Spider-Man: Noir

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Guión: David Hine, Fabrice Sapolsky
Dibujo: Carmine Di Giandomenico
Cubiertas: Patrick Zircher
Libro con solapas. 104 páginas. 10.25 €

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Cuando hace unos días publicaciones la noticia de que Sony Picture planeaba reiniciar la franquicia arácnica en su versión fílmica muchos se llevaron las manos a la cabeza, y es que no nos engañemos, no hay nada más pesado para un aficionado al comic que te cuenten una y otra vez el origen de un heroe pues te lo conoces al dedillo por las infinitas veces que lo has visto ya sea en comic o en cine.

Es por ese motivo que cuando cayó en mis manos Spider-Man: Noir y tras ver que eran tan solo «cuatro» números pensé: «Bueno la historia se quedará en tres números porque malgastarán un número completo si no más en volvernos a contar la picadura de la araña, la charla con Tío Ben, su asesinato y posterior remordimiento de Peter tras contemplar que aquel que asesinó a su tío es la misma persona a la que dejó escapar tras cometer un robo», más si tenemos en cuenta que se trata de un nuevo universo y por tanto hay que explicar el origen… El caso es que para mi sorpresa me encontré que aunque David Hine, guionista de la obra, sí se detiene en ese punto es algo tan novedoso que casi cuesta reconocer a Peter Parker, de hecho, David se «inventa» un personaje magnífico y lo único que hace es rodearlo de «nombres conocidos» del Universo Marvel y dotarlo de un entorno completamente diferente del que estabamos acostumbrados, es el nuevo universo Noir, o lo que es lo mismo, la reubicación de nuestros héroes en la década de los treinta, una época dificil, convulsa y sobretodo llena de situaciones interesantes que explorar y explotar al contar con la libertad de poder moldear de forma diferente a los héroes de siempre.

Como os decía, en Marvel Noir: Spider-Man los personajes están ahí. Tía May, como es obvio, juega un papel bastante importante aunque en esta ocasión ejerce de activista comunista, Ben Urich quien juega uno de los papeles más importantes también es periodista del Daily Bugle pero está tremendamente enganchando a la heroína lo cual será determinante para el desarrollo de la historia y el viejo gruñon de J.J. Jameson quizás sea el que menos cambie respecto a lo que conocemos aunque como verán aquellos que lean la historia que tras él, se esconde más de lo que se muestra…

Quizás uno de los apartados más destacados sea la reconstrucción de villanos que han llevado a cabo David y Carmine, siendo estos capitaneados por Norman Osborn como señor del crimen, alguien que tiene aterrorizada a toda la ciudad y comprados a todos aquellos que le podrían hacer frente: políticos, policía, prensa,… Norman está acompañado de sus secuaces que con un gran acierto nos cuenta el guionista que los reclutó en un circo de monstruos, de esta forma tenemos a Kraven, Los forzadores y un terrorífico Buitre, para mí el más conseguido de todos ellos, a quien han sabido verle el potencial más allá de lo que estamos acostumbrados a ver en el universo tradicional de Spider-Man donde éste no pasa de ser un anciano con alas, aquí es mucho más, es un carnívoro sanguinario que a la postre sería quien terminaría con la vida del tío de Peter, aparece también otro villano tradicional aunque me reservo comentar quién es pues su aparición es uno de los grandes golpes de efecto de la historia.

Un Buitre como nunca antes habíamos visto

Hemos hablado del grupo de secundarios, de los villanos, pero no del héroe y aquí habría que hacer mención a tres nombres: Peter Parker, Ben Urich y la Gata Negra, la última es a la postre la novia de Ben Urich, ¿os acordáis de cuando os decía al inicio de lo diferente que era respecto al universo original y lo interesante que esto le hacía? Esta jugará un papel transcendental al final de la historia para incriminar a Norman Osborn. El segundo héroe encubierto es Ben Urich quien se convierte en un mentor para nuestro joven protagonista y lo incorpora al staff del Daily Bugle como fotógrafo acompañante de el, por desgracia su afición a las drogas y el hecho de que esté relacionado con Norman Osborn le llevará a perder el respeto que se había ganado ante Peter cuando este lo descubra, y cometiendo un acto audaz, su último acto, a fin de recuperar el honor perdido.

Ben Urich en horas bajas…

Centrándonos en el autentico protagonista de la obra, Peter Parker, encontramos algunos paralelismos con el Peter que conocemos, aquí también murió su tío, en esta ocasión asesinado por el Buitre siendo contemplado por Osborn y el resto de su gente – y algún que otro invitado sorpresa – al contrario que en el universo 616 la adquisición de poderes sería posterior aunque eso sí, sería como consecuencia de la picadura de una araña, esto le llevaría a disfrazarse – de una forma menos colorida – para intentar combatir el crimen que azotaba New York y en especial combatir a un Norman Osborn al que parece que nadie quiere hacer frente.

Un Spider-Man muy diferente del que estamos acostumbrados

Spider-Man: Noir probablemente sea una de las mejores miniseries realizadas de Spider-Man en los últimos años, lejos de quedar lastrada ante el problema de tener que volver a contar su origen David Hine convierte este handicap en algo que juega a su favor enseñándonos un Peter Parker completamente diferente lo cual lo hace de lo más interesante, por otro lado, el tratamiento de los personajes es sencillamente delicioso y no le tiembla el pulso a la hora de cargarse a uno de los personajes más importantes, el dibujo de Carmine está a la altura del trabajo de David, es un autor que muestra lo que ya viene haciendo en sus últimas obras, a quien le haya gustado su trabajo en Daredevil o en la más recientemente reseña obra de Magneto le encantará su trabajo en esta miniserie, a aquellos que no les atrajo su estilo mejor que no se acerquen a esta obra pues quedaran defraudados, personalmente a mí me encanta y me he convertido en un buscado de obras de Carmine. Dicho esto, la obra es absolutamente recomendable para aquellos que gusten de las historias de superheroes pero también para aquellos que quieran encontrarse una visión diferente del héroe más acercada a las obras noir que al género superheroico. Por cierto, un último apunte, otros personajes han visto como eran adaptados a este universo Noir, y tal ha sido el éxito que incluso después de la primera andanada de miniseries en Estados Unidos algunos – Spider-Man entre ellos – están repitiendo con una segunda miniserie, el universo Noir parece que ha llegado para quedarse.