influencias, yo diría que son Nabokov (Pale Fire), Philip K. Dick (Man in the High Castle) y Joseph Heller (Catch-22).
Detalle de la web de Super Spy (haced click sobre la imagen para acceder)
David Fernández.- Llegados a este punto, tan sólo nos queda agradecerte la amabilidad y paciencia demostradas y desearte la mejor de las suertes, tanto en lo profesional como en lo personal.
Matt Kindt.- ¡Muchas gracias! Me alegro mucho de haber hablado con vosotros, espero poder conoceros en persona algún día. ¡Y espero que los lectores disfruten de Super Spy!
Como se ha comentado en la entrevista, Pistolwhip fue una de las primeras obras que centró la atención en el talento de Matt Kindt. Con Jason Hall como compañero de equipo creativo, ambos autores se embarcaron en la realización de un tebeo trufado de misterio y elementos propios del género negro. A continuación os ofrecemos una preview de 10 páginas pertenecientes a este tebeo, publicado en su edición original por Top Shelf Productions.
Cinco páginas de Pistolwhip
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Otras cinco páginas de Pistolwhip
(haced click sobre las imágenes para ampliarlas)
Tras la cálida acogida recibida por Pistolwhip, Jason Hall y Matt Kindt se embarcaron en la realización de una secuela, titulada Pistolwhip: The yellow menace, donde retomarían el ambiente y los personajes del primer tebeo. A continuación, os ofrecemos otra preview de 10 páginas, al igual que la anterior, extraída de la página web dedicada a este cómic.
Cinco páginas de Pistolwhip: The yellow menace
(haced click sobre las imágenes para ampliarlas)
Otras cinco páginas de Pistolwhip: The yellow menace
(haced click sobre las imágenes para ampliarlas)
Además de servirle para mantener a sus lectores informados acerca del desarrollo de los diferentes proyectos en los que está involucrado, el blog de Matt Kindt ha albergado contenidos tan interesantes como el siguiente video. Originalmente grabado para servir de apoyo en las clases de «cómo hacer cómics» impartidas. El vídeo detalla el proceso de realización de una página de Super Spy…
Página web oficial de Matt Kindt.
Blog oficial de Matt Kindt.
Entrada de la Wikipedia dedicada a Marr Kindt.
Reseña de Super Spy publicada en Zona Negativa.
Super Spy en el blog USA de Norma Editorial.
Muy buena la entrevista. Cambiando de tema, ¿se sabe algo de cuándo saldrán los ganadores del concurso Super Spy?
Un saludo.
Pensaba escribir exactamente lo que puso tori. Pos eso.
Ah, y ojalá editen todo lo de este tío por aquí. Tiene muy buena pinta.
De nuevo un trabajo muy interesante, David. Os estáis luciendo con las entrevistas, ¡seguid así!
Super Spy lo tengo recién empezado, con esta entrevista aún tengo más ganas de seguir con ello.
Hola, tori, Parábola Durden e Iñaki! Disculpad la tardanza en responder… Gracias por los comentarios, me alegro de que haya gustado la entrevista (por cierto, en el horizonte inmediato hay algunas más… pero ya os iremos informando a su debido tiempo;) ).
En cuanto al concurso, publicaremos a los ganadores en las próximas 48 horas.
E Iñaki, ya contarás qué te ha parecido una vez que termines la lectura. Personalmente, y guiándome por las reseñas que sueles escribir en Entrecomics, me da la sensación de que te gustará…
Un saludo!
Por favor, daña a la vista ver Nabakov en vez de Nabokov. Luego nos quejamos cuando escriben Allan Moore en vez de Alan Moore. Gracias.
Que sensibilidad, la suya, jln. Y qué deprimente que de siete páginas de entrevista el único comentario se refiera a un simple error cometido por el entrevistado.
Ni idea de este autor. ¿Cómo definiriais su trabajo, para hacerme una idea?
Aparte de Superspy, ¿qué obras suyas hay publicadas aquí?
Si no me quivoco, es la primera obra de Kindt publicada en España. Y definirlo… complicado… por su trazo, me recuerda -es más una sensación que una apreciación racional- a autores como Craig Thompson, Frederik Peeters o David Rubín. Pero a su vez, es muy diferente a los dibujantes que acabo de comentar…
En cuanto a mi opinión acerca de Super Spy, puedes echarle un vistazo a la reseña que escribí, recopilada en la sección «enlaces de interés» de esta entrevista.
Un saludo!
Muy interesante la entrevista, ha merecido la pena la espera, jeje…
De entre todas las ilustraciones que la acompañan, me quedo con sus versiones de los comics de Marvel y DC, chulísimas y muy vistosas.
Me gustan mucho este tipo de autores con un desarrollo formal tan marcado pero siempre supeditado a lo que se está contando.
Interante entrevista, enhorabuena
Muchas gracias a los dos! Pronto, más 😉
Una entrevista magnífica. Y hoy me he comprado el Super Spy a ver qué tal 😉